Capítulo 26 || Viajando a París

778 75 48
                                    

- Inglaterra, Kent, Dover. Septiembre, 1927-

Regina se encontraba caminando con una pequeña bolsa en su mano, por los acantilados de Dover en dirección a Bechy Heard. La castaña tuvo que acomodar los mechones que volaban, debido al aire que hacía en el lugar.

- Jacob, el hombre con el que Tina está saliendo...

- No te preocupes, En cuanto te veam en cuanto nos vea a los cinco reunidos, todo volverá a ser como en Nueva York. No te preocupes por eso.

- Sí, pero Queenie dijo que él es auror, ¿no?

- Eso es algo que debería de preocuparte- intervino Regina en la conversación de los dos amigos-. Si ella prefiere al tal Achilles Tolliver sobre ti, no te merece. Aparte, es más fácil encontrar un auror que un magizoologista que acaba de publicar un libro- Newt sonrió ante las palabras de su amiga.

- Como dice Regina, es auror, ¿y qué? No pienses en él- Jacob miró nuevamente la bolsa de la chica-. Aún sigo sin comprender cómo es que puedes llevar todas tus pertenencias en eso.

- Así como hay un recinto en la maleta de Artemis.

Newt se detuvo por un momento haciendo que Regina le diera espacio para que pudiera hablar con Jacob, ya que solo él podía darle los consejos que su amigo necesitaba cuando se reencontraran con Tina.

El viento voló su cabello haciendo que se lo acomodará nuevamente y su mente viajo a su sexto año en Hogwarts, cuando su amigo la invitó a pasar las vaciones de Navidad con la familia Scamander. El día que había a conocido a Theseus.

Aquella mirada que guardaba misterio, su cabellos rizado y esa sonrisa que le había robado el corazón en el instante que intercambiaron miradas. Y, a pesar de que Newt le había hablado infinidad de veces de él, nada había sido comparado con la realidad. Se había sentido atraída por Theseus Scamander en el momento que lo vio.

- ¿Y tú que dices Regina?- la voz de Jacob la hizo regresar a la realidad.

- ¿Sobre qué?- preguntó sorprendida.

- Que Newt le diga a Tina lo mucho que la quiere y lo triste que estaba por no saber de ella. Claro, que le quitaría lo romántico si le dijera que tiene ojos de salamandra.

- Sí, claro. Lo que digas está bien- respondió distraída.

Jacob se detuvo confundido al ver a Regina distraída. Miró a Newt en busca de una respuesta porque no sabía el motivo por la cual su amiga se encontrará en ese modo. El rubio tenía una ligera sospecha de que era lo que pasaba por la cabeza de la Ravenclaw.

- No se si lo sepas, pero Regina y mi hermano salían hace cinco años. La ha estado buscando últimamente, pero ella se limita a hablar con cosas de trabajo. Aunque creo que le sigue afectando el hecho que haya cortado sin ninguna explicación.

Jacob se quedó en silencio hasta que los tres se detuvieron cerca de un hombre que vestía una túnica negra y raída. Regina miró la cubeta que se encontraba a un lado del desconocido.

- ¿Y ese quién es?- preguntó Jacob señalando al hombre mientras continuaban su camino.

- Es mi única forma de salir del país sin documentación.

- O que alguien del Ministerio de Magia este enterado- completo Regina deteniéndose para ver lo poco que faltaba para llegar con el hombre-. No te mareas con facilidad, ¿verdad?- preguntó preocupada por Jacob.

- No la paso nada bien en barco, Regina.

Los dos magos intercambiaron miradas de asombro. Newt asintió con la cabeza para asegurarle que estaba convencido de que quería viajar a París lo más pronto posible. Regina empezó a pensar en una respuesta convincente que le daría a Tina.

- Bueno, tú tranquilo- comentó Newt.

- ¡Dense prisa! Sale en un minuto- anunció el hombre.

Newt, al igual que Regina, se acercaron al hombre. La chica volvió a sentir aquella adrenalina que se hacía presente cuando se metían en problemas en Hogwarts, haciendo que una sonrisa apareciera un su rostro. 

- ¡Setenta galeones!-grito el hombre de la colina.

- No, quedamos en treinta-respondió Newt molesto.

- Treinta por ir a Francia, veinte por no contarle a nadie que he visto a Newt Scamander salir ilegalmente del país y veinte por no contarle a nadie que Regina Pullman lo acompañó.

Regina sacó de su bolsillo cien monedas de oro y le gruñía. Su amigo detestaba hacer ese tipo de cosas, así que decidió ser ella la que pagara ese viaje inesperado. El tiempo era oro y debía encontrar a Queenie y Tina lo más pronto posible.

- Cien galeones, para que no se lo digas a nadie- lo amenazó Regina con la esperanza de que no se hubiera dado cuenta de que Jacob era un muggle.

- Es el precio de la fama amigo- respondió satisfecho por el pago-. Diez segundos.

- Jacob- lo llamó Newt.

Regina y Newt le agarraron las manos al muggle para mantenerse unidos en todo el viaje. La chica apretaba con tal fuerza que sentía que iba a romperle un hueso. Regina se sentía nerviosa, pero sabía que era necesario que lo hicieran lo más pronto posible.

Newt dio un paso adentro de la cubeta, haciendo que sus dos acompañantes fueran jalados al instante. Jacob gritaba todo lo que sus pulmones podía. Regina se limitó a cerrar los ojos para no marearse. A la chica le hubiera gustado darle esa recomendación a Jacob pero ya era tarde.

(Nota de la autora:

En este perfil, seguimos molesto por la injusta resolución que dio Warner Bros. al despedir y privarnos de que Johnny Depp interpreté a Gellert Grindelwald en las siguientes tres películas de Animales Fantásticos, pero no quitar a Amber Heard de su papel de Mera en Aquaman. Es por esto que no voy hacer ningún tipo de comentario sobre el capítulo publicado hoy.

Sin más que decir.

April Hdzz Capaldi, fuera.)

Animales FantásticosWhere stories live. Discover now