96º CAPÍTULO: Recuerdos del pasado.

176 22 4
                                    

Llamé a mi chofer y me senté detrás con Huguito, mientras Hugo explicaba dónde queríamos que fuéramos.

-Solos dos días, eh.- dije mientras le miraba.

-Vamos viendo.- dijo Hugo mientras se reía.

¿Por qué no era rencorosa después de todo el daño que me había hecho? Porque en estos tres años cambie demasiado. 

Ansiedades se apoderaron de mi durante varios meses. Después llegó la hora de decir adiós a España y irme a Italia. Me hubiera gustado un montón decirle a Hugo que estaba cumpliendo uno de mis sueños, pero no podía. 

Cada día que pasaba sin Hugo me sentía sola, pero por el tiempo se fue, y me sentía liberada.

Durante el proceso de la recuperación de memoria de Hugo estuve ahí. Mis altibajos, pero estuve siempre. 

No me arrepiento para  nada, al revés, doy cada día las gracias por haber estado y haber conseguido. que pudiera. Lo amé demasiado.Ahora debía ser diferente el amor, ¿no?

-Bueno, empiezo a decir a dónde os llevo.- dijo Hugo mientras miraba al chiquitín. 

-A comer helado.- dijo Hugo ilusionado y dando pequeños brincos con el cinturón puesto. Se parecía tanto a su padre, pensé...

-No. Vamos a ir a un sitio mejor y más bonito.

-Que no esté tan lejos, tengo trabajo.- dije mientras miraba mi teléfono y revisaba unos tres gmails de unos documentos que había mandado a revisar a mis asistentes.- Venga di a donde vamos jo.- dije mientras miraba al pequeño como me observaba seriamente.- Dile a tú..- lo pensé- dile al señor Cobo que a donde vamos...

Exacto, por un milésimo momento miré por la ventana y vi en el momento que nos empezamos a decir señor Cobo, fue tan maravilloso y tan doloroso, que cuando me di cuenta ya había Hugo respondido.

-Iremos al lugar más bonito.- dijo Hugo mientras le miraba con una sonrisa y se giraba para mirarme.

Nos quedamos congelados, mirándonos, solo éramos dos, solo éramos nosotros dos. 

Sentí como al mirarle el pelo volvía al pasado. 

La imagen que veía era los dos tirados sobre el césped de nuestra antigua casa juntos. Estaba apoyada encima de él, tumbada mientras el jugueteaba con un mechón de mi pelo.

-Eres lo mejor que me ha pasado en la vida.- decía mientras me besaba en la frente.

-Eres lo magnífico de mi vida, lo que le haces sentido.- dije mientras me levantaba y le cogía de la mano y le tiraba a la piscina conmigo. Empezamos a besarnos cuando... Volví a donde estaba con una pequeña lágrima recorriendo el rostro. 

No, Eva, no.

Aquella Noche- Una vida contigo❤️‍🩹Where stories live. Discover now