~ "𝑫𝑶𝑳𝑳𝑯𝑶𝑼𝑺𝑬" ~ ─── 𝘿𝙧𝙖𝙘𝙤 𝙈𝙖𝙡𝙛𝙤𝙮 [𝑯𝒐𝒖𝒔𝒆𝒔; 1.0] - (+18)

𝔄𝔠𝔦𝔡

DRACO MALFOY

Me removí entre las sábanas cuando mi despertador me avisó que estaría llegando tarde a clases si no me despertaba en menos de diez minutos.

Moví mi brazo en busca de Freya, pero para mi gran sorpresa.

Nada.

Abrí los ojos de golpe y me reincorporé esta vez buscándola con la mirada, pero solo confirmé lo de hace unos segundos, no estaba en la cama. Me levanté, tomé mis boxers del piso poniéndomelos con rapidez y fui hasta el baño abriendo la puerta, pero solo encontré el espejo empañado. Se había duchado aquí y luego se había largado.

Gruñí regresando a la habitación, toda mi atención se dirigió a una nota pegada en la cabecera de mi cama.

"No hay que repetir los errores de ayer."

F.G

Tome la nota arrugándola entre mi mano y vistiéndome con rapidez para salir de la habitación hecho una furia.

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FREYA GRINDELWALD

— ¡No es tan malditamente complicado, Adrián! — Alce la voz. — Solo tenías que cambiar dos ingredientes para conseguir el mismo resultado, te dije que utilizarás derivados, pero nunca haces maldito caso — Pucey abrió los ojos con sorpresa dando unos pasos atrás.

— ¿Qué? — Unas manos frías y delgadas sujetaron con rudeza mi brazo llevándome hacia un lado.

— ¡¿Quién mierda crees que soy?! — Draco me gritó con desespero mientras pasaba una de sus manos por su cabello. Toda la gente que pasaba a nuestros lados se quedó paralizada mientras los murmullos empezaban a comenzar.

Un grupo de Raven aceleró su paso hacia su sala común, y sabía a la perfección lo que significaba.

Iban a traer a Chesnott.

— ¡Que mierda miran! — Adrián gritó haciendo que todos volvieran a sus quehaceres. El chico se acercó hasta un Slytherin no muy conocido y hablo. — Llama a Zabini, Nott y los demás, esta mierda no tiene pinta de ponerse muy buena. — El tipo asintió y salió a paso rápido.

— ¡Bájame dos rayitas tu puto tonito que no estás hablando con una de tus perras, Malfoy! — Respondí en tono alto también tratando de avanzar para llevarlo a un lado menos concurrido, pero no sirvió de nada.

— ¡Te hablo como yo putas quiera, Evanora! —.

— ¿¡Qué es lo que quieres bipolar de mierda?! — Respondí cuando me contagió su furia a tope.

— ¡Que me utilizas como tu puto ilusionándome y yéndote a la mañana siguiente! — Empujo la nota que había dejado en la mañana contra mi pecho. — ¡Ni siquiera un maldito "Oye Draco gracias por los múltiples orgasmos! — Resaltó las últimas palabras haciendo que todos volteen a nosotros nuevamente.

Lo tomé del brazo llevándomelo de ahí cuando volteé y el azul de Ravenclaw se comenzó a hacer notar.

— ¡No me toques joder! — Me arranchó su mano con brusquedad cuando logré meterlo dentro de un aula vacía.

— ¡¿Qué es lo que te sucede?! — Pregunte arrojando mis libros sobre una mesa.

— ¿Por qué te fuiste? — Me encaro con el cabello desordenado y la camisa mal acomodada.

— Draco, ¿no esperabas que me quedará o sí? —Trate de calmarlo con un tono de voz relajada, pero este solo logró salir en uno burlón.

— ¿Tan difícil de creer es que realmente te quiero a mi lado?... —.}