UN GOLPE DE FELICIDAD

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Sonrío ante su actuación. -No exageres, no ha sido para tanto- Me defiendo mientras abro la última caja.

-¿Has terminado ya con tu cuarto?

-Si, está todo en su sitio.

-¿Porque tienes que tener un cuarto solo para ti? No es justo.-Dice con una mueca de indignación.

-Te recuerdo que fuiste tú la que se ofreció para compartir habitación con Octavia. -Respondo en defensa.

-Estaba borracha - interviene excusandose.

-Los borrachos nunca mienten - respondo guiñandole un ojo con la intención de finalizar esta pequeña discusión.

Al finalizar la cocina, Octavia y Ricky ya habían terminando el salón, por lo que decidimos ir a comer algo, ya que llevamos más de 4H arreglando todo y son las dos pasadas de la tarde. Salimos satisfechos del resultado de nuestro nuevo hogar, Raven da brincos de alegría por el hecho de que se va ha independizar, Octavia habla alegremente con Ricky, yo intento no hacer caso a mis pensamientos, no quiero pensar en ella, no quiero que invada esta vez mis pensamientos, pero eso es algo que no puedo conseguir, ella está en mi, está en todas partes. Antes de llegar al coche, algo me saca de mis pensamientos.

Una chica intenta coger dos cajas y una parece ser que está apunto de caerse. Me acerco a ella a paso ligero, y antes de que la caja caiga al suelo, logro llegar a cogerla.

-Oh vaya, muchísimas gracias - Agradece poniendo la otra caja que sostiene en el suelo.-Hola soy...

Silencio, se hace el silencio entre nosotras, ella mira a su alrededor, vuelve a mirarme, pero esta vez me inspecciona de arriba a bajo. Sonríe, aparta un mechón rebelde y lo pone tras su oreja. Está nerviosa, pero no hay duda de que yo lo estoy más, ya que no logro pronunciar ninguna palabra, solo la miro, mi mente está bloqueada. Sonríe tímidamente, y yo me enamoro de su sonrisa, quiero abrazarla, pero abrazarla y no soltarla, quiero besarla, pero con pasión, con amor, con todas las emociones, quiero tocarla, quiero...

-Clarke, te estamos...oh vaya- Raven corta el silencio entre nosotras.-Soy Raven- corta otra vez el silencio al ver que no logro pronunciar ninguna palabra extendiendo su mano.

-Alycia Debnam - Dice aceptando la mano de Raven con una sonrisa.

Su voz, su voz incluso es la misma.

-Un placer - Respondo Raven.

-Igualmente- Sonríe.

Me mantengo en silencio, solo la observo paralizada con su caja entre mis manos, escuchando cada sonido que emite.

-Clarke te esperaré allí con los demás - Raven logra sacarme de mis pensamientos haciendo que me gire a mirarla.- sin prisas rubia.- Me guiña el ojo con una sonrisa pícara. Yo hago un gesto de negación ante su intención.

Estamos a solas, ella sigue con su sonrisa, yo sigo paralizada.

-Gracias Clarke - Dice cogiendo la caja de mis manos.

Se acuerda de mi, sabe mi nombre. Suena hermoso mi nombre en su voz . Asiento sin decir nada, quiero hablarle, pero mi voz ahora no existe.

Será traidora.- Pienso.

-Gracias a ti- Logro decirle, me mira inspeccionando - Por salvarme la vida - Le aclaro las dudas.

Sonríe, me encanta su sonrisa, quiero que no pare de sonreír.

-No hay de qué - Responde- Gracias a ello obtuve el grado de socorrismo.

-Te salve la vida yo a ti entonces - Me atrevo a decirle con una tímida sonrisa.

-Eso es, fuiste una especie de ángel. -Sonríe.

Antes de poder decirle algo, alguien llama su atención.

-¡Muévete Caracol!- Ella se gira sonriendo a la vez que gira los ojos - Oh vaya, no pese que tuvieras compañía. -Dice al verme.

-Ella es Clarke. -Añade presentandome.

-Ah la del mar, la que te llamo de Le...

-Si, la que me salvó la vida - interrumpe nerviosa.

-Bueno, literalmente - Añado con una sonrisa.

-Soy Maia- Extiende su mano amablemente.

-Un placer- Respondo con una sonrisa.

-¿Estas en el campus?-Pregunta con interés.

-Si, estoy en la tercera planta, puerta 226.

-Nosotras estamos al lado - Dice con una sonrisa. -Puerta 230.

-Vecinas- Digo levantando las cejas con una sonrisa.

-Estas sola o...

-No, comparto piso con mis mejores amigas - Intervengo aclarando sus dudas.

Alycia sigue con la caja entre sus manos sin omitir una palabra, solo observa como yo y su amiga charlamos.

-¡Clarke!-Escucho mi nombre a unos metros de mi, esa voz la reconozco, me giro para aclarar mis dudas.

Genial Finn, tenias que parecer.

-Mi princesa - Me abraza, pero en apenas 4 segundos me deshago su agarre.

-No soy tu princesa y no me llames asi.-Mi tono es seco y frío a la vez.

-Clarke porfavor, dejame...

-No Finn, dejalo - Lo interrumpo alzando la mano.

-Clarke déjame que te explique.

-Finn no quiero escucharte y menos que me toques.-Añado con la intención de finalizar la conversación.

Antes de que pudiese girarme él me agarra del brazo con brusquedad, cosa que me recuerda a la primera vez que corté con él y Lexa apareció para liberarme de ese agarre, pero hoy Lexa no está, hoy está Alycia y sé que no será ella quien me libere esta vez.

-Sueltame Finn, ahora.-Ordeno enfrentándome a él.

-Ha dicho que la sueltes.

Su voz acelera mi corazón, sus palabras me envuelve. Estoy bloqueada, ella está ordenando, ella está actuando en mi defensa.

-¿Y tú quién diablos eres?

-Eso a ti no te importa, suéltala y largate.

-Pero que demonios te crees que...

-Finn suéltala y largate de una vez - Esta vez es Octavia quien actúa.

Él me suelta, su mirada es fría y sé que está enfadado, pero no me importa. Antes de que pueda responderle a Octavia, Raven lo interrumpe.

-Cansate ya pesado, no te das cuenta que eres agua pasada para ella, si no tienes algo mejor que el silencio, no te molestes en hablar.-Dice en un todo desafiante.

Finn sin decir nada se da la vuelta y se aleja, yo hago el mismo gesto, pero para mirarle a Alycia. Decir que el temblor que tiene mi cuerpo en este momento es quedarme corta. La satisfacción que siento al verle interponerse entre Finn y yo es tan grandiosa que estoy deseando tirarme a sus brazos, pero contengo este impulso al darme cuenta que ella no tiene los sentimientos de Lexa aunque sea ella.

-Gracias - Le agradezco tímidamente por intervención.

-Tranquila - Responde con amabilidad.

Dios Lexa, si supieras el sentimiento que creaste en mi...

-Bueno Clarke, seguiré con las cajas, supongo que nos veremos por aquí- Su voz hace que vuelva a la realidad.

-Ammm...si claro ya...-Comienzo a tartamudear en señal de los nervios que me causa estar cerca de ella y no poder tocarla - Ya nos veremos y gracias otra vez - Sonrío tímidamente.

Observo como se aleja con su amiga con cajas. Observo como la felicidad golpea mi realidad al estar cien por cien segura de que la veré todos los días, que la vida me da una oportunidad para estar con ella, para enamorarla, para hacerla mía otra vez. Quiero llorar, gritar, saltar de felicidad, quiero tenerla de una vez entre mis brazos y no soltarla jamás.

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