Capítulo 20: N.62.

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-Darling, qué es eso que llevas en los brazos?

-Hay algo que todas tienen que ver. –Respondió él mirando a todas con calma. –Pero necesito que permanezcan en calma, no quiero que se asuste. Kanna, Aarón, Gaspar, vayan afuera. En un rato iré a verlos, quiero un ambiente que no la estrese ni la incomode.

Sus Pokémon respondieron a eso con un asentimiento, y la tipo Psíquico/Hada los transporto fuera de la casa.

-Qué tienes allí Cielo?

Allen se agacho y poso con cuidado lo que llevaba en los brazos en el suelo del laboratorio y con cuidado la descubrió un poco encontrándose con los ojos de N.62. Esta al ver como él se colocaba de pie nuevamente, busco a hacer lo mismo con algo de torpeza provocando que la toalla que la cubría se deslizara por su cuerpo dejándola perfectamente visible a las presentes.

Los ojos de las mujeres al ver lo que tenían al frente solo pudieron abrirse de la impresión, pero ninguna fue capaz de articular ni una sola palabra.

La pequeña se levantó con algo de dificultad hasta que pudo sostenerse de sus propias piernas y cola, pero aun así le costaba un poco por lo que con inocencia extendió los brazos hacia Allen y este respondió tomándola de las manos ayudándola a caminar hacia él, con calma antes de la pequeña frotarse contra su abdomen con cariño y calma.

-No puedo creer que lo consiguieran... -Articulo Albedo, acomodándose los lentes para poder ver mejor a la criatura.

-Ella qué es... -Murmuro Aurora.

La gran tensión que se había generado en el laboratorio, fue extinguida muy rápidamente por una sola persona.

-Ay Cielo que mona es, mírala cree que eres su Papá que adorable! –Hablo exaltada la Mayor atrayendo rápidamente la atención de la pequeña.

-Mamá baja un poco el tono, no quiero que se asuste. No sé qué podría llegar a hacer si eso pasara. –Agrego el Muchacho notando como N.62 posaba sus ojos en las otras mujeres presentes en la habitación, cambiando un poco su expresión o así fue hasta que puso su mano frente a ella, haciendo que ella lo mirara nuevamente calmándola. –Hasta que se acostumbre a la presencia de todas, lo mejor será que no se acerquen mucho a ella.

-Entendido Cielo, pero y tú?

-Me quedare con ella hasta que se duerma. Veré que puedo averiguar mientras tanto. Lo mejor será que todas suban, esto puede tardar un rato, en cuanto termine subiré.

-Ok, ten mucho cuidado Cielo por favor.

-Claro.

-Ya lo escucharon. Vamos todas a la sala, haya podremos seguir mirando las noticias.

Con todas ya fuera de un posible peligro, Allen solo miró nuevamente a la criatura que se aferraba con cariño a su cintura.

-Siila.

-Si Sr.

-Necesito ayuda con esto. Debemos analizarla, prepara todo, hay que hacerlo de una manera que no la estrese.

-Enseguida.

El Muchacho levanto a N.62 como quien sostiene un niño en peso y la llevo hasta una de sus mesas de trabajo, donde después de remover algunas cosas la sentó allí y se posó con una silla a su lado mientras ella lo sostenía cerca de ella usando su cola para retenerlo.

-Parece que le tiene afecto Sr.

-Así es, supongo que fue porque fui lo primero que vio y con lo primero que ha interactuado. Será mejor hacer algunos análisis hoy quiero estar seguro que sacarla de esa incubadora no tuvo repercusiones en ella, tampoco quiero agobiarla. Mientras yo la entretengo quiero que empieces con los análisis de su composición y fisiología, yo veré si puedo descubrir algo con solo verla.

El Entrenador Distante.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora