MR BAD GUY

A WINTER'S TALE

Cayeron en la cama y tardaron menos de cinco minutos en empezar a roncar felizmente uno en el oído del otro. A mediodía hicieron las paces de verdad en la ducha, sepultados por el agua. Tarek se percató divertido que era la primera vez que se duchaban juntos mientras saboreaba su espalda mojada y recorría sus piernas una y otra vez.

- Pensaba que nunca volverías a bajar la guardia conmigo -le susurró Enzo recostados en el sofá.

- No hacía falta que me quisieras sorprender -mintió descaradamente Tarek, con Enzo acurrucado en su regazo-. Tú eres la sorpresa continua de mi vida -le ronroneó feliz.

- No seas mentiroso. Me has hecho sudar sangre para que olvidaras esa chorrada de solo ser amigos. ¿Me vas a querer otra vez?

- Nunca te he dejado de querer, bobo.

- Yo sí que te quiero.

Tarek sonrió mientras le besaba el pelo y acomodaba su cabeza contra su cuello.

- Este es el domingo más bonito de mi vida. Te lo digo antes de que acabe.

- Oh, amor. ¿De verdad?

- Bueno, solo por detrás de mi primera comunión.

Enzo puso los ojos en blanco y le abrazó besándole las mejillas y el cuello. Riendo de felicidad.

Tarek volvió a desandar el camino hasta Marygold Alley trayendo sus cosas y a Greta para instalarse definitivamente con su amor. Después de aquel viaje relámpago intenso regresaron muertos de amor uno por el otro y deseando empezar en serio su vida en común. Para Enzo era una experiencia totalmente nueva desde su convivencia con Pauline. Había llovido mucho desde aquello. No se acordaba lo que era una relación estable con vistas al futuro.

Era precioso tenerle todas las mañanas en su cama al despertar. A pesar de que siempre le despertaba porque el se levantaba muy temprano para ir a trabajar, nada de eso molestaba ahora al principio. Le exigía que le recorriera a besos todo el cuerpo antes de irse y cosas así. Tarek tenía que acostumbrarse a aquel hombre tan intenso pero le amaba locamente ya.

Enzo adoraba la Navidad y vivía con emoción compartirla por primera vez juntos. Tarek tuvo que someterse a sesiones intensas de compras de cara a las fechas navideñas. La lista de gente a regalar era interminable y a Enzo se le daba bien elegir teniendo en cuenta los gustos de cada uno. Pero era muy indeciso tambien y necesitaba el constante apoyo de Tarek. Asi que temía cada vez que le decía "Vamos de compras" que ahora era con mucha frecuencia.

Otro aspecto importante de las Navidades era la decoración del árbol de Navidad, algo que delegó en Tarek y la organización de diversas cenas y comidas para sus amigos más íntimos.

- Feliz Navidad, mi vida -le saludó Enzo besándole al despertar.

- Feliz Navidad.

- Son nuestras primeras Navidades juntos. ¿Sabes qué? Eres el regalo de Navidad más bonito que he tenido nunca.

Tarek no sabía nunca que decir ante los romanticismos totalmente naturales de Enzo. Lo habitual era enrojecer como un idiota.

- ¿Has pensado ya en la cena de Nochevieja aquí? ¿A quien vas a invitar?

- Supongo que a los mismos que en Nochebuena.

- Me gustaría invitar a mi ex novio Steve. ¿Te importaría?

Notó que Enzo quedo pillado por la sorpresa. Jamás pensó que iba a proponerle algo así. Tarek a pesar de su fuerte personalidad solía plegarse siempre a las decisiones de Enzo. Sus amigos eran sus amigos ya y Enzo no se había visto impelido a sugerirle que trajera a sus propias amistades a su casa.