Our History || One Shots Bughead y Sprousehart || • +18

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Betty se miraba al espejo, lista para ir al White Wyrm con su madre, pues esa noche se llevaría a cabo la fiesta para celebrar que su suegro, Fp, ya había salido de la cárcel.

Suspiró mirando su ropa, tenía una camisa sin manga de botones de color azul celeste y una falda rosa pastel.

Oh, su madre había insistido en que esa no era una ropa adecuada para ir a aquél bar, pero a ella no le importó.

Mordió su labio inferior y decidió desabrochar el primer botón de su camisa enseñando un poco más de su escote y luego soltó su coleta, dejando su cabello caer libre por sus hombros.

En eso, la puerta de su habitación se abrió y su madre, que estaba vestida completamente de negro sonrió de lado. - ¿Nos vamos, Elizabeth? -cuestionó.

Betty asintió y se levantó de la silla, y así ambas se fueron de la casa, subieron al auto de Alice y ella condujo al lado sur, directamente al White Wyrm.

Mientras tanto Jughead, quién ya estaba en el bar, se notaba un poco tenso, pero ni él sabía la razón, se acercó a Archie al verlo en una de las mesas solo.

- Ey, Archie. Hola. -saludó llamando la atención del pelirrojo.

- Hola. -el respondió.

- ¿Todo en orden? -cuestionó con preocupación al verlo suspirar algo nervioso.

Archie asintió varias veces. - Si... Si, si. Ronnie ya no tarda. -le comunicó. - Y aclararé todo... -le dijo y desvió su mirada del pelinegro. - Será algo bueno, Jug. -lo miró de nuevo.

- Eso espero. -Jughead suspiro asintiendo. - Ahora regreso, ¿Si? -explicó alejándose.

- Si. -aceptó su amigo.

Jughead caminó entre la gente mirando hacia la puerta, y pasó frente a la barra donde Toni lo miró.

- Jones... Te ves nervioso. -sonrió de lado. - ¿Quieres un trago? -ofreció.

- No, Estoy bien. Solo... Quiero vigilar. -admitió, aun con su mirada clavada en la puerta del bar.

Segundos después, por la puerta aparecieron las dos mujeres Cooper, pero toda su atención se la llevó su novia, quién a su parecer se veía bastante sexy, atractiva y perfecta como siempre.

Ellas caminaron con seguridad hasta el pelinegro, quién ya tenía una sonrisa en su cara solo por ver a su novia y pararon frente a él.

Betty le devolvió la sonrisa cuando el habló. - Wow... Betty. -dijo el. - Señora Cooper. -vió a su suegra. - Te ves increíble. -halagó, devolviendo su mirada a la Cooper menor.

- Ni que lo digas. -dijo Alice y se volteó a su hija. - Por desgracia no pude hacer que ella usara ropa adecuada. -dijo con fastidio y luego se alejó de ambos dispuesta a pedir un trago en la barra.

Betty se acercó más a su novio y el la tomó de la cintura mientras ella acariciaba sus brazos. - Yo... Hablaba de ti. -murmuró Jughead mirándola a los ojos.

- Te daré una sorpresa... Luego. -ella le confesó de manera coqueta.

- Linda, ¿Que quieres? -Alice interrumpió volteándose a su hija. - ¿Shirley Temple? -cuestionó. Betty asintió sin decir nada y Alice devolvió su vista al bartender. - Dame dos. -pidió.

Betty volvió a mirar a su novio y cuando sus miradas estaban conectadas, el se inclinó levemente para dejar un casto beso en sus labios.

Luego de un rato, Betty subió al escenario y desde arriba le hizo seña a sus dos mejores amigos quienes charlaban justo al final de las escaleras del escenario para que subieran.