Capítulo 13 ✔️

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POV BASTIAN DAVIS

Miré el traje sobre mi cama; solo faltaban días para casarme con Kiara, la boda quedó en el olvido luego de que ella me suplicara solo ir a la oficialía a firmar el acta de matrimonio; no comprendía a esta chica, iba a tener una boda por todo lo alto y ella solo pedía ir a la oficialía a firmar el papel.

Hilda y Charlotte no lo tomaron muy bien, sin embargo, no podía obligar a la chica a hacer más de lo que ya estaba haciendo por su familia. No tengo idea cómo van a hacer las cosas ahora que tendré a una mujer viviendo bajo mi techo, espero que no afecte mi vida personal. Estar casado con la mocosa solo es una fachada, ella podía hacer lo que le pareciera con su vida, en tanto no afecte a la mía, ya que yo seguiría siendo lo que soy. Este sacrificio pronto daría resultado y cuando lo hiciera le pediría el divorcio a Kiara de inmediato.

Tomaré los días que faltan para mi matricidio y saldré a relajarme un rato, necesitaba alcohol y acostarme con alguna puta.

Pensé en ordenar que le prepararan la habitación más alejada a la mía, no obstante, me resultaba más satisfactorio que durmiera en una habitación continua a la mía, ya que según lo que dicen, a los amigos hay que tenerlos cerca y a los enemigos aún más cerca.

Llevaba años viviendo solo, y tenía personal para todo, chófer y guardaespaldas, personal de limpieza, cocinera y hasta un chico que se encargaba de llevar mis trajes a la tintorería, aparte del mensajero del edificio. Vivo en uno de los edificios más llamativos y costoso de Minnesota, yo era un Davis, mi apartamento era un lujo que podía costear, y compartiría dicho lujo con una Walton, y resulta ser con uno de los Walton que al parecer más afecto sentía por mí, <<nótese el sarcasmo>>, creo que Kiara le llevaba la delantera a Taylor y por mucho en cuanto a su profundo odio hacia mí.

Le pedí a mi secretaria encargar las alianzas de matrimonio en unas de las joyerías más prestigiosa del país, y de paso aproveché para hacerle un detalle único en su clase a la mocosa, espero que Kiara entienda el chiste detrás del regalo.

Ya conocía la forma de vestir de la escuincla, la única vez que me pareció verla vestida a la altura de nuestros apellidos fue en la reunión que sostuvimos mis abogados y su familia en la firma Davis; no me importaba gastar unos cientos de miles de dólares encargando un guardarropa nuevo para la futura señora Davis, y más cuando sé que se enojara <<era una satisfacción>>.

Aunque no puedo negar que tendremos que asistir a muchísimas reuniones de negocios y eventos sociales juntos, y no voy a permitir que use el mismo tipo de vestido que llevaba puesto la noche del bar. Necesitaba que Kiara se comportara como lo que sería, mi esposa delante de la sociedad, aunque eso le costará; la señorita Walton poseía un cierto grado de inmadurez, ya que solo a una chiquilla se le ocurriría rayar el auto de un desconocido, era claro que la chica tenía instinto suicida.


POV KIARA WALTON

Solo faltaba que este día culminará para ponerme el maldito vestido que yacía sobre mi cama, no puedo creer que ya mañana el imbécil de Bastián colocará un anillo en mi dedo.

Agradecí que entendió mi posición al no querer celebrar una boda, era un gasto innecesario, tanto mi familia como la de él sabía que todo esto era una mentira. Lo he visto muy pocas veces, la última vez fue cuando cité a su abogado nuevamente para aclarar algunos puntos en nuestro contrato prenupcial, quería tener lo menos encuentros posibles con él.

Su guardaespaldas James, vino por mis cosas esta tarde, esperaba que mañana al llegar a su apartamento todo estuviera como lo ordené. Sé que la venganza de Bastián no terminaría con un simple matrimonio, esto solo es el principio de mi desgracia, al final de cuentas él solo necesitaba a una Walton como esposa, así que, o era mi hermana, o era yo.

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