Engatozada: Rosael

-REDENCIÓN-

—Ya una vez nos abandonaste... ¿Por qué debería de confiar en ti Merlín?—preguntó furioso.

—Porque yo soy la reencarnación de Merlín, no el anterior, yo no cometeré sus errores, sé exactamente lo que tengo que hacer, mi deber es proteger la magia y a sus seres sobrenaturales, estamos aquí para ofrecerle un beneficio sin costo... sin nada a cambio.

— ¿A qué se refiere?— preguntó Arón curioso mientras que Catriel ponía la caja con el collar mágico en la mesa que se encontraba frente a él.

—Lamentamos las muertes en su manada, sabemos que aun que no fue lo correcto no tenía otra alternativa, así que mi esposa la hechicera Maestra creó este artefacto mágico para ustedes...

—Qué lindo collar señor Krentz, es una lástima que ya tenga esposa...—bromeó un poco Arón y regresó a su habitual cara enojada.

—Padre... este collar es la solución a las transformaciones dolorosas, hará que toda la manada pueda transformarse cuando quiera sin importar que no haya luna llena, nos hará resistentes a la magia... ¿sabes que lo que eso significa? Podremos atacar a esos locos de la realidad cuando sea, ya no nos debilitará la magia. —le dijo Catriel esperanzado.

— ¿Es eso cierto? —preguntó Arón a Dorian aun sin poder creerlo.

—Así es, a todos los Lycans les daría el beneficio de tener varios poderes del Alfa  Lycan, justo como hace rato se transformó sin luna llena... —Le dijo y Arón se puso de pie de nuevo un poco más molesto.

— ¡¿sabe que eso me quitará más autoridad aquí?!

— ¿Padre es enserio que en estos momentos te importa más tu orgullo de Alfa? Con esto podríamos pelear todos... hombres y mujeres Lycan para defendernos...

— ¡Lo único que sé es que estos hechiceros o gatos... lo que sean están proponiendo estupideces... eso hacen!— Catriel suspiró agotado, el orgullo de su padre era más grande de lo que pensaba y ya no le quedaban más argumentos.

—Padre serás abuelo... de nuevo. — Soltó Catriel de golpe y los Krentz lo miraron esperando la reacción de sus padres.

—Pero Catriel... eso es imposible, después de Layla ya no podías tener...—le dijo su madre intentando que entrara en razón pero Catriel se irguió y resopló caminando hasta su padre.

—Yo también lo pensaba así, hasta que conocí a... conocí a mi Vínculo padre, se llama Rosael... Krentz. —La mirada de Arón fue de Catriel a los hermanos Krentz y viceversa sin entender. —La magia hizo posible esto... —Y justamente un mensaje recibido en el celular de Catriel se volvió el más importante, un mensaje con una fotografía enviada por Rosael... un maravilloso ultrasonido con dos pequeños bebés, los ojos de Catriel se humedecieron al instante y se la mostró a su padre.

—Serás abuelo de unos perfectos mellizos... y si tu como su abuelo no quieres luchar... yo como su padre lo haré hasta la muerte si es necesario. —Catriel enfadado con él tomó el collar y se dispuso a salir con los Krentz siguiéndolo.

— ¡Espera! —lo detuvo la voz de su padre, y al girarse ambos padres lo miraban un poco tristes. — ¿dijiste que ella es tu Vínculo? —De alguna manera Arón sabía que cuando un Lycan encontraba a su vínculo no había vuelta atrás.

—Lo es... y es perfecta, tiene el gen minino como el resto de sus hermanos, y también es una increíble hechicera, una mujer fuerte, y aun que por órdenes tuyas la mandaras a asesinar con Andariel... eso no le quitó la intención y sigue a mi lado intentando luchar por mis hijos.

—Ninguno de los presentes es el enemigo Arón, todos tenemos un fin común... la paz para nuestras familias, lo único que necesitas es ponerte el collar en la luna llena siguiente, sabemos que no es una gran ayuda... pero aun que matáramos a mas protectores de la realidad solo los haríamos enojar más, el collar les ayudará a protegerse... y si más adelante lo deseas, hay un lugar donde toda la manada está mejor y con otras criaturas mágicas... —comentó Dorian y dejaron a Catriel solo con su padre.

—Lamento no haberte dado la cura para Layla... la verdad era que tal cura ya no existía, esos protectores de la realidad se la llevaron, no debí mentirte; pero si les decía la verdad... todos me odiarían como alfa...

—Layla ya estaba en sus últimos momentos padre, aun con la cura tardaría más en hacer efecto, no hubiera funcionado, fue una gran guerrera y siempre la amaré, ella lo sabe... pero esta vez la magia me concedió el tener dos bebés... y no dejaré que nadie les haga daño, ni mucho menos a Rosael, daría la vida por ella.

—Quiero conocer a mis nietos... ¿me dejarás? —preguntó rendido y totalmente arrepentido, Catriel se acercó a él y lo abrazó.

—Sin duda... yo... los extrañaba, a ambos... a ti y a madre, he sido cruel al alejarme pero en verdad quería encontrar a Merlín.

—Seguiste tu camino y encontraste tu Vínculo, si fue así todo valió la pena... Lo haré. —Catriel levantó la mirada sorprendido por sus últimas palabras.

— ¿Usarás el collar? ¿En serio?

—Lo haré porque quiero un buen futuro para mis nietos... así que si, lo haré.