INFERTIL | ᴏᴍᴇɢᴀᴠᴇʀsᴇ +21

CAPÍTULO 45

Jungkook observaba hacia la ventana no logrando conciliar el sueño, ya era demasiado tarde pero su insomnio lo mantenía de aquella manera. Estaba bastante pensativo, no se esperaba tal cosa, no esperaba volver a hablar de su pasado de nuevo, era difícil y no quería volver a recordar tales actos que su esposo había hecho.

Puso su mano en la del alfa para así quitarla de su cintura, con lentitud se levantó intentando no despertar al susodicho y finalmente se puso de pie frente al gabinete que se encontraba al lado de su cama, lo abrió y cómo acto seguido, tomó su teléfono.
Se mantuvo observándolo por unos segundos pensando en si era buena o mala idea lo que planeaba hacer.

Dio un pequeño salto del susto al escuchar cómo el alfa se movía, antes de que éste volviera a moverse se dirigió hasta la sala en dónde tomó asiento mientras encendía la lámpara que estaba al lado. Presionó un pequeño botón en el artefacto para así ver cómo éste se encendía mostrando de primera... una foto de él junto a su anterior alfa. Sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas y sus labios formaron una sonrisa triste.

Al desbloquearlo pudo ver todos los mensajes entrantes de hacía mucho tiempo de sus amigos, del trabajo, del orfanato y... de Jimin. Habían demasiados mensajes y muchas llamadas perdidas provenientes de él, suspiró y luego de unos segundos presionó su chat. Todos los mensajes eran de arrepentimiento y al final, cómo ya era costumbre, lo maltrataba por haberse ido. Su llanto se hizo más grande mientras veía todo lo que tenía en aquel chat, pero hubo algo que realmente le dolió.

" Solamente quería compartir mi vida contigo, quería darte la familia que siempre quisimos, pero preferiste irte con el peor alfa que pudiste encontrar. Eso sólo me deja en claro que nunca me amaste, no lo hiciste cómo yo lo hice, no eres más que un pedazo de mierda, no sirves ni siquiera para darme un puto cachorro. Me hiciste la vida imposible y ahora yo te la haré a ti. No vas a escaparte tan fácil de mi, Jungkookie, soy y seré el único alfa al que recordarás hasta el último día de tu vida. Te odio."

Un fuerte dolor en su pecho apareció mientras leía aquello, nuevamente comenzaba a pensar en que él había sido el problema y no Jimin, lo había decepcionado tantas veces y al final lo hizo aún más al no poder darle un bebé. Dejó el teléfono a un lado para así limpiar su rostro y poder abrazar sus piernas.

Al cabo de unos minutos pudo escuchar unos pasos seguido del claro aroma de su novio por lo que nuevamente limpió su rostro. De reojo pudo ver cómo éste se sentaba a su lado mientras apoyaba su cabeza en su hombro. Una sonrisa se formó en sus labios y desvió la mirada hasta él notando lo adormilado que se encontraba.

— No me dejes sólo en la cama... no puedo dormir sin ti — balbuceó abriendo sus ojos para así poder ver al omega.

— Lo siento — susurró.

Taehyung se acomodó de mejor forma en el sofá para luego abrir sus brazos indicándole que quería abrazarlo. Jungkook soltó una pequeña risa para luego gatear hasta la otra punta del sofá en dónde al llegar se sentó a horcajadas en el regazo del adverso para luego abrazarlo y recargar su cabeza en el pecho de él.

— Entiendo que fue difícil, bebé — susurró acariciando el cabello del omega — Pero, ¿recuerdas lo que dijo el psicólogo? Tú no tienes la culpa de absolutamente nada, él... está mal de su cabeza y sólo proyectaba en ti todo lo que a él le daba miedo, así que... no debes sentirte mal por las cosas que viste ahí — su mirada se mantuvo en el teléfono que poco a poco se iba apagando pero a pesar de eso pudo ver los mensajes de Park — ¿Está bien? — sonrió separándose un poco para limpiar las lágrimas de su chico — los niños bonitos no lloran — susurró haciéndolo sonreír ya que aquello le había recordado a Jumin.

— ¿Por qué eres tan lindo conmigo? Eres un alfa muy cursi — rió viendo directamente a los ojos del susodicho.

— Lo soy porque... estoy enamorado — respondió con una sonrisa — y porque estoy feliz de que el omega más hermoso en el mundo me hizo caso luego de 10 años — hizo un pequeño puchero el cual nuevamente hizo reír al rubio.

— Lo siento, estaba ciego en ese entonces... — musitó.

— Pero ahora estás conmigo, y te daré todo lo que te haga feliz.

— Cariño... ¿crees que sea buena idea hablar con el chico que vino ayer? N-no sé si seré de ayuda y no sabría qué decirles — volvió a recostarse en el pecho del alfa.

— Hazlo sólo si te sientes listo, no te voy a presionar a hacer algo que no quieres. Aún así, si les das tu ayuda, estoy seguro de que todo tu tormento y tu miedo terminará por completo, porque él no podrá acercarse a ti de nuevo — respondió.

— Sólo necesito tiempo... aún es muy triste pensar en eso para mi — susurró el omega.

— Toma el que necesites, Jungkookie, yo estaré aquí para apoyarte en todo lo que planees hacer — sonrió.

En ese momento el omega se separó para así poder dejar un pequeño beso sobre los labios del mayor. De forma rápida se separó indicándole que quería jugar un poco, algo que hizo feliz al alfa. Vio cómo el rubio se ponía de pie para así irse corriendo hasta la habitación dando pequeñas risitas juguetonas.

— Hey, eso no hace — se quejó en juego para así ponerse de pie e ir tras él pero un sonido lo hizo detenerse en seco.

Su mirada volvió hasta el teléfono en aquel sofá, su semblante se puso serio en cuestión de segundos, era increible lo que estaba pasando. Fue hasta él y tomó en su mano aquel aparato viendo de mejor manera el nombre que aparecía en la pantalla, una llamada entrante, de... Park Jimin.

Su dedo se deslizó en la pantalla de éste para así contestar.

— Vete a la mierda, Jimin. Deja de molestarlo y haz tu puta vida lejos de él, ya le haz hecho mucho daño cómo para seguir siendo un imbécil de nuevo.

— Por si no recuerdas, él sigue siendo mi esposo, me pertenece y puedo hacer lo que se me dé la maldita gana, Taehyung. 

— Si te veo cerca de nosotros te juro que te mataré con mis propias manos. Jamás en tu miserable vida volverás a tocarlo, ¿me oíste?, y si lo haces... te vas a arrepentir de hasta haber nacido.

Luego de aquello colgó para así rápidamente borrar su número después de haberlo bloqueado. Estaba tan molesto, sabía que sería un problema de nuevo, debía cuidar más de su omega pues ese tonto podría estar cerca.

Dejó el teléfono en el sofá de nuevo para así ir hasta la habitación con su novio. Al llegar Jungkook pudo notar que este estaba un poco serio, iba a preguntar qué sucedía pero fue interrumpido al sentir los labios del alfa sobre los suyos. Su timidez apareció al sentir cómo éste se acomodaba entre sus piernas, todo era muy repentino. Pero le gustaba.