Animales Fantásticos

Capítulo 22 || Una nueva misión

- Saint Paul Church, Londres, Inglaterra. Septiembre, 1927-

El aire londinense pegaba en el rostro de la castaña mientras se acercaba con pasos seguros a su mejor amigo, que se encontraba mirando la Catedral  de Saint Paul. Regina tocó el hombro de Newt para llamar su atención.

- Eres tú- comentó con una sonrisa ligera.

- No creo que estés esperando a alguien más- respondió divertida.

- ¿Estás lista?- Regina asintió y Newt sacó su varita-. Ventus- bisbiseo.

Newt le hizo una señal hacia su espalda, viendo como Stebbins intentaba ir en contra de una corriente de aire que le daba solo a él. Newt hizo una sonrisa de satisfacción mientras la castaña se aguantaba la risa. 

Los dos se escondieron en el callejón más cercano. Un guante negro flotando apareció en frente de ellos, dándoles un saludo en el aire y señaló en dirección a Saint Paul Church. Los dos pudieron divisar a Dumbledore los saludaba en el techo del edificio. Regina y Newt vieron que el guante se extendía en la dirección del magizoologista. Regina le agarró la mano de su amigo, Newt agarró el guante y aparecieron al lado de su profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras. 

- Dumbledore- saludó Newt viendo a su alrededor mientras Regina se acercaba con una sonrisa-. ¿No quedaba libre ninguna azotea más discreta?

- Me gusta las buenas vistas.

- No me sorprende nada viniendo de usted- respondió Regina divertida-. Aunque debo de aceptar que tiene un buen gusto en las vistas.

Los tres alzaron sus varitas sin dejar de ver la ciudad. Ella recordaba que los tres tenían que hacer todo lo posible para que nos los vieran juntos o ella perdería su empleo que le gustaba mucho.

- Nebulus- dijeron los tres al unísono mientras una niebla empezaba a recorrer Londres.

Los tres aparecieron en frente de los leones Landseer. Regina se detuvo en cuanto un bandada de palomas empezaron a volar en frente de ellos. La chica continuó su camino cuando se percato que sus acompañantes se alejaban.

- ¿Cómo les ha ido?

- El Ministerio está convencido que encontré a Frank y se lo mencioné a Artemis y que nuestro encuentro en Nueva York fue una mera casualidad.

- Pero conmigo es diferente- Regina vio a su amigo sorprendido por su respuesta-. Siguen convencidos que usted me envió a Nueva York.

- ¿Les has dicho que no es cierto?- Dumbledore y Regina miraron a Newt curiosos.

- Sí, aunque es cierto.

Regina intercalaba sus miradas entre los dos hombres. Dumblodre parecía misterioro ante la respuesta de los jóvenes que un día fueron sus alumnos. Regina y Newt intercambiaron miradas y regresaron su atención hacia su profesor.

- Siento que usted sabe algo y no nos quiere decir, Dumbledore- el mencionado sonrió divertido ante el comentario de la Ravenclaw.

- Usted le dijo a Regina en donde encontrar al Thunderbird que había capturado los traficantes, Dumbledore. Sabía que ella me lo diría, que lo devolvería a casa y que tendría que utilizar un puerto muggle.