El Entrenador Distante.

Capítulo 20: Cacería de Dragones

-Estás seguro?

-Lo estuve pensado todo el día, y creo que es lo mejor.

-... Bien.

Allen extendió la mano y tomo el objeto para esconderlo entre sus ropajes.

-Se están moviendo a Ciudad Teja. Van por Reshiram, deben impedir que lo consigan, avísenles a los demás, eso es todo lo que tengo por ahora.

-Y qué harás ahora.

-Un amigo mío está en el caso. El llegara en breve a ese lugar para ver que puede hacer, es el momento de la despedida, cuanto esto acabe, volveré a regresarte la punta, yo no la necesito.

-Entiendo.

-Hasta entonces.

"Kuro" se perdió en la noche dejando solo a los presentes en el lugar.

-Hay que avisarles a todos que estas bien Roxie, estaban preocupados de que algo te pasara.

-Déjalo para mas tarde Cynthia. Es ya muy tarde, deberías ir a descansar, llévate a Roxie contigo.

-Es cierto, vamos.

Al quedarse solo, Drayden miro por la ventana de su departamento meditando sobre lo sucedido.

-Mañana será un día muy ajetreado, lo mejor será descansar.

Mientras tanto, en las frías y calladas calles, podíamos ver una silueta caminando sin preocupación alguna, su respiración se reflejaba en las tenues luces de los faroles de luz.

-(Si me quedo a dormir solo perdería tiempo. Lo mejor será preparar lo que pueda y partir. Sé que le dije a Mamá que llamaría a Aurora, pero a esta hora debe estar dormida, más tarde será.

Con su Pokémon de regreso en su esfera, andaba solo por las calles hasta llegar a la morada de su actual compañera de viaje, y tras ver varios puntos de la gran reja solo se impulsó para dar un salto apoyándose de estas antes de cruzar.

-Deben mejorar su seguridad.

Y tras avanzar hasta la mansión solo se subió al techo para llegar a la recamara donde resguardo sus cosas para tomarlas nuevamente y así seguir hasta la habitación de su compañera.

-Me sorprende que sigua despierta. –Murmuro Allen para bajar del techo posándose en la ventana para tocar.

-Hmm?

La mujer se encontraba sentada frente a un escritorio revisando papeleo, pero al escuchar el golpeteo se giró hasta la ventana topándose con la sombra de cuclillas frente a ella.

-Qué diablos!

Asustada por la figura, tardo un poco en reconocer quien era para enseguida avanzar hacia la ventana.

-Qué rayos haces allí a estas horas, vamos entra.

-No tengo mucho tiempo, solo venía a decir que me voy.

-Qué!?

-No me puedo quedar esta noche, Ciudad Teja esta algo lejos, por lo que me voy ya.

-... Dame cinco minutos.

Y tras decir eso cerro la ventana y las cortinas para cambiarse, Allen por su lado solo se dejó caer al nivel el suelo para andar hacia el frente de la casa, donde luego de 5 minutos de espera, su compañera apareció.

-Señorita no puede salir así sin más, mire la hora que es, es muy tarde!

-No importa, debo salir a esta hora, es de gran urgencia.