— ¡Scoot! —grité y corrí hacia él, nunca pensé que lo echaría tanto de menos—

— ___ harás que me caiga —decía él mientras soltaba unas cuantas carcajadas— ¡Martin, quítamela! ¡Auxilio!

Sentí como era retirada del cuerpo de Scoot para luego parar en el cuerpo de Martin, donde me cargó mientras yo lo abrazaba.

— Te extrañé Scoot —saludó Martin a su mánager—

— Yo también, hijo, espero que no te hayas metido en más problemas.

Después de recibir a Scooter en el aeropuerto nos dirigimos a un pequeño restaurante para poder desayunar.

— ¿De qué me he perdido? Cuéntenme las últimas calentitas —dijo frotando sus manos—

— ___ es débil al alcohol y es muy rara cuando está ebria —echó unas risas al aire— Se pone a hacer twerk y a cantar como loca.

— Martin corrió en ropa interior por mi casa y mi mamá casi lo aspira cuando estaba limpiando mi cuarto.

— ___ se echa gases en la noche.

— ¡Eso no es cierto!

— ¡Claro que sí! ¡Incluso me dijiste que aguante la respiración para no oler!

— ¡Eso es mentira! ¡Eso me lo dijiste tú!

— Creo que ya he oído suficiente —dijo mientras reía, cosa que también nos unimos a él— Martin, tu mamá esta ansiosa por verte.

Esa noticia me entristeció un poco.

— Le dije que te traería lo más antes posible —él asintió— Y al parecer... También quiere conocer a cierta señorita —dijo mirándome mientras alzaba las cejas—

¿Sabe de mí? ¿¡Su familia sabe mí!?

— Pero... Yo no le he mencionado nada a mi familia.

— A veces creo que te olvidas de que eres famoso y que tu noviazgo lo hiciste público.

— Ah, es cierto —rió un poco—

— ___, vendrás con nosotros.

— Por mí genial pero...

— ¿Tus padres, verdad? —asentí— ¿Están en casa?

— Mi mamá llega en la noche, plan de 8pm.

— Genial, hablaré con ella... Y mañana nos iremos.

— ¿Y si te niega?

— Soy Scooter Braun, nadie me dice que no.

— No —dijo Martin—

— Muchachito, sé educado y habla cuando hayas terminado de pasar la comida.

—tragó— No —sonrió burlonamente—

— Respeta a tus mayores.

— Viejo.

— Haz silencio, y traga tu pizza antes que la aviente al piso y la pise —lo amenazó mientras que yo moría de risa por su pequeña «discusión»—

Estábamos ya en mi casa, esperando a que mi mamá llegue. Todos recostados en el sofá mientras veíamos cualquier cosa en la televisión, no prestaba atención al programa ese, estaba concentrándose mientras mordía mis uñas por los nervios.

— ___, tranquila —dijo Scoot— Verás que todo saldrá bien.

— ¿Qué tal si los bota? O sea, entra y al instante los bota sin querer hablar y eso.

the dream of garrix ✧ [m.g.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora