• Destino •

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Las hermanas de la misericordia.

Era un famoso orfanato en Riverdale, en el cual mantenían siempre a más de 100 personas, entre niños y adolescentes.

La protagonista de esta historia es una hermosa rubia, Elizabeth Cooper, la cuál se había críado en aquel orfanato.

Nadie sabía de su familia, ni siquiera las hermanas, pues una madrugada solo escucharon un llanto desde la puerta principal, donde hallaron a una bebé en una canasta.

Lo único que venía con ella era una manta la cual la cubría del frío y un pedazo de papel en el cual habían escrito "Elizabeth Cooper - 17/03/2004" y asumieron que esa era su fecha de nacimiento.

Ella siempre había sido una niña muy risueña, alegre y sonriente, aunque era muy traviesa, todos la amaban y la conocían en aquel orfanato.

Ahora ella tenía 19 años, era una de las pocas personas que se encontraban ahí con más de 18 años. Solo habían 5.

Dilia con 21, Samuel con 19, Sophie de 18 y ella.

Oh, y olvido uno: Jughead Jones, el cuál tenía 18 años. Y de hecho, ese día, era su cumpleaños.

Era casi medianoche... Todas las luces estaban apagadas.

Eran tres edificios: el principal donde estaban los salones de clases, la capilla, los comedores entre otros ambientes.

El edificio junto al principal, del lado derecho era el de las chicas, este solo estaba repleto de habitaciones y la lavandería.

Y el último, era el que estaba del lado izquierdo, el de los chicos, lo mismo, solo habitaciones y una lavandería.

Las chicas no podían ir al edificio de los chicos y viceversa, estaba prohibido, y esa era una de las reglas más importantes del orfanato.

Solo se podía durante la mañana, con el permiso de la directora del orfanato y el acompañamiento de la misma, con una buena razón.

Ahora, las reglas en cada edificio individualmente, no eran tan estrictas. Por ejemplo, las chicas y los chicos tenían el permiso de hacer "pijamadas" todos los viernes, pero también si la directora del convento estaba enterada de esto y de quienes estarían presentes.

Eran dos personas por habitación, pero esa noche, la compañera de habitación de Betty, su mejor amiga, estaría en una pijamada con otras de sus amigas.

Pero Betty seguía en su habitación.

Tal vez se preguntarán, ¿Por qué se había quedado sola?

Bueno, ya van a entender...

- Jones, confía en mi. -Samuel le dijo al pelinegro.

Ellos no se llevaban muy bien, sobre todo porque Samuel era mejor amigo de la rubia y Jughead un poco celoso, pero aún así, si de hacer algo por Betty se trataba, ambos intentarían al menos no insultarse cada 5 minutos.

Jughead rodeó sus ojos.

- Tengo días viendo desde mi ventana, justamente 5 minutos antes de medianoche, hay cambio de guardia y el campo queda totalmente solo y sin vigilancia.

Ambos vieron el reloj en la muñeca izquierda de Samuel.

- Faltan 3 minutos. -dijo Jughead.

- Si. Justo cuando el se mueva. -señaló a lo lejos a el guardia. - Debes correr justo frente a la entrada del edificio principal, pero lo mas cerca que puedas y sin hacer ruido, para que no te escuchen y además que nadie logre verte desde las ventanas.

- ¿Cuanto tiempo tengo? -preguntó.

- Exactamente 1 minuto.

- Lo suficiente.

Our History || One Shots Bughead y Sprousehart || • +18Where stories live. Discover now