Capítulo 10 "Perdonar" (Leeteuk)

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¿En serio eso les iba a salir bien? Pero a pesar de que veía que Heechul no estaba bien del todo, no estaba deprimido ni mucho menos como la otra vez. Parecía tener las cosas claras, y no iba a ser yo quien le hiciese cambiar de opinión, porque si me contaba eso era porque… 

-¿Me intentas decir que tú y yo…?

-No.-alzó la mano- No hay un tú y yo. Solo… Solo una necesidad. No voy a salir con nadie. No quiero una relación. ¿Entiendes? Solo quiero…

-Sexo.-terminé su frase.

-Así es. Si buscas otra cosa, entonces nada… No quiero más líos y menos siendo del mismo grupo.

-Busco lo mismo que tú.- me sinceré- Tampoco quiero nada serio.

-¿Eso es un sí?

-Claro.

-Sin pedir nada a cambio. Nada de quejas luego.-insistió.

-Que si Heechul. Que te he entendido.

-Ok.

Terminamos de cenar y al salir del restaurante le paré un momento. Quería saber si los chicos debían estar al corriente de lo nuestro o no. Por mi parte prefería que no. Prefería que quedase entra ambos. Y él dijo que pensaba igual que yo.

-¿Quieres que vayamos a un hotel?-le propuse.

Asintió y nos dirigimos a este. Cada uno reservó un cuarto aunque luego solo íbamos a utilizar uno. Llamé a su puerta y me dejó pasar al instante. Nos miramos a los ojos y él apartó la mirada y me besó directamente. Sus labios eran algo bruscos. Era como si quisiera que todo sucediese deprisa. Sentí que había algo raro pero sus manos se aferraron a mi cuerpo sin dejarme separar. Sus labios, su lengua, todo era frenético.

-Heechul…-balbuceé como pude.

-No.-dijo y continuó mientras me desabrochaba los pantalones.

Caminamos hacia la cama mientras nos desnudábamos. Seguía notando que algo no marchaba bien. Seguía notando que algo no me cuadraba. Me besó nuevamente cuando estuvo desnudo por completo y directamente se colocó a cuatro patas sobre el colchón.

-Hazlo.-susurró.

-Heechul… ¿Qué te pa….?

-Hazlo.-repitió más fuerte.

-Vamos, esto me da mal rollo. ¿Qué pasa?

-¡¡Halzo!!-me gritó.

Le salió del alma y creí que si no lo hacía rompería a llorar. Así que me puse el preservativo y con cuidado le penetré, empezando a moverme poco a poco y luego más rítmicamente. Fue entonces cuando lo escuché… No gemía… Heechul no gemía… Heechul estaba llorando. Me paralicé.

-Sigue…

-¿Te duele?

-No…

-Heechul…

-Por…favor…sigue…-sollozó.

Con mi mano le masturbé mientras continuaba moviéndome hasta que terminé y él al momento. Entonces se levantó y fue hacia la ducha. Yo me quedé a cuadros. ¿Qué había pasado? Sentía como si le hubiese violado. No me gustaba sentirme así. Tiré el preservativo a la basura y fui al baño. Abrí la puerta y estaba sentado en la ducha mientras el agua le caía encima.

-Heechul…

-Lo siento…-jadeó con el pelo pegado a la cara por el agua- Siento esto… Pero… Tenía que pasar por ello.

Me arrodillé al lado del plato de ducha y posé mi mano en su pierna.

-Yo… Necesitaba dejarlo atrás. Creí que sería más sencillo, pero duele… Duele mucho… Hyung… Sentía como si aún le fuese infiel. Pero si no lo hacía ahora, no podría seguir como si nada y volvería a estar mal. Ahora… Me siento mejor.

-Te sientes como una mierda.-le corregí.

-Pero me sentiré mejor. Solo necesitaba esto. Borrar el rastro de él de mi cuerpo. Obligarme a mí mismo a estar con otra persona. Necesito olvidar sus besos, olvidar su tacto.

-Pero hay otras maneras… Menos violentas.-terminé por entrar en la ducha y le obligué a ponerse de pie- Heechul, no me gusta verte mal. Por eso odio aun a Hangeng. Ya no porque se fuera, si no por lo que te hizo. Por cómo te vi. Para mi, vosotros, cada uno de vosotros sois mis hermanos. Mis donsengs. ¿Entiendes? No perdonaré a nadie que os dañe. Nunca.

No dijo nada y yo le abracé mientras el agua nos empapaba a los dos. Acaricié su pelo y besé su cabeza. Al final, tras unos minutos se separó de mí y me sonrió.

-Gracias. Por todo. Siempre. Sé que no lo digo a menudo… Sé que te he causado problemas. Por ello… Por esto. Gracias.

-De nada. Seguiré cuidando de ti.

Asintió y salimos de la ducha. Yo me vestí y le dije a él que se quedase en el hotel. Iba a necesitar intimidad para llorar lo que necesitase.

-Solo te voy a exigir que después de esta noche, no llores más. Quédate y desahógate. Llora cuanto quieras, pero mañana, quiero que vuelvas a ser el de siempre. ¿Ok?

-De acuerdo.

-Si no, no te dejaré entrar a casa.

-Tsss. No ha nacido persona capaz de dejarme en la calle.-bromeó cansado.

-Adiós.

-Adiós.

Sí, no podía perdonar a Hangeng por todo el daño que le había causado y aun causaba a uno de mis hermanos. No podía. ¿Podría perdonarle algún día?

¿Amor o amistad? Segunda parte. (Super Junior-Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora