Estar con Nayeon siempre era muy divertido, ya que me animaba en cada momento que podía.
La tarde esta siendo tan entretenida que incluso Tzuyu la esta pasando bien y logró despejarse lo suficiente, por mi lado, me sentí mucho mejor, ya que al menos pude olvidar mis problemas por un rato; no había recibido ningún mensaje de Haein hasta ese momento, así que supe que definitivamente ya no nos veríamos ese día.
"Van a estar algunas amigas de Shadi" eso fue lo que Wendy me había escrito hace más de diez minutos y con ello la punzada en mi corazón había regresado, al igual que la inseguridad que volvía a apoderarse de mí.
──¡Ya basta, Jisoo! Deja de pensar en eso al menos por hoy. ¡Maldición! ─bufó Nayeon mientras me abrazaba por el cuello.
Sabía de sobra que ella no estaba de acuerdo con mi relación, pues nunca fue partidaria de Haein, mucho menos ahora sabiendo lo mucho que me afectaban sus acciones.
──Ya, ya. Está bien. Denme un momento, debo tomar esta llamada. ─agarre mi celular, es una llamada de Lisa. ──¿Hola?
──Hola, Chicken. ¡Feliz Cumpleaños! ─me dijo con un tono muy contento.
Le hice una seña a las chicas con la mano indicándoles que me esperaran un momento alli, ya que decidí alejarme un poco del ruido y así poder hablar más cómodamente.
──Gracias, Limario. ¿Como estas?
Luego de que mi hermana se casara, definitivamente me volví mucho más cercana a Lisa, ya que ahora había cambiado mucho convirtiéndose en una buena madre y una excelente esposa; cuidaba de más a Jennie y cumplía todos sus caprichos.
Incluso permitió que empezara a modelar en la empresa contra su voluntad y sus celos, ya que no quería que nadie mirara de más a su esposa, pero es mi hermana de quién hablamos aquí, Kim Jennie, quién siempre se ha salido con la suya.
──Bueno, realmente no dormí mucho anoche, porque Leo se quedó despierto hasta muy tarde... cada vez tiene más energía. ─suspiró. ──Es la mejor etapa de mi vida aunque no lo creas. ─Lisa rió bajito.
Leo siempre fue un niño bastante travieso y enérgico, no obstante, ahora le gustaba mucho jugar al guardaespaldas de mi hermana ya que es tan celoso con ella, así como lo es su madre Lisa.
──¿Puedo hablarte de algo importante o interrumpo tu momento? ─preguntó Lisa con algo de vergüenza. ──Seguramente debes estar ocupada.
──No interrumpes nada, estoy con mis amigas. ─carcajeé. ──Dime, dime.
──Muy bien. Desde que me independice de mis padres he trabajado duro por construir mi propia empresas. ─aseguró Lisa.
Es verdad, pues luego de que recuperara a Jennie sus padres la dejaron sin ningún apoyo económico y básicamente en bancarrota, por lo que se valió de su esfuerzo propio y empezó a trabajar muy duro para crear su propia empresa. Lo cual no fue nada fácil, pero ahora era un éxito rotundo en Tailandia.
──Una amiga de la Universidad se comunicó conmigo hace un tiempo y me dijo que ya era completamente viable crear una sede de Lili's Films en Australia, por lo que ahora somos socias, pero como sabes, no me puedo mudar de forma permanente porque debo seguir atendiendo varios compromisos aquí...
──Felicidades, Lisa. Me alegro muchísimo por ustedes. ─muy muy honesta. Lo dije de corazón.
──Gracias, Chicken. Lo que intento hacerte saber es... ─se escucha agobiaba. ──Jisoo, de verdad me gustaría que fueras la CEO en la sede de Australia y que seas mi mano derecha en los negocios.
¿Qué? ¿Qué?
Madre mia...
──Lisa, guau...
Me quede en silencio luego de eso porque no sabía que decirle con exactitud.
No podía dejarlo. No podía dejar a Haein.
──Sé que es repentino y muy prematuro, claro. No tienes que darme la respuesta ahora mismo, puedes pensarlo, Chicken. ─Lisa soltó una carcajada y me sentí más tranquila.
──Gracias. Pero Lisa, no sé nada de publicidad, modelaje o diseño, yo soy más, mmm... no tengo experiencia. ─le dije con pura frustración.
──¡Eso no es cierto! Tienes un talento natural. Te recuerdo que fuiste de gran ayuda en muchas campañas claves de la empresa, gracias a las ideas tan innovadoras que nos diste. Además, mi amiga Alice te va a enseñar lo básico. ¡Venga, anímate! Eres la única persona en quien podemos confiar. ─afirmó muy animada.
No puedo aceptar la oferta.
Se que son mi familia, pero no puedo dejar a Haein y sé que Jennie no va a aceptar que vaya conmigo en absoluto.
──Lisa, no creo poder aceptar. ─le dije en voz baja.
──Mmm... ─suspiró. ──Está bien, no te voy a presionar ahora en tu cumpleaños, por el momento le voy a decir a Alice que se contacte contigo. ¿Qué te parece ir aprendiendo del negocio de manera remota? Así puedes pensarlo con más calma. ─propusó mi cuñada y sinceramente la amé por eso.
──Eso suena bastante bien, Lisa. Cuenta conmigo entonces. ─respondí afirmativamente.
──Perfecto. No te molesto más, termina de pasar un lindo dia.
──Igual tú, saluda a mi hermana y a Leo por mí.
──Por supuesto. Cuidate, Adiós. ─se despidió antes de colgar.
La idea me encantó porque iba a aprender algo nuevo, además, estoy segura de que mis estudios en finanzas y administración me ayudarán de alguna manera.
Es una buena noticia y emocionante también.
Nunca quise recibir ayuda de Jennie o de Lisa antes porque ellas ya tenían sus propias responsabilidades y no me parecía justo tomar partido del esfuerzo ajeno porque estaba trabajando por mi propia mano y no quería deberle nada a nadie, sin embargo, irme a Australia no sonaba muy atractivo, pero por el momento aprender de la mencionada Alice es una excelente oferta.
──Estoy lista. ─regresé junto a mis amigas. ──¿Nos vamos?
──Tu madre se va a enojar, ya vamos quince minutos tarde. ─Nayeon se cruzó de brazos con ligera molestia.
──Vas a ir tu Nayeon, sabiendo eso no se va a molestar jamás. ─solté una risita.
──¿Segura que no incomodo? ─preguntó Tzuyu cabizbaja.
──No seas tonta. Mi madre te va a adorar, además, solo vamos a estar nosotras, los demás nos verán después en Kwan. ─la abracé por el cuello.
Mi madre me había preparado una pequeña reunión en casa, ya que pretendía que pidiera mi deseo de cumpleaños como es habitual.
Siempre fue una pequeña tradición para nosotras.
──¡Feliz Cumpleaños, Jisoo! ─dijo entregándome una bolsa mediana.
──Gracias, Seulgi. No te hubieras molestado. ─respondí avergonzada.
Su obsequio de cumpleaños nunca me ha faltado, es muy considerada.
Ver a Seulgi a diario se ha vuelto algo común también, ya que desde su divorcio pasa mucho tiempo con mi madre, puesto que Seulgi la llevaba a casa después del trabajo, le cocinaba, le traía obsequios, en fin... estaba siendo muy considerada y muy buena amiga también...
──Hija, sopla las velas y no olvides pedir tu deseo. ─mi madre me guiño un ojo.
Era sencillo, sabía lo que quería desde hace mucho tiempo.
Ya no quería seguir sintiéndome sola o infeliz, porque de verdad anhelaba que no se me estrujara más el corazón.
Solo quiero ser feliz y justamente eso deseé.
──Cada vez está más grande, cariño. ─dijo mi madre entre sollozos. ──Sin importar cuantos años cumplas, siempre vas a ser mi bebé. ─finalizo y luego me dio un abrazo fuerte muy fuerte.
──Gracias, mami. Así será. ─la apachurré fuerte.
──Bueno, bueno... a comer pastel chicas. ─les pidió mi madre con mucho ánimo.
Fue un momento muy íntimo y feliz, por eso, me senti muy afortunada de tener a estas personas a mi alrededor, lastimosamente, mi día hubiera sido perfecto si Wendy y Haein hubieran estado acompañándome.
Mas tarde como lo habíamos decidido ya, nos dirigimos a Kwan, puesto que ahí nos esperarían los demás.
Hace mucho tiempo quería ver a Dahyun y verdaderamente estaba muy emocionada de que también haya decidido venir a celebrar conmigo, por otro lado, Nayeon se excusó diciendo que regresaría luego pues al parecer debía ir a buscar a alguien más, entonces, seguí justo a Tzuyu, hasta encontrarme con todos los chicos.
Una vez en Kwan, nos encontramos a Daryl, Alex, Toni y Dahyun, quienes en cuanto me vieron se acercaron a abrazarme y a felicitarme.
──Kim Jisoo, ven aquí. ─me pidió Dahyun levantándome del suelo y haciéndome girar. ──Te extrañe mucho. ¡Feliz Cumpleaños!
──¿Cuánto tomaste? ─pregunté entre risas a lo que ella hizo una pequeña mueca graciosa. ──Comenzaste a beber muy pronto.
──Solo un poquito nada más para entrar en calor. ─agregó Dubu entre risas.
──Vamos despacio, tranquila. ¿Dónde está Jihyo? ─pregunté y al momento Tzuyu tomó mi brazo dándome un pequeño apretón.
Por consiguiente me percate de la situación.
Jihyo estaba hablando muy cerca con una chica más adelante.
¡Estas en problemas, idiota!
En un movimiento rápido la chica la tomó por la cintura y la acerco a su cuerpo, de verdad esta a punto de besarla.
──¡Cough! ─emití una tos fingida.
En cuanto mi amiga me miró le hice una seña articulando con mi boca, ¡idiota! Entonces, Jihyo se apartó de la chica delicadamente y luego se quedó estática viendo como Tzuyu se acercaba emanando fuego.
──Tzuyu, n-...
No termine de decir cuando Tzuyu ya se encontraba tomando de la mano a Jihyo apartándola de golpe de la chica extraña y reveladora.
──Aléjate de mi novia, estúpida. ─le gritó Tzuyu a la extraña con enfado.
──Jajaja, ¿Tu novia? ─indago la tercera en discordia. ──El bombón dijo que estaba sola y como no soy la clase de persona que deja a una belleza sola decidí acompañarla. ─agregó con una sonrisa ladina observando de más a Jihyo. ──Bájale a tu enojo, seguramente eres una frustrada.
──¿Disculpa?, ahora sí te m-... ─Tzuyu se le abalanzó, siendo rápidamente detenida.
──Nos vamos... ─interrumpió Jihyo poniéndose delante de Tzuyu. ──Disculpa la escena Solar, te veo luego. ─dijo tomando fuertemente de la cintura a Tzuyu y luego se acercaron a nosotros.
──Iugh. ¡Sueltame, ya! ─le pidió Tzuyu entre gritos a Jihyo.
──Tú y yo no tenemos nada, Tzuyu. Así que te pido, no. Te exijo que sea la última vez que me haces este tipo de espectáculos sin sentido en público. ─Jihyo la fulminó con la mirada.
Tzuyu lució completamente triste mientras agachaba la cabeza, seguro está a punto de llorar.
Jihyo...
──¡Jichu! ¡Feliz Cumpleaños, hermana! ─Jihyo me dio un abrazo rompe huesos. ──¿Por que la trajiste, infeliz? ─susurro en mi odio sin soltarme.
──Es mi amiga también, idiota. Comportate un día al menos. ─le terminé diciendo con molestia y luego le di una palmada fuerte en la espalda.
──¡Auch! ─Jihyo me guiñó un ojo. ──¡A beber, gente!
Ante ese gritó realmente empece a tomar de todo lo que me ofrecían, por lo que luego de un tiempo mi cabeza comenzó a darme vueltas y mi cuerpo se empezo a sentirse más liviano que de costumbre, entonces, decidí acercarme a la barra por algo de agua antes de perder completamente la cordura.
──Hola, me das una botella de agua, por favor. ─basicamente grité por el volumen de la música.
──¿Jisoo? ─inquirió con total sorpresa cuando se dio la vuelta.
──¿Mike? ─dije casi en un grito.
Se ve muy guapo, tiene una sonrisa muy linda, además de que siempre se ha sonrojado cuando lo miró directamente a los ojos.
──Hace taaanto que no te veo por aquí. Dejaste de escribirme. ─hizo un gesto juguetón simulando dolor.
¿Ahora que hago?
──Oye, eso no es cierto. JAJAJA.
Disimula.
──Sabes que es cierto y que lo miento. ¿Es verdad que empezaste a salir con Haein? ─preguntó luciendo afligido.
──S-Si, lo lamento.
──Oh, vaya, entiendo. Déjame invitarte algo al menos. ─otra vez esa hermosa sonrisa. ──Por el reencuentro. ─soltó una risita.
──Gracias. ─le dije sonriendo de la misma manera.
No sé por cuánto tiempo estuve hablando con Mike, porque realmente es tan agradable como siempre y muy atento.
En un movimiento suave como era costumbre, tomo mi mano y me miró directamente a los ojos.
──Yo... aun te quiero un poco, Soo. ─se acercó lentamente con destino a mis labios.
──Mike, yo... ─me congelé.
──Ay, perdón. Nos vamos. ─Nayeon apareció de pronto y me abrazó por el cuello. ──Luego nos vemos, Mike. ─me apartó de allí con rapidez.
Tan solo le agité mi mano a Mike como despedida.
──¿Donde estabas? ─le pregunté con molestia.
──Alguien está en Seul y tuve q-... ─Nayeon intentó explicarse.
──Hola.
¡No puede ser! Esa voz...
──Ho-Hola, Demian. ─tartamudeé ante la tremenda sorpresa.
A él fue a quien fue a recoger Nayeon.
Disimula y límpiate la baba.
──Que bueno verte, ha pasado tanto tiempo. ─él me miró de arriba a abajo tanto como lo hice yo.
──¡Si! Aunque de todas formas he sabido de ti. ─dije siendo lo más inoportuna.
Soy idiota.
──¿Soy famoso? ─preguntó socarrón.
Es un mujeriego, por lo que sí, definitivamente me enteraba de todo eso.
──Una fama no tan aclamada. ─dije con dureza y frialdad.
──Bueno, bueno, vamos a seguir con la fiesta. ─Im nos interrumpió en cuanto se dio cuenta de nuestras miradas. ──Déjalo estar, Soo. Cálmate. ─susurró Nayeon.
El tiempo pasó y el alcohol nos hizo demasiado efecto.
──Yo te amo con todo mi corazón, Soo. Eres mi mejor amiga... ─Nayeon recargó su frente en la mía. ──Si quieres estar con Demian, hazlo.
Las borrachitas nos dicen.
──No tu... tu debes estar con él. ─respondí colapsando.
Estamos muy ebrias.
Observé a mi alrededor y todos ya se estaban tambaleando, tanto así que ya casi no podían estar de pie.
¡Mierda!
Sin embargo a pesar de todo solté una carcajada cuando vi a Jihyo tomar por la cintura a Tzuyu y besarla con hambre con si nada, tan solo porque le dió la gana.
El beso entre mis amigas subía y subía de tono.
Seguramente tendría una llamada de Jihyo muy temprano en la mañana a causa de su pequeña aventura de medianoche, por lo que solté una carcajada y luego negue con la cabeza.
──Soo, mírame. Él me rechazo, no quiere estar conmigo. Solo es y será siempre un buen amigo. ─Nayeon tomó mi cabeza y pegó su frente con la mía una vez más. ──Solo quiero que seas feliz, siempre hubo algo entre ustedes, así que no te reprimas por mí, te amo amiga...
──Yo... mmm... ─farfullé, tengo que sacar esto de mi pecho. ──Sabes que siempre voy a respetar tus sentimientos, lo que quiere decir que no va a pasar nada entre el y yo, pero justo ahora sinceramente tengo que hablar con Demian.
Nayeon me dejó el camino libre, por ende,
d
irigí mi mirada a Demian, quién estaba sentado bebiendo sorbos grandes de una botella afuera del bar, entonces tomé una bocanada de aire y me acerque a él tomando asiento a su lado.
──¿Me odias? ─pregunté viendo al frente. ──No te trate muy bien en la secundaria.
──Bueno... Realmente nunca entendí porque cambiaste tanto conmigo, pero no, nunca te he odiado. ─respondió en voz baja.
Estamos muy ebrios.
──Es porque estaba enamorada de ti. ─lo solté con firmeza, por lo que él me miró luciendo muy confundido, pero aún así no respondió. ──Pense que era un gusto tonto por mi mejor amigo, pero luego pasó el tiempo y me di cuenta de que no era solamente eso..
──Y-Yo...
──Me dolió mucho cuando empezaste a salir con India porque no entendía porque había sido ella y no yo tú elegida. ─agregué sincera.
──Jamás lo supe... si hubiera sabido yo...
──No pasa nada, Demian. Solo quería decirlo porque siempre lo estuve ocultando con un dolor extraño. ─afirmé entre suspiros. ──Me siento mejor ahora luego de ser sincera. ─agregué mientras me ponía de pie.
──Espera, Jisoo... Tu también me gustabas... en ese momento fui cobarde, pero ahora tú y yo po-...
Sabia a lo que se refería y aunque mi mente me impulsaba a decirle que sí, mi corazón me detuvo.
──No, Demian. Estoy con alguien, pero aún así me gustaría seguir hablando contigo como amigos si quieres. ─le propuse sonriendo y él hizo lo mismo.
──Claro, siéntate un rato más.
Y así lo hice, tan solo dándome la oportunidad de compartir con él como siempre lo quise.
──Vamos, te voy a llevar a casa. ─afirmó Nayeon con seguridad.
──¿Estas segura de que puedes conducir así? Estas muy tomada, bueno... todos lo estamos. ─lo dije entre risas.
──Si, muy segura. He conducido peor. ─respondió animada. ──JAJAJAJA solo vámonos.
Tiene razón en eso, pero no me gusta que lo tomé de costumbre, es muy peligroso.
──Bien, déjame llamar a los demás. ─agregue en busca del grupo.
Al parecer el hermano de Toni vendría por ella y por los demás, por lo que gracias a Mike ellos ya no recibirían ni una gota más de alcohol mientras esperaban.
──Te amo, mi amor. No me dejes, por favor... y-yo... quiero todo contigo. ─decía Jihyo llorando a lágrima viva mientras recargaba su cabeza en el hombro de Tzuyu, por lo que la última la tomo de la cintura ayudándola a caminar.
Dios mio.
Jihyo es la peor del grupo, su condición era desastrosa, la resaca iba a ser tenaz al próximo día. En el transcurso de la noche varios chicos habían intentado ligar con Tzuyu, lo que la impulso a beber con más brío por la pena de la ruptura y los celos.
──Nayeon, definitivamente no podemos ir a mi casa. Déjanos en un hotel, por favor. ─le solicitó Tzuyu e inmediatamente supe que Jihyo iba a divertirse.
Esa idiota.
──Nada de eso primita, se quedan en mi departamento. Tengo libre una habitación. ─respondió Nayeon a lo que Tzuyu asintió.
──Déjame ayudarte, te ves mal. ─le dije a Demian.
──Estoy... b-bien. ─respondió necio.
Demian esta igual que Jihyo y no podía caminar bien, entonces pase mi mano por su cintura y apoye su brazo en mi hombro.
──No lo estas, casi te caes. ─le reproche.
──Suban todos. Voy a encender el auto. ─nos pidió Nayeon revolviendose el cabello con la mano.
Demian subió como pudo siendo muy torpe cerrando fuerte la puerta y luego apoyando su cabeza en la ventanilla.
──Soo, ayúdame con Jihyo, por favor. ─me pidió Tzuyu luciendo acomplejada.
──Voy.
Rodeé el auto y luego tomé de la cintura a mi amiga, para luego levantarla un poco para que subiera y Tzuyu la ayudará a sentarse.
──Eres tan hermosa, mi amor. ─balbuceaba Jihyo mientras le llenaba de muchos besos la mejilla a Tzuyu.
──Gracias, Soo. ─suspiró Tzuyu mientras intentaba hacer que Jihyo descansará su cabeza sobre sus piernas.
──¡Mierda! No enciende... ─Nayeon peleaba con el auto. ──¿Quién quiere empujar?─me miro riendo.
No puede ser, está idiota.
No comprendía porque Nayeon seguía conservando ese Mercedes Benz tan viejo, aunque es un deportivo clásico muy bonito, solía fallar bastante y ella se negaba a comprar uno nuevo.
──Debes cambiar el maldito auto. ─bufé inmediatamente.
──¡Jamás! Mueve ese lindo trasero y empuja. ─respondió con voz de mandona.
──Idiota.
Fui la única que pudo bajar al menos con algunos sentidos intactos, entonces empujé lo más fuerte que pude, pero no lograba moverlo un milímetro.
──¡Mierda!
Todo me daba vueltas, no tengo la fuerza suficiente en estas condiciones.
──Déjame ayudarte.
Lo que me faltaba... Es Piero.
──Está bien. ─dije fría.
Odiaba tener que aceptar su ayuda, pero de una manera u otra debiamos llegar a casa.
──Todo listo. ─gritó Nayeon. ──Es suficiente.
──Gracias, Piero. Adiós.
──¿Haein sabe que estas así... con él?
Preguntó y supe inmediatamente que se refería a Demian, porque todos sabían mi historia frustrada con él.
──¿Disculpa? ─gire mi cuerpo completamente enfurecida y lo encare.
──No lo sabe, ¿verdad?, vaya, vaya... ─comentó Piero con ironía.
──No tengo porque darte explicaciones. ─estallé de enojo y simplemente lo ignoré.
Me subí al auto junto a mis amigas y emprendimos camino a mi casa mientras yo ardía de rabia.
──Chewy, escríbeme apenas lleguen. Cuídala. ─le solicité con gracia. ──Y por favor ten paciencia en la mañana. ─dije mirando a Jihyo dormir.
──Si, lo se. ─respondió ella sonriendo.
──Sabes que puedes hablarme siempre que quieras. ─tome su mano un segundo. ──Al menos supiste que la idiota aún te ama de verdad.
──Si, me siento más tranquila. ─sonrió enternecida. ──Descansa.
──Conduce con cuidado. Ve despacio, Nayeon. ─le pedí básicamente regañandola.
──Lo sé, nos vemos mañana, preciosa. Adiós. Te quiero. ─Nayeon se despidió con chulería.
De esa manera los vi irse despacio, entonces revisé mis bolsillos, agarré las llaves y entré a casa.
Eran las cuatro de la mañana y aún así yo tenía la esperanza de encontrar a Haein en la habitación, pero no fue así porque no había señales de él.
Me puse el pijama y me acosté, tomé mi celular y entonces empece a leer todos los mensajes pendientes; la mayoría eran mensajes de felicitaciones, pero... también había un mensaje de ¿Kai?
Que extraño.
Nunca hemos hablado, lo cuál me generó mucha curiosidad y lo abrí.
"Debes saber algo de Haein,
veámonos mañana".
Me quede helada inmediatamente.
Kai sabia absolutamente todo de todos, por lo que sinceramente debía ser algo grave para estar escribiéndome a espaldas de Haein.
No sabía si era correcto o no hablar con él.
Hace algunos dias Kai había terminado con Wendy y ella no había querido romper lazos a pesar de que él le había sido infiel.
Kai le contó a Haein que se había acostado con una chica en una fiesta, por lo que mi novio quiso que Wendy supiera la verdad y le conto lo sucedido.
Obviamente Kai se molestó un poco con él, pero siguió todo de manera normal y decidieron seguir como amigos.
Tienes que hablar con Wendy.
No respondí el mensaje y simplemente deje de lado mi celular e intente dormir luego de un día sumamente increíble y agotador.