INFERTIL | ᴏᴍᴇɢᴀᴠᴇʀsᴇ +21

CAPÍTULO 63

3 semanas después.

Jungkook corrió hasta sus padres para así finalmente después de mucho tiempo poder abrazarlos. Estaba tan feliz que incluso sus ojos se llenaron de lágrimas. Ambos estaban tan orgullosos de ver a su hijo con la misma sonrisa de antes y su misma forma de ser, sin miedo a decir algo "incorrecto", sin miedo a que alguien lo regañaría o golpeara. Jungkook era por fin una persona feliz.

- Nos alegra verte a ti también, Taehyung, cuidaste muy bien de mi hijo - sonrió la omega para así darle un abrazo al susodicho.

- Uhm, Jungkook, ¿quién es él? ¿Es de algún amigo? - preguntó confundido el padre del rubio al ver cómo aquel pequeño se escondía tras este último.

Jumin estaba un poco tímido, sus padres le habían hablado sobre sus abuelos y estaba con las ganas de por fin conocerlos pero siempre que había alguien nuevo en su vida, era algo tímido e incluso difícil de lograr conseguir su confianza. Al ver cómo aquella pareja lo veía incluso más no pudo evitar esconderse tras su madre.

- No... es... - sonrió poniendo su mano tras la espalda del pequeño invitándolo a salir de su escondite - mamá, él es Jumin, el niño del que siempre te hablé. Y él ahora es...

- Nuestro hijo - completó Taehyung.

La pareja adversa se quedó totalmente sorprendida que ni siquiera supieron cómo reaccionar. Fue la rubia quien se acercó primero al menor quién dio una última mirada a Jungkook para así caminar hacia adelante. Fue ahí cuando la mujer no pudo evitar volver a llorar y sin pensarlo un poco más se puso de cuclillas frente al pequeño para así acariciar su cabello y viendo de forma tierna el rostro de éste. Luego de unos segundos finalmente lo abrazó comenzando a llorar mucho más pues siempre había estado esperando un nieto pero por ciertas cosas no podía y aunque el niño frente a ella no tuvieran la misma sangre, lo sentía cómo si siempre hubiera estado ahí, siendo su nieto.

- Hola... - musitó al separarse con una gran sonrisa - yo soy tu abuela ¿no te acuerdas de mi? - sonrió.

El menor negó desviando la mirada hasta el alfa que se sentaba de la misma forma que su abuela y extendió su mano hasta el pequeño para así tomarla con delicadeza.

- Wow, estás tan grande... la última vez, eras un bebé - rió totalmente feliz.

Taehyung y Jungkook veían la enternecedora escena frente a ellos, podían notar cómo poco a poco Jumin iba tomando confianza e incluso demasiado rápido pero, quizás se sentía seguro al sentir un aroma similar al de su madre. Los cinco volvieron a casa y fue ahí cuando el pequeño, al estar todos en la sala hablando, les mostraba todos los juguetes que tenia y sus dibujos, era tan feliz con aquella familia que ahora él también pertenecía a ella.

- Oh, por cierto, mamá, papá. Tomamos la decisión de comprar una casa, cerca de aquí. Queremos darles su espacio, es algo... vital para ustedes cómo pareja tanto cómo para nosotros. No está muy lejos de aquí así que, si tú quieres visitarnos no tardarás más de 10 minutos en llegar - sonrió tomando la mano de su alfa.

- Y no se preocupen por él, ha sido muy fuerte. Todo está siendo cómo era antes y al fin puede decidir por él mismo otra vez - acarició el dorso de la mano adversa.

- Ten cuidado, Jungkook es de pedir mucho, eh, habían muchas cosas que me pedía cuando era adolescente, terminé comprándole incluso un auto y demás cosas - rió su padre - salió idéntico a su madre.

- Ay cállate, yo no soy así - se quejó la omega frunciendo su entrecejo para luego reír. - Jungkook, cariño, ¿Estás seguro de ésto? Sabes que no hay problema si quieres quedarte aquí, incluso puedo cuidar de mi nieto si ustedes van a trabajar - sonrió.

- No te preocupes, mamá, estoy seguro de lo que quiero, al lado de Taehyung me siento... con la capacidad de poder hacer lo que yo quiera. Y no me gustaría causarte molestias ahora que por fin te dieron tiempo de descansar, tenemos ya una niñera bastante buena.

- Bueno, si insistes tanto, entonces esta bien, hijo - habló su padre - ahora que por fin tienes a alguien bueno de tu lado, sé que estarás bien - sonrió.

- Es un gran honor para mi que digan eso, yo... les prometo que ahora Jungkook no pasará por ningún dolor - pasó su mano por la cintura del susodicho - y mucho menos ahora que ya tenemos nuestra propia familia.

- Eres un buen alfa, Taehyung-ah, supe que eras una gran persona desde que te conocí. Estamos muy orgullosos de ti - habló la omega.

Todos en aquella sala siguieron charlando sobre muchas cosas, todo estaba más perfecto que nunca, esa sensación de tener una familia tan amorosa los hacía sentir aquella conexión que era difícil de explicar, y aún más para Jumin y Taehyung pues ambos habían perdido a sus padres, por mucho tiempo habían estado solos pero ahora, tenían su propia familia.

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- Aquí tienes, amigo, ¿por qué me pediste esto? Espero que no estés drogándote, eh.

- Claro que no, es para... algunas cosas, nada especial - sonrió.

- Hoseok... dime que no has vuelto a esas cosas.

- ¿Yo? Por favor - rió - nada de eso, he cambiado, soy un policía ahora y mi deber es cuidar de los demás. Tranquilo, no serán para mi y tampoco para hacer daño. Sólo quiero que una persona se... - sonrió lascivo - divierta un poco, es muy gruñón.

- Entiendo, buena suerte con eso, debo irme ya, hablamos luego - se despidió aquel chico para luego sólo darse la vuelta y seguir su camino.

Jung bajó la mirada hasta aquella bolsa con ciertos tipos de droga para luego volver a sonreír. Tenía tantas cosas en su mente que estaba tan ansioso de poder hacerlas, les daría un buen uso, quería sentirse en las nubes, quería sentir la adrenalina y el extasis correr por todo su cuerpo.

Guardó aquello en el bolsillo interior de su chaqueta para luego subirse a su motocicleta e ir de nuevo a su casa. En unos días, si todo salía bien, podría tener la mejor aventura de su vida.