Una estudiante de la Academia de la Verdadera Cruz como cualquier otra. Hay algo oculto en ella, algo extraño que no tiene nada que ver con que sea una aprendiz de Exorcismo, ni con su estrafalario aspecto, ni con que uno de sus ojos no esté a la...
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Luego de debatirse mentalmente un buen rato en su habitación mirando al techo en lo que procesaba toda la información recibida, Kaede decidió finalmente abrir la caja metálica cuando acabara la misión en la sala de los portarretratos solo para poder tener tiempo de asimilar lo que fuera a encontrar pues no se sentía lista para más detalles y secretos de su vida que siquieran contradiciendo todo lo que habia conocido hasta hace poco.
—¡Kaede-chan, me preocupaba que no vinieras hoy! —saludó Shima un tanto eufórico provocando en Kaede una sensación desagradable en el estómago pero que se esforzó por disimular.
—Si, tampoco me sentía muy bien pero no puedo solo evadir mis responsabilidades ¿no?—respondió ella con una sonrisa que consiguió despistar su expresión sombría.
—¿Estas en condiciones para hoy? —quiso saber Bon no muy convencido—. Es decir, lo ideal es que podamos concentrarnos todos en la misión para que Okumura no vuelva a ser tan impulsivo.
—Descuida, me siento en condiciones y totalmente concentrada para esta misión —afirmó la albina no muy convencida pero tratando de mostrarse decidida.
—¿Estás realmente segura?
—Escucha, he estado sobrellevando de la mejor manera que pueda todo lo que ha pasado con lo de mi exorcista mentor y tambien he estado un poco mal de salud—explicó la muchacha tratando de mostrarse lo mas franca posible —. De momento solo debo seguir mi tratamiento pero no puedo estar convaleciente indefinidamente.
—Es cierto, además, Kaede-san es muy fuerte y hoy no nos va a decepcionar—aseguró Rin colocándole una mano por los hombros—. ¿Verdad, Kaede-chan?
—Si y tú procura pensar antes de sacar esa espada —le riñó la albina picándole una mejilla—. En fin ¿qué tenemos hoy como misterio? ¿alguno de estos retratos esta embrujado o algo asi?
—Bueno , los estudiantes dicen que puedes ver una cara muerta en uno de estos portarretratos —explicó Bon mirando hacia las decenas de portarretratos que habían.
—Dicen que hay un portarretratos que luce diferente dependiendo de quien lo mire—secundó Konemomaru antes de ver la hora en su teléfono —. A propósito, Okumura-sensei esta retrasado.
Como de costumbre, Izumo se esforzaba por mantenerse al margen del resto de los Exwire permaneciendo alejada pero no pudo evitar emocionarse en cuanto un bonito perro blanco con un moño violeta entró y trató de contener un gritito de alegría antes de acercarse a él con cautela para no llamar la atención del resto.
—Hey, perrito ¿estas perdido? —le dijo al pequeño perro acariciándole la cabeza.
No obstante, el perrito pronto desapareció con un pequeño estallido convirtiéndose en medio de una leve niebla color fantasía en Mephisto, quien le habló tomándola del mentón, claramente en tono burlón—. Yo siempre trato de ser ubicuo, ya sabes.
