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Capítulo 11

7 años atrás (parte 1)

El sol estaba resplandeciente, las cigarras cubrían el ambiente con su característico ruido, y el típico calor húmedo del verano ardía con fuerza incluso en las sombras. Hyejin, quien nunca corría, estaba trotando medianamente rápido por las calles de su vecindario, respirando apresuradamente por el calor y el esfuerzo. Odiaba correr, pero ya se había atrasado los días previos y no quería que se transformara en una costumbre. Avanzó un par de cuadras más y al girar en una esquina bajó el ritmo porque le quedaban pocos metros para llegar a su destino.

Al final de esa calle, Moonbyul la estaba esperando donde siempre; en la parada de autobús, cubriéndose con las manos los ojos para que no le molestara el sol. Al verla, le sonrió levemente pero rápidamente colocó una expresión seria y enfadada.

— ¡Llegas tarde de nuevo, Ahn Hyejin! —Exclamó haciéndole un gesto para que se acercara más rápido. —He dejado pasar dos autobuses ya, dios mío.

— Lo siento, lo siento.

Se disculpó agachando la cabeza una y otra vez, sabía que Moonbyul no estaba realmente enfadada con ella, pero tampoco quería probar los límites de su paciencia, por lo que se sentó en silencio a su lado, sacó una pequeña libreta de su bolso y se puso a revisar las últimas listas de qué-hacer que había hecho.

— ¿Dónde vamos a ir hoy? —Escuchó que preguntaba la más alta.

— Hay unas agencias en el distrito Gangdong que me gustaría visitar. —Murmuró mientras leía una de las páginas—Creo que nos alcanza el tiempo para visitar unas tres.

— Suena bien.

Ambas se mantuvieron en silencio hasta que llegó el autobús. A veces no necesitaban conversar para disfrutar de la compañía de la otra. Estaban viviendo las últimas vacaciones escolares de verano antes de graduarse, pero para Hyejin y Byulyi eso no significaba descanso, si no que una oportunidad para mostrar sus talentos a las diferentes compañías de entretenimiento que se encontraban en Seúl. Posiblemente era la última oportunidad que tenían para perseguir sus sueños artísticos antes de que sus padres le exigieran estudiar para los exámenes de ingreso a la universidad.

Por eso salían tres o cuatro días por semana e iban recopilando información y asistiendo a diferentes audiciones dependiendo de qué compañías parecían interesadas en ellas. Y por el momento habían asistido solo a un par y no las habían llamado de vuelta. Pero eso no las desmotivaba en absoluto, seguían juntándose en el mismo paradero, los mismos días y casi a la misma hora —si no fuese por los atrasos de Hyejin— con la esperanza de tener suerte alguno de esos días antes de que se les acabaran las vacaciones.

Era aún de mañana cuando tomaron el tren subterráneo hacia el este de la ciudad. Hyejin le había comentado a Byul que al parecer había una compañía que estaba haciendo audiciones durante esa jornada, por lo que quizá valía la pena ir a darse una vuelta por allí.

— ¿Y en qué consiste la audición? —Preguntó Byulyi, interesada.

— Uh... Bailar y cantar, creo. —Contestó la morena, no muy segura.

Moonbyul prefería más bailar que cantar y Hyejin todo lo contrario. Por eso a veces bromeaban con que no quedarían juntas debido a que eran muy opuestas. Aunque quizá eso hacia el truco, ¿no? Tanto como sus personalidades como sus estilos se complementaban como dos partes de un entero.

— Si es que nos dejan audicionar supongo que daré todo cantando para compensar el baile. —Agregó Hyejin encogiéndose de hombros.

— Haré lo mismo, pero centrándome en el baile. —Asintió su compañera con expresión severa.