La Menor

Capítulo 89 ✔️

POV KIARA WALTON

Regresé a Minnesota con Will, me quedaré en el departamento de Kate; estos dos últimos meses fueron un completo desastre, entre documento para firmar y la ansiedad de regresar me mantuvieron en un estado de agonía constante.

Erick aceptó la idea de votar por Bastián con una sola condición, que Will y él se reunieran personalmente, Erick quería hablar con Will, imaginaba que se trataba de Allison, al parecer Erick quería cerrar ese capítulo en su vida, ya que él tenía planes de abandonar Minnesota e irse a Oregón, y yo lo comprendía, era lo mismo que yo hice meses atrás, escapar.

El señor Harris fue más difícil de persuadir, era un gran amigo del padre de Erick, tenía intención de votar por Taylor o mi padre, Will tuvo que convencer a Bastián de ofrecerle al señor Harris un contrato totalmente exclusivo con la firma por año, ahora la firma Davis seria la representante legal de Harris & Associates, y lo peor de todo es que era un contrato exclusivo y gratis para el señor Harris, cosas que no le agrado a Bastián, pero necesitábamos ese voto, así que no le quedo de otra a Bastián más que aceptar.

Mi madre aceptó votar por Bastián rápidamente una vez que le comentamos nuestro plan, ella aún conservaba la esperanza de que él y yo regresáramos, sin embargo, Hilda no asistiría a la asamblea de socios, presentaría su voto por escrito, estaba ocupada con la organización de la cena benéfica que se celebraba todos los años en el Hotel Walton de Minnesota, es increíble que ya casi se cumple un año desde que vi a Bastián en esa cena, y pensar que todo lo que ocurrió en mi vida desde esa noche me ha marcado tanto, si alguien me lo hubiese contado, nunca lo hubiera creído.

—Dime qué debo hacer para que nos acompañes a Sarasota, mañana — suplicó Kate, entrando a la cocina. Yo estaba preparando nuestro desayuno.

Decidí no asistir a la asamblea, no tengo nada que hacer en ese lugar, prácticamente no era nadie, ya no poseía acciones en la cadena de hoteles, todas mis acciones ahora le pertenecían a Bastián y era algo tan irónico, al final de todo, mis acciones eran de él. No puedo entrar a la sala de juntas mientras se lleve a cabo la votación, no pertenecía a la mesa directiva de la cadena y tampoco poseía acciones, así que preferí quedarme con mi madre y ayudarla con la organización de la cena benéfica; tarde o temprano todos nos daríamos cuenta lo que acontecería dentro de esa sala.

—Prefiero estar aquí, Kate— afirmé, preparando un sándwich.
—¿Tienes miedo de encontrarte con él? — dijo mi hermana levantando sus cejas con picardía, haciéndome reír.
—¡No! — chillé nerviosa.
—Yo creo que sí— contrarrestó mi hermana.
—No me convencerás con tu psicología inversa, ya sé que esta conversación terminara en, "Si en verdad no tienes miedo a encontrarte con él, demuéstralo yendo a Sarasota".
—Sabes que algún día tendrán que verse, ¿cierto? — manifestó Kate.
—Lo sé..., pero mientras llega ese día, yo seguiré preparando sándwiches— expresé tomando mi sándwich para morderlo exageradamente delante de ella encaminándome a la habitación.

Dejé el plato con el sándwich sobre la cómoda, se me quitó el apetito, los nervios que estaba empezando a sentir provocaba que mi estómago se cerrara completamente, la ansiedad me consumía, no podía pensar en Bastián sin evitar que mi corazón colapsara.

POV BASTIAN DAVIS

Llegué a Sarasota en la noche, y me fui directo a la recepción, quería confirmar si Kiara Walton se encontraba hospedada en el hotel, pero para mi sorpresa no había nadie registrado con ese nombre.

Deseaba llamar a Will para preguntarle dónde diablos dejó a Kiara, pero se supone que no debo hacer eso, ella y yo no éramos nada. En el día de mañana me encontraría con Will y Kate antes de que iniciara la asamblea, así que quizás me encontraría con la mocosa.

Me dirigí a mi habitación a descansar, el día de mañana sería bastante estresante para mí, Nora se negó a acompañarme y yo no quise insistirle, ella quería mantenerse al margen de todo, y en parte la entendía.

***

Caminaba por el lobby del hotel, me conducía a encontrarme con los hermanos de Kiara, esperaba verla con ellos, me preparé mentalmente para el momento.

Vi a los lejos a Kate y a Will, ambos lucían bastante formal. Di grandes pasos acercándome a ellos sin ver rastro de la mocosa.

—Buen día— saludé.
—Señor Davis— saludó Will caballerosamente, Kate solo asintió con su maletín en manos.

Sentí algo de desilusión al no ver a Kiara con ellos.

Respiré profundo.

—Se quedó en Minnesota, es lo mejor para ella, no tiene nada que hacer aquí— explicó Will, como si me hubiera leído el pensamiento.

Kate me sonrió, tímida.

Pestañeé varias veces tratando de alejar el sentimiento que quería invadirme, no era momento para sentir lo que sea, que estaba sintiendo.

—¿Estamos preparados? — pregunté firme, la hora ha llegado.
—Yo estoy listo— canturreó Will.

Kate suspiró sonoramente, sé que esto debe ser difícil para ella, fue la que más obedeció a su padre por años, aceptando todas las decisiones de él. Kate fue la primera en empezar a caminar, pasó por el medio de nosotros dirigiéndose por el camino que conducía a la sala de juntas.

Este día se convertiría en una completa locura para la familia Walton, y yo totalmente estaba preparado para enfrentarlo, me preparé tanto para este día que ahora que llegó solo deseo disfrutarlo. No haré suplicar a Rob por su vida como lo hizo Martin, pero le arrebataría algo que desea y para mí era suficiente, su esposa y sus hijos se revelarían en contra de él, y Rob Walton se daría cuenta de que no es nada, tal y como yo lo había dicho.