Animales Fantásticos

Capítulo 34|| Pacto de Sangre

- Escocia, afueras de Hogwarts. Septiembre, 1927-

Un grupo apareció en el inicio de una de las entradas de Hogwarts. El silencio en el grupo era tan grande que ninguno de los presentes se atrevían a hablar. Muchos seguían procesando lo que había sucedido en París.

Newt miró a su amiga y regresó su mirada en dirección en donde se encontraba la figura que se encontraba parada en el viaducto en la espera de que dos sus dos ex-alumnos se acercaran a él con pasos decisivos.

Tina, Theseus, el primer ministro, Jacob, un par de aurores y la chica, que se había presentado como Nagini, se encontraban en silencio viendo como Regina y Newt se alejaban del grupo, a excepción de Jacob, que miraba a su alrededor sorprendido.

- Dumbledore tiene muchas cosas que explicarnos- habló el magizoologista en la mitad del camino.

-¿De qué hablas?- Newt sacó un dije de su saco, llamando la atención de la auror.

- Es un pacto de sangre- contestó antes de que su amiga hiciera la pregunta-. Algo me dice que Dumbledore tiene respuestas.

Continuaron caminando mientras la brisa golpeaba sus caras. Había veces que era mejor no decir nada, y esos era uno de esos momentos. Regina sacó un suspiro mientras Newt la veían con curiosidad. 

- Lamento mucho lo que pasó a Leta- murmuró la chica mientras la distancia se empezaba acortar.

- Y yo lamento mucho que te hayas enterado de esta forma de que Kate es una de las seguidores de Grindelwald- Regina soltó un suspiro-. Es el camino que ella escogió. Y nosotros escogimos el nuestro, ¿no?

Los pocos metros que recorrieron fueron en silencio. Ambos se detuvieron en frente de Dumbledore que tenía un hechizo en sus muñecas. Theseus apenas les explico que le habían relegado de su cargo hasta que no estuvieran seguros de que no estaba haciendo nada en contra de la comunidad mágica o favor de los seguidores de Grindelwald.

Los dos se detuvieron cuando lo tuvieron en frente de él. Ninguno tenía las fuerzas para poder continuar con la conversación. Regina había sentido un nudo en la garganta, que sentía que iba a llorar con la primera palabra que saliera de su boca.

- ¿Es verdad lo de Leta y lo de Kate?

- Sí- contesto Newt por los dos.

- Lo siento mucho.

Newt sacó la cadena que le había enseñado anteriormente a su mejor amiga. La mirada de su profesor era una combinación de terror, curiosidad y asombro por aquel objeto que tenía su alumno en sus manos. Regina miró a su profesor en la espera de alguna respuesta.

- Es un pacto de sangre, ¿verdad?- empezó hablar de Newt-. Juraron no enfrentarse uno al otro.

Regina miró como Dumbledore asentía con la cabeza mientras en su rostro se reflejaba la vergüenza y la culpa que sentía aquel hombre que ella admiraba cuando se encontraba estudiando en Hogwarts.

- Es por eso que nos envió a nosotros a enfrentarnos a Grindelwald, ¿no es así?- habló la chica finalmente desde habían llegado, Dumbledore asintió con la cabeza.

- ¡Por las barbas de Merlín! ¿Cómo has conseguido...?

Regina miró a su amigo y en una de sus bolsas se asomaba el escarbato. La chica sonrió al ver que no necesitaba más explicaciones, la pequeña criatura se había visto curioso ante aquel objeto.

- Por lo visto, Grindelwald no entiende la naturaleza de las cosas que considera simple- respondió Newt orgulloso.

Dumbledore alzó sus manos en dirección a donde se encontraba los demás. Regina volteó para ver como Theseus deshacía el hechizo con un movimiento de manos. Los dos intercambiaron sonrisas y ella regresó su mirada al profesor de Defensas contras las Artes Oscuras.

Regina dirigió su mirada hacia Dumbledore y el pacto de sangre que flotaba entre ellos. A la Ravenclaw le entró una curiosidad por saber la historia que había entre el pacto de sangre entre Grindelwald y Dumbledore.

- ¿Puede destruirlo?- preguntó Newt.

- Tal vez sí, tal vez...- respondió Dumbledore esperanzado.

- Puede que venga la información en algún libro- comentó Regina-. Siempre hay una forma de encontrarlo.

El rostro de su profesor parecía apesumbrado mientras miraba a los dos amigos. Otro silencio incómodo se creo en el ambiente. La Ravenclaw miró hacia Hogwarts, haciéndola sentir nostálgica por sus días de estudiantes, en donde lo único que se preocupaba era aprender y no meterse en problemas con Newt.

- ¿Crees que le apetece una taza de té?- las palabras de Dumbledore la hizo regresar a su presente.

- Mejor un poco de leche- sugirió Newt.

- Es mejor que esconda las cucharillas- intervino Regina-. Suele tomar prestado sin permiso las cosas brillantes.

El trío empezó a caminar hacia el castillo de Hogwarts en completo silencio. Había muchas preguntas que contestar. Muchas cosas que aclarar. Y una posible guerra que prepararse.

= Fin del Acto Dos=

(Nota de la autora: 

Bueno, hasta aquí el final de lo que tenía escrito de las películas de Animales Fantásticos. Gracias por acompañarme a esta loca idea que vengo publicando desde mayo. Espero que les haya gustado.

La próxima parte vendrá después de que salga la tercera película. Como se los había mencionado antes, dependiendo de cuantos años de diferencia habrá entre la segunda y tercera película, es lo que dependerá que habrá el número de actos que habrá.

También les quiero desear un feliz año nuevo y que puedan lograr cumplir sus metas para este año, en la espera de que sorpresas nos tendrá. Solo espero que se menos caótico que este 2020.

Sin más que decir, me despido de ustedes hasta que salga la siguiente película de Animales Fantásticos. Realmente, extrañaré a escribir sobre Regina Pullman. 

Felices fiestas.

April Hdzz Capaldi, fuera.)