Frente a la mujer se encontraba un gran ser rojo como la sangre y negro como la noche, mirándola con sus penetrantes ojos azules.
-Yveltal...
El Pokémon Destrucción.
Este Pokémon absorbe la vida de todo lo que toca, cuando su ciclo de vida está por acabar, absorbe toda la vida que puede, para tomar su forma de crisálida.
Con un fuerte chillido el Pokémon respondió para aletear con fuerza sus grandes alas antes de posarse en el suelo.
-Parece que lo conoces.
-F-Fuiste tú maldito, tú lo atrapaste!
-Yo no lo atrape, él me llamo.
Flash Back.
Tal como si lo llamara, Allen camino hacia la formación, mientras que su compañera miraba todo tratando de recordar algo.
-Donde ley sobre esto antes, esta formación, esa forma... es... es... Allen!
Este se giró para verla, pero ya era muy tarde porque su mano había tocado la superficie haciendo que esta brillara de gran manera cegándolos a todos, rápidamente la formación cambio de forma a gran medida dejando a un gran ser en su lugar, un ser que esta frente a Allen mirándolo fijamente.
-Tú eras quién me llamaba...
-Ese es...
Un gran chillido se escuchó en el lugar, seguidos de los aleteos del Pokémon.
-Allen aléjate de él, Yveltal marchita todo lo que toca.
-Es así?
-Yveltal es el Pokémon de la Destrucción, su cuerpo absorbe la energía vital de todo lo que toca.
-Es mentira.
-Cómo que mentira!?
-Si eso fuera verdad, entonces, porque sigo aquí.
Allen se movió de su lugar para que la mujer pudiera ver como su mano estaba sobre la cabeza del Pokémon sin ser afectada por nada.
-No... no está consumiendo tu vida.
-Otra simple confusión, parece que tienes mala fama amigo.
El gran Pokémon solo miro al Entrenador para posar sus patas en el suelo y así poder acercar a él.
-Cómo es posible...
-Leí un poco sobre los Pokémon de Kalos antes de venir, Yveltal, no es el mensajero de la muerte y destrucción como todos creen, él es un reinicio.
-Un reinicio?
-Él toma la energía vital de lo que lo rodea para sí mismo, eso es verdad, pero te pregunto, la zona donde lo hace permanece así para siempre, porque como yo lo veo, este bosque está muy sano y fértil.
La Entrenadora se percató de las palabras del chico, para ver como todo el bosque estaba lleno de vida, la flora y la fauna abundaba en el lugar.
-Yveltal elimina toda la vida de una zona para que esta pueda volver a resurgir de mejor manera, ese es su propósito, no es así?
Él Pokémon quien escucho todo con atención solo miro al chico para dar un pequeño asentimiento.
-Tenía razón.
-Es increíble...
Lentamente ella se acercó hacia donde ellos estaban para poder apreciar al Pokémon de cerca.
-Ahora que percibo tu aura me doy cuenta de que esta era la que sentía dentro de esas gemas...
-Gemas?
-Los Corruptos son creados por la implantación de una gema en sus cuerpos esta gema está llena de cierta energía, que hasta ahora no reconocía, pero ya que lo veo a él tan de cerca me doy cuenta, de que han estado usando su aura de alguna manera.
-Pero Yveltal estuvo durmiendo durante muchos años.
-No tiene que ser necesariamente él, un fragmento de su cuerpo lo suficientemente grande puede albergar su aura de igual manera.
-Cuando llegue a Kalos, me contaron que Yveltal y Xerneas tuvieron una fiera batalla, donde Yveltal salió muy herido, debió ser en ese momento, algo de su cuerpo se desprendió, y alguien lo tomo.
-Que buena deducción, ahora se a que me enfrento con exactitud, ya sé que es lo que debo hacer para pararlo, debo regresar a ese pueblo.
-Pero aun debes descansar.
-Ya estoy bien, solo quedan las secuelas de lo que paso, no es nada grave.
El gran Pokémon acerco su hocico al Entrenador para empujarlo un poco con él.
-Qué sucede?
En respuesta solo recibió un gruñido.
-Quieres acompañarme? –Pregunto para recibir un asentimiento. –Ya veo, pero no tengo PokéBalls conmigo ahora.
-Ten usa esta.
De su vestimenta, la mayor saco una PokéBall de tapa negra y líneas amarillas para que el chico la tomara.
-Muchas gracias.
-Si está contigo, entonces sé que está en buenas manos.
-Bien amigo, bienvenido a la familia.
Flash back End.
-Maldito entrometido, llevo años buscando a ese Pokémon, sabes que puedo llegar a hacer si tengo todo su poder.
-No, pero se, que te hare yo usando su poder.
Cuando el gran Pokémon extendió sus alas la mujer retrocedió para lanzar a su Haxorus al campo.
-Acabalo con guillotina!
Sin dudarlo el gran Pokémon avanzo hacia el de Allen para atacarlo, pero en cuento lo toco, su cuerpo se detuvo abruptamente, y empezó a oscurecerse casi en su totalidad.
-Grave error.
-Haxorus?
Yveltal sacudió sus alas para cerrar una corriente, una corriente que hizo polvo el cuerpo del tipo dragón, polvo que se esparció por todo el lugar.
-Se te olvido a que Pokémon te enfrentas?
-M-Maldito...
-Skyrex!
Al escuchar su nombre el Pokémon gruño con gran fuerza provocando que la mujer retrocediera mucho más.
Allen se posó al lado del Pokémon y puso la mano en su cuello para respirar profundo.
Por un instante los ojos le Pokémon brillaron de todo plateado como los suyos, para que seguidamente todo el cuerpo del Entrenador se llenara de un aura oscura y densa como la noche, sus ojos se tornaron azules a excepción de su iris plata y su aura plateada también se manifestó ligándose a la más densa y negra.
-Ahora vas a sentir de primera mano lo que le hiciste a esos Pokémon.
Con suma calma empezó a caminar hacia la mujer que solo retrocedía a cada paso del chico, hasta que algo invisible la detuvo, Latias la miraba mientras sus ojos brillaban.
-N-No podemos negociarlo, seguramente ahí algo que yo te pueda dar para que me dejes ir?
-No hay nada que quiera de ti.
-N-Ni siquiera mi cuerpo?
-Quien querría estar con una persona como tú.
Con cada paso que el joven daba, la mujer temblaba más y más al sentir su densa y fría aura.
-Por favor no lo hagas... te lo ruego...
-Los Pokémon a los que les hiciste esto te pidieron que pararas y tú lo hiciste?
Antes de notarlo ya tenía a Allen enfrente de ella mirándola con sus vacíos ojos.
-Ten piedad!
-Tú no la tuviste.
Sin más poso su mano derecha sobre el cuello de la mujer y la levanto del suelo sin ningún esfuerzo.
-Por... Favor...
-...
-Zoroark...
Las orejas de la Pokémon se levantaron un poco y solo miro hacia otro lado mientras sus ojos brillaban tenuemente.
-Esto es lo que ellos sintieron.
El aura en la mano de Allen se intensifico y casi enseguida el color y la vida de la zona sujetada se empezó a ir, siguiendo así con todo su cuerpo.
-AHHhhhhh!
-Duele verdad, que tu cuerpo sea consumido, debe ser doloroso.
El cuerpo de la mujer lentamente fue consumido por la energía de Yveltal a través de Allen, hasta que su vida se extinguió en sus manos.
-Acabo.
Allen solo la lanzo al suelo como un cuerpo sin vida, para respirar otra vez liberando a su cuerpo del aura que lo rodea.
-Es más fuerte de lo que creí...
Dicho esto Allen cayó de rodillas para respirar con algo de fuerza.
-(Allen!)
-Tranquila Rubí, solo estoy algo cansado es todo...
Luego de respirar un par de veces se logró poner de pie otra vez, para que la Pokémon Eón es aferrara a su brazo.
-(Allen...)
-Estoy bien, perdón si te hice pasar un mal momento. Zoroark creo esa ilusión para hacer creer a esa mujer que había ganado. –Hablo al momento de caminar hacia sus cansados Pokémon. –Ya está todo bien chicos, ya todo termino.
Con cuidado poso sus manos sobre las caras de sus Gardevoir y Milotic para secar sus lágrimas.
-Saben que no me gusta verlas llorar.
-(Entrenador...)
-En casa hablaremos, están muy golpeados, todos regresen.
Los tomo a todos y los regreso a sus esferas.
-(Allen debes venir, hay algo que debes ver.)
-De acuerdo, Skyrex, bien hecho, regresa tú también.
Con un gran gruñido el Pokémon asintió para que una luz lo regresara a su esfera.
-Vamos, tú también Zoroark.
Llamando a la Pokémon, esta sonrió para seguir al chico tomándolo de la mano he ir a otra de las habitaciones.
-Este lugar es muy grande.
-(Mucho.)
-No queda más nadie?
-Parece que no, solo unos inconscientes en la sala de control.
-Bien, terminaremos con esto rápido, las autoridades no tardaran en llegar.
Con una corta carrera a la sala de fábrica, Allen se topó rápidamente con Aurora sosteniendo a un Pokémon en sus manos.
-Allen... está muy mal no sé qué hacer, siento que se va a morir!
-Tranquila, no pierdas la calma, todo estará bien.
Rápidamente se posó a su lado para ver el estado del Pokémon.
-Está débil, mucho, y mal nutrido también.
-Puedes hacer algo?
-Lo intentare.
Con cuidado la tomo de sus manos para sostenerla en su brazo.
-Espero funcione.
En su mano libre una gran llama de aura apareció y este la poso sobre ella poco a poco para que un brillo la envolviera por unos minutos desparecieron las heridas y demás males que el Pokémon tenía.
Ya terminado el proceso el chico sudaba en cantidad y le faltaba el aire.
-Estás bien?
-Es un proceso que me agota mucho y muy rápido, no estoy acostumbrado a hacerlo, y menos seguidamente, pero lo importante es saber si ella está bien.
Poca a poco la Pokémon empezó a moverse y abrir sus rojizos ojos para ver al Entrenador.
-Hola chiquita te encuentras bien?
Esta al mirar al chico solo parpadeo un par de veces confundida antes de asentir.
-Ya estas a salvo, te sacaremos de aquí, pero antes, Rubí hay que destruir esa cosa.
-(Opino igual.)
-Hagámoslo, Mordida del Emperador Dragón.
El cuerpo de Rubí se llenó de una gran energía purpura hasta que la forma de una cabeza de dragón se formó por completo penetrando y destruyendo la maquina completamente de adentro hacia afuera.
-Bien hecho.
-(Gracias.)
De los escombros callo una pequeña capsula trasparente que rodo hasta los pies de Allen, al tomarla con una mano, dentro estaba un fragmento de una de las alas de Yveltal, al verlo con su aura, dentro de este aun había gran cantidad de su energía.
-Así que era esto lo que usaba, y a esta pequeñita, que por cierto que Pokémon eres?
Diancie el Pokémon Joya.
Ese Pokémon es el resultado de una mutación genética, puede crear diamantes y joyas, comprimiendo el carbono que hay en el aire ya sea para atacar o defenderse.
-Conque Diancie, nunca había escuchado de ti chiquita.
La Pokémon solo lo miro algo curiosa para sonreír.
-Vamos, aún falta tu última lección Aurora.
-Sí.
A paso calmado regresaron a la sala de control para ver todo.
-Aún no han llegado, bien Aurora última lección, siempre que vayas a un lugar con cámaras, asegúrate de no dejar rastro de tu existencia en ese lugar.
-Para que no pueda vincularte con nada.
-Exacto.
Con unos cuantos comando en el teclado Allen rápidamente formateo todos los discos duros sin dejar evidencia de lo ocurrido en ellos.
-Listo, ya no hay nada de nosotros en ellos, y parece que fue a tiempo, ya llego la caballería.
-Cómo nos iremos?
-Todos están muy cansados como para poder ayudar, al menos que... Zoroark puedes hacernos invisibles con tu ilusión?
Ante la pregunta la Pokémon respondió con algo de alegría.
-Ya tenemos una forma de salir, vamos.
En cuanto la Pokémon creo su ilusión en la gran habitación donde el Alto Mando, la policía y la Campeona estaban, ellos implemente caminaron como si nada entre ellos para avanzar hacia la salida.
-Pero qué fue lo que paso aquí...
-Parece que hubo una batalla aquí, muchos de ellos están inconscientes, pero hay varios de ellos muertos.
-Llévense a los que están vivos, hay que interrogarlos, ellos saben lo que paso aquí.
-Diantha qué hacemos ahora?
-... Hay que seguir explorando este lugar, algo encontraremos.
-Crees qué Zen-Aku hizo esto verdad?
-Tuvo que haber sido él...
-Vamos a ver que más hay, seguramente o se fue, nos está viendo desde algún lugar, si lo vemos vamos a tener que detenerlo, lo sabes verdad?
-Si...
Mientras tanto lejos ya de allí, Allen llevaba a la Pokémon en su pecho para mantenerla caliente en lo que regresaban al centro Pokémon, Zoroark se encargaba de que nadie los percibiera en absoluto, entrando así en el lugar sin que nadie se diera cuanta hasta llegar a la habitación.
-Haa... estoy muerta, que difícil fue todo...
-Solo fue tu primara noche, aún no cantes victoria.
-Pero si ya todo acabo.
-Por ahora.
-Y qué sigue?
-Ponte algo más cómodo y descansa un poco, yo tengo que llevar a mis Pokémon a revisión, tú debes cuidar a Diancie mientras no estoy.
-Claro, pero y a ella...
Con su dedo señalo a la Zoroark que tímidamente sujetaba la mano de Allen como si fuera una pequeña.
-Es inofensiva, se quedara contigo, de igual modo o creo tardar mucho, Rubí estará aquí también.
-Entiendo.
Luego de cambiarse, Allen tomo 4 de sus 6 PokéBalls y salió de la habitación.
-Aun no termino de creer que todo acabo... -murmuro la chica al tiempo que se desvestía. –La mujer que mato a mi Mamá ya no existe... se siente raro, es como un vacío, creí que me sentiría un poco mejor, pero no es así... él tenía razón. Como siempre.
Tras ponerse algo más cómodo solo se sentó al lado de la Pokémon para verla descansar en la cama, a su lado, Rubí curioseaba entre las cosas de Allen y Zoroark las observaba.
20 minutos después Allen regreso, para empezar a reunir todo, con ayuda de Rubí.
-Qué sucede?
-Ya terminamos aquí, nos vamos.
-Ahora?
-No pasan de las once de la noche, aún es temprano.
-Pero.
-No estés nerviosa, nada te pasara.
-De acuerdo, qué harás con Diancie y Zoroark?
-Me las llevare, me asegurare de que están bien y dejare que se vayan.
-Ya veo.
Con todo listo, dejaron la habitación ordenada antes de salir.
-Ya se van?
-Sí, tenemos a un pariente esperándonos cerca de aquí.
-Oh ya veo, en todo caso tengan cuidado, ya es algo tarde.
-Descuide.
-Hasta luego.
Con un saludo de mano por parte de ambos, regresaron al frío exterior para caminar hacia donde estaba su motocicleta?
-De verdad nos iremos ahora?
-Claro. –Respondo con simpleza para lanzar una de sus PokéBalls al aire. –Kanna podrías?
-(A casa Entrenador?)
-Por favor.
-(Nada me haría más feliz que eso ahora.)
Y con una gran sonrisa en su rostro, la Pokémon transporto a todos lejos de allí para que el lugar quedara vacío.
De la misma manera, todos reaparecieron en cierta sala, que el chico conocía muy bien, cerca de ellos, estaban 2 mujeres mirando completamente hipnotizadas el televisor, más exactamente las noticias en Kalos.
-(Estaban preocupadas...) –Pensó para él al momento de caminar en silencio para posarse tras de ellas en el sofá. –Algo interesante en las noticias?
Al escuchar la voz detrás de ellas enseguida se giraron para ver al joven parado allí.
-Cielo!
-Darling!
Y por reflejo ambas corrieron para meter al chico entre sus brazos.
-Ahh... por favor no tan fuerte... aún me duele.
-Cielo, qué tienes estás bien!?
-Te dije que no lo estaba del todo.
-Qué paso?
-Ya habrá un momento para contártelo.
A sus espaldas cierta chica se asomaba por su costado con curiosidad de con quienes hablaba.
-Y esa pequeña quién es?
-Se llama Aurora, ella... ella no tiene a nadie y la estuve llevando conmigo mientras estaba en Kalos. Pensé que podíamos ayudarla.
-Oh tenemos a una nueva integrante?
-Diría que una nueva recluta, quiere que la entrene para poder hacer lo que yo hago.
-Me trajiste carne fresca?
-No sé si deberías decirlo así, la vas a asustar Má.
-De eso nada, hola pequeña me llamo Arisa, soy la Madre de Allen, es un gusto.
-Hola...
-Hay que monada es y mira esos ojos, que linda eres.
-Gracias...
-Má podrías atender a esta pequeña? –Pregunto haciéndose a un lado para que ambas mujeres pudieran ver a la Pokémon en los brazos de la chica.
-Que linda es!
Y en un reflejo tomo a la pequeña Pokémon de las manos de la chica para sostenerla ella.
-Pero que linda eres!
-Má está débil, ten cuidado.
-Ok, lo siento me emocione un poco. Nirvana tráeme algo para atenderla.
-Enseguida.
-Kanna podrías ponerla afuera y cubrirla con algo?
-(Por supuesto Entrenador, solo espero que Vibrany y Adamante entiendan que no es comida.)
Desapareciendo con la motocicleta no paso ni un minuto fuera antes de reaparecer.
-(Listo.)
-Y todos?
-(Están durmiendo, no quise despertarlos.)
-Está bien... justo ahora no tengo las fuerzas para verlos.
Allen se movió a pasos pesados hacia uno de los sofás y se dejó caer pesadamente para empezar a quitarse la ropa.
-(Entrenador?)
-Creo que me forcé mucho esta vez...
En cuanto se quitó sus guantes, las manos rojas se dieron a ver.
-Qué te paso...
-Parece que no fue buena idea combinar el congelamiento en mis manos con el aura de Skyrex... aun no estábamos del todo sincronizados...
Al quitarse su gabardina y camiseta, se dio cuenta de lo mal que estaba, además de los hematomas aun perfectamente visibles en su cuerpo, tenía gruesas venas negras que se movían desde sus manos hasta llegar a su pecho.
-(Entrenador...)
-Allen...
-Sí, creo que no fue muy buena idea... no se preocupen estaré bien, esto es solo un efecto segundario, pronto pasara.
-Oh por Dios!
-No debí quitarme la camisa...
Al girarse noto como su Mamá lo miraba con las manos cubriendo su boca.
-No es tan malo como se ve.
-E-Esos son hematomas?
-Sí.
-Cómo te los hiciste?
-Preferiría contártelo mañana de forma más calmada, eso es el algo serio de lo que te quería hablar.
-Mañana temprano.
-Sin falta.
-Te vez cansado, deberías dormir.
-Primero debemos acomodar a Aurora.
-Ella dormirá con Nirvana, la cama es amplia para las 2.
-Supongo que sí, yo creo que dormiré aquí, si no me equivoco, varios de mis Pokémon están durmiendo en mi cuarto cierto?
-Sí.
-Dormiré aquí en el sofá... -Hablo con pereza al momento de moverse al sofá grande. –Es bastante cómodo, pero antes, todos salgan.
Lanzando 4 de sus PokéBalls al aire, de estas su equipo salió, para ver que ya estaban en casa.
-(Maestro dónde estamos?)
-Este es mi hogar, ya es hora de dormir, así que todos a descansar...
Siguiendo las indicaciones, Yggdrasil, Aarón y Miia se recostaron a su alrededor, para que ambas Gardevoirs se vieran a la cara.
-Ven pequeña, te llevare a tu habitación.
-Gracias Sra.
-Que no te de pena, vamos y Por favor dime Arisa.
Tomando a la chica de la mano, ambas subieron al segundo piso dejando a las Pokémon en la sala.
-(No sé qué estas planeando, pero no dejare que duermas cerca de mi Entrenador.) –Expreso Kanna al ver severamente a la otra Gardevoir presente.
-(Para tu información eso ya lo hice, dormí abrazadita a él, se sentía tan cálido.)
-(Embustera!)
-(haya tú si no me crees, solo te digo de una vez, que yo seré quien duerma en ese pecho hoy.)
-(No te dejare.)
-(Fufufu a ver intenta detenerme.)
-Hey mocosas vean aquí!
-((Mocosas!))
Al ver en la dirección de la voz se toparon con una Gengar a la cual le brillaban los ojos, para que enseguida cayeran rendidas al suelo.
-(Gracias Gaspar, que bueno que estaba despierta.)
-De nada Rubí. Qué bueno que regresaron, estaba algo preocupada por ustedes, qué le paso a Allen, se ve muy lastimado?
-(No lo sé, pero estaba muy agotado.)
Allen se había dormido sentado en el mueble sin más, pero entre Gaspar y Rubí lo acomodaron para que pudiera descansar.
-Todos mañana harán un alboroto.
-(Seguramente.)
-Y quién es la nueva?
Pregunto señalando a la Zoroark recostada tiernamente en uno de los sofás cubriéndose a sí misma con su propia melena para no pasar frío.
-(No lo sé muy bien, mañana se aclararan muchas cosas.)
-Bien, yo me voy a dormir, cuida de él, por favor.
-(No me moveré de su lado descuida.)
Y así sin más Gaspar desapareció en una sombra para subir al segundo piso, mientras Rubí se recostaba con cuidado en el pecho de Allen para escuchar su corazón.
-(Que bueno que ya todo paso...)
En el cuarto de Nirvana, ambas féminas se preparaban para dormir, y la mayor observaba de manera amenazante a la menor en lo que se quitaba su uniforme para quedar solo con una camiseta y sus pantis y de esa manera se mantuvo, hasta que ambas se acostaron, dándose la espalda en la cama.
-Acércate a Allen y te matare.
-No si antes de termino de destrozar la cara, alguien ya me ahorro la mitad del trabajo.
-Que dijiste maldita!
-Lo que escuchaste tuerta!
-Maldita mocosa...
-Jajaja conoce tu lugar.
Mientras tanto.
-Allen.
-Arceus.
-Buen trabajo en Kalos, sabía que podrías encargarte del asunto por tu cuenta, además, de que te hiciste con unas buenas adquisiciones para tu familia.
-Supongo que sí.
-Casi mueres.
-Mejor dicho, estuve muerto, pero volví.
-Fue muy imprudente lo que hiciste.
-No creí que la situación terminaría de esa manera, no pensé mucho en mis opciones, solo reaccione.
-Haa... eso fue muy peligroso.
-Pero ya paso, tienes algo para mí?
-No, por ahora puedes descansar, te lo has ganado, hiciste un trabajo excelente allá, aunque deberías tener cuidado con tu aura, sabes que si no tienes cuidado al usarla podrías terminar muerto por ella.
-Lo sé.
-Te ganaste un buen descanso, te lo mereces, pero te estaré vigilando, hasta otra Allen.
-Hasta entonces, Arceus.
Sin sentir más la presencia del gran ser en su sueño, solo continuo con él con tranquilidad.
Arisa durmió junto a la Pokémon para poder cuidarla durante la noche si algo llegaba a pasar, y de esa manera la noche paso con suma tranquilidad hasta por la mañana.
-Cielo.
-... hm...
-Despierta el desayuno está listo, debes comer si quieres reponerte, además te están esperando.
Con calma Allen abrió sus azulados ojos, para ver como en la sala, la mayoría de sus Pokémon lo veía.
-Que buena bienvenida...
Con pereza se levantó, para ver a su Arcanine y Luxray sentados a su lado.
-Es bueno ver que ya están llenos de energías otra vez. –Les hablo al momento de acariciar sus melenas. –Cómo estuvo todo mientras estuvo, se portaron bien?
Con un asentimiento por parte de todos sus Pokémon, ambos levantaron sus patas para señalar a Diane.
-Qué paso?
-Bueno, digamos que Diane no tomo muy bien la llegada de Vela y su hija Faia... hizo un gran berrinche.
-Haa... Diane?
Al buscarla con la mirada, esta estaba sentada en un sofá con las piernas y brazos cruzados mirando hacia otro lado.
-Por qué haces eso? sabes que en esta casa nadie te quitara tu lugar, sigues siendo la que está al mando cuando ni Lux, ni Lion, ni yo estamos.
Sin verlo a los ojos esta solo sonrió, pero al recibir las caricias en sus orejas, simplemente no pudo resistir más y abrazo a su Entrenador.
-Así me gusta, y cómo se llevan ellas con los demás?
-Muy bien, la pequeña juega con Ako y Yuki y su Madre se lleva muy bien con todos.
-(Qué fue lo que te paso?)
De todos, la que se acercó a preguntar, fue Amatista.
-Una idiotez.
-(De eso ya me di cuenta, pero estás bien?)
-Sí, solo es algo temporal.
-Ya chicos, sé que los emociona verlo, pero necesito que lo dejen ir a asearse antes de comer.
El chico rápidamente subió al baño para ducharse y cambiarse antes de bajar otra vez al comedor.
-Cielo, y esa Gardevoir?
-Ella es Hela, como todos se dieron cuenta, ella fue afectada por los experimento que estaban haciendo en Kalos, pero conseguí detener el deterioro de su cuerpo y ella quiso venir conmigo. Sean buenos con ella, no es mala, ni esa Zoroark tampoco.
-Se ve algo...
-Siniestra? Sí, pero es bastante tranquila, quitando el pequeño defecto que tiene.
-Cual defecto?
-Hela mato a varias personas sin ningún tipo de remordimiento, es más, creo que le gusta hacerlo.
-Oh... bueno creo que es mejor que tú la tengas en ese caso.
-Sí, y Aurora?
-Está durmiendo, se veía cansada así que la deje dormir.
-Nina?
-Si Darling?
-No le hiciste nada verdad?
-No...
-Nina...
-Solo tuvimos un pequeño pero fuerte cruce de palabras anoche, al parecer tiene algo pesada la lengua.
-Viene de vivir en la calle, es algo altanera y un poco violenta, Gaspar podrías ir a despertar, sin bromas.
Con un feliz asentimiento, la Pokémon se perdió en una sombra para subir rápidamente al piso de arriba.
-Y qué sigue ahora Cielo?
-Ya termine el trabajo, supongo que descansare unos días y entrenare a Aurora un tiempo, antes de pensar en qué hacer.
-Si eso te mantiene cerca de Mamá entonces está bien.
Luego de un buen desayuno Allen salió junto con sus Pokémon al patio trasero donde fue recibido por los más grandes.
-También me alegra verlos, Vibrany deje una motocicleta por allí, no te la vayas a comer.
Con un asentimiento de esta, se acercó a ellos para acariciarlos un poco.
-Me hacían algo de falta, estos días fueron muy pesados para mí, pero ya estoy de regreso.
Todos sus Pokémon lo rodearon y el empezó a jugar con ellos, hasta sentir la presencia de cierta chica acercarse.
-Chicos debo presentarles a alguien. –Anuncio levantándose del pasto para avanzar hacia la chica. –Ella es Aurora, se quedara un tiempo con nosotros, así como cuando Megumi estuvo aquí, la voy a entrenar junto a Mamá para que pueda proteger de sí misma y del inocente, cuiden de ella ok?
Todos asintieron a eso viendo a la chica con curiosidad.
-Ahora, solo falta presentar al nuevo integrante de la familia, todos conozcan a Skyrex.
Con la UltraBall en sus manos, este la lanzo para que enseguida, el gran Pokémon rojo saliera gruñendo con fuerza.
En cuanto el Pokémon salió, todos retrocedieron un poco, a excepción a lo que ya lo habían visto.
-Tranquilos, Skyrex no absorberá su energía, él tiene un completo control de su poder, por lo que no pasara nada si se acercan y lo tocan.
Dicho esto, Allen camino hacia él y poso su mano sobre la melena del cuello de este acariciándola un poco.
-Lo ven, es como cualquiera de nosotros. Escucha, ellos son tu familia ahora, junto conmigo y mi Madre, ellos te cuidaran al igual que tú a ellos, bien?
El Pokémon asintió en silencio para ver a los demás antes de caminar hacia ellos y presentarse por su cuenta.
-Al menos no es tímido.
-A-Allen...?
-Si?
-D-De dónde sacaste a Yveltal?
-Lo encontré cuando me lance al vacío, ven, justo de eso iba a hablar con mi Mamá ahora.
Con sus Pokémon distraídos, nuestro Entrenador regreso al interior de la casa junto a la chica, para ver a su Madre.
-Ya me dirás lo que paso?
-Sí.
-Bien, vamos a la sala.
Ya con todos sentados, Allen respiro profundo para ver a su Madre.
-Bien todo empezó cuando...
Procedió a explicar el porqué de sus heridas, para pasar al punto importante, el encuentro con su Padre, les conto cuidadosamente lo ocurrido para que Arisa empezara a llorar con cada palabra que el chico decía.
-Y eso me dijo...me pidió que te dijera, que te ama y te amara por siempre.
Solo esas palabras bastaron para que Arisa empezara a llorar como una niña pequeña que incluso le extendió los brazos a su hijo para que la consolara, cosa que le tomo unos largos minutos.
-Ya paso... tranquila.
-Ya estoy bien Sniff pero si viste a tu Padre eso significa que tu...
-Parece que estuve muerto por unos minutos.
-Allen no digas eso con tanta calma!
-Má ya paso, Papá dijo que aún no era mi momento ni el tuyo.
-Fuiste muy imprudente, cómo pudiste hacer algo así, fue una locura!
-Lo sé.
-Solo por eso, no dejaras la casa hasta que yo diga.
-Entonces no saldré más.
-No me contradigas.
-Está bien, lo que su señoría quiera.
-Qué bueno es tenerte aquí otra vez mi Cielo... la angustia me estaba comiendo por dentro, no debes darle este tipo de sustos a tu Madre, lo sabes verdad?
-Lo tengo muy claro.
-Dime que es lo que haremos con la pequeña?
-Ella quiere ser como yo, es joven y tiene bastante energía y determinación, creo que ya es hora de empezar su entrenamiento.
-Tehehe creo que estaremos entretenidos por un buen tiempo.
Actualizado el 27/01/22.