El Entrenador Distante.

Capítulo 05: Nuevo Hogar.

A la mañana siguiente, ya con todos despiertos, desayunados y más alertas. Partieron del Centro Pokémon de regreso a Ciudad Jubileo. Seguidamente de seguir hacia el norte.

-Cielo... falta mucho?

-Ya no tanto. Según el mapa ya estamos cerca.

-No quiero seguir caminando...

-Solo un poco más Má.

-Pero a dónde vamos?

-Eso es lo que quiero saber... qué trama ese Dios?

Siendo consiente que con el Ser que creo el mundo todo era posible, el tratar de predecir el que les estaba esperando al final de ese mapa era un enigma.

-Ese mapa no te puede decir la distancia?

-Ya casi no falta nada.

El Luxray presente, al ser el que mejor ojos tenia, logro distinguir algo en la distancia, por lo que se adelantó y avanzo por la pequeña colina hasta divisar lo que había visto, lanzándole un gruñido a su Entrenador.

-Ya solo un poco más Mamá, vamos.

Para darle ánimos, su hijo la tomo de la mano y casi que la llevo hasta subir ellos también esa colina encontrándose con lo que su Pokémon había visto.

-No puedo creerlo.

En el gran campo despejado y nivelado, se encontraba una gran cabaña, rustica pero a la vez notoriamente moderna y ambientada a la perfección con el ambiente que tenía alrededor.

Allen miro su mapa y vio que en el lugar que estaba, era el punto exacto en el mapa que Arceus le había indicado, por lo que solo pudo dejar salir un "Jum" por la impresión seguido de su cara de sorpresa.

Ya frente a la gran casa, tanto los Pokémon como Arisa la miraban con interés y curiosidad.

-Cielo... qué hermosa cabaña, de quién crees que sea?

-No creo que creas la respuesta a eso... -Respondió su hijo mirando al casa y luego el mapa. –Creo que es un poco exagerado.

-La hice así apropósito, muchacho. –Aclaro la voz que resonó en todo el lugar para seguidamente de un portal aparecer el dueño de esta. Dejando frente a todos, al gran Pokémon Alpha. –Considere que este sería el tamaño adecuado.

-La hiciste así apropósito?

-Así es. Veras, ya que necesitas una granja donde los Pokémon que atrapes puedan vivir y querías un lugar cómodo y seguro para tu Madre. Este lugar soluciona esos dos problemas muy fácilmente, esta casa es para ambos, un lugar al que puedan llamar hogar.

Tanto los 2 Pokémon presentes como la propia Madre de Allen estaban sorprendidos por quien estaba frente a ellos, pero esta última aun trataba de entender de quien se trataba.

-Cielo... él es el Dios? –Pregunto la mujer sin saber muy bien que hacer.

-Así es Mamá. Su nombre es Arceus. El Dios Pokémon.

El Pokémon miro a la mujer a los ojos y al notar su impresión simplemente hizo un gesto con su cabeza en señal de saludo, seguido de dirigirle la palabra.

-No debe sentirse nerviosa delante de mi presencia. Esta morada la hice para ustedes. –hablo con gran amabilidad el Pokémon. –No estoy muy pendiente de los gustos humanos, pero basado en sus recuerdos, cree este lugar para usted y su hijo. Trate de hacerla lo mas cómoda posible para ambos.

-Mi esposo y yo siempre quisimos una casa en el campo o las montañas... es... es perfecta.... –Articulo la mujer mirando con gran emoción y alegría la que sería su nueva casa. –N-No tengo manera de agradecerle esto.