80º CAPÍTULO: Entiéndeme joder.

173 23 12
                                    

Lo nuestro no acabaría bien. Cada minuto, cada segundo que pasaba me sonaba más y más esa frase.

Eva

-Hugo, mira te he hecho una sopa e las que te gustan.- le dije sonriéndole mientras se lo dejaba en la mesa.- Además tienes este pescado que también te gusta bastante.- lo dejé en la mesa del salón y me senté a su lado mientras veía que estaba viendo el partido de fútbol.

-Eva, cuantas veces te tengo que decir que no estoy enfermo. No me hables como un enfermo joder. - me dijo mientras me miraba.

-Venga Hugo, come un poco que hoy a sido un día duro.- le dije mientras comía una cucharada de sopa y se la acercaba a la boca.

-Eva déjame de una puta vez.- dijo mientras cogí el plato de sopa y lo estampaba contra el suelo haciendo que todo se manchara y se rompiera el plato en mil pedazos.- Estoy harto de ti. No te recuerdo que te quede claro, que te quede claro joder. Déjame en paz, vive pero déjame en paz.- dijo mientras cogía el otro plato de pescado y lo estampaba contra la otra esquina del salón.- Me voy, no quiero estar aquí. ¿Dónde está el dormitorio mío? No me lo digas, lo buscaré-

Me levanté como pude, destrozada, con miedo, con tristeza, pena, asco de la escena, pero muchas, muchas ganas de correr hacia algún lugar dónde nadie me viera. 

Cogí mi bolso, las llaves del coche y me fui. 

Mientras conducía, miles y miles de imágenes se me venían a la mente de aquella escena. Plato por aquí, plato por allá. Todo se me estaba acumulando y tan solo quería ser feliz.

Me fui a casa de Samantha dónde se había quedado mi niño. ¿Cómo le iba a Hugo que era padre si ni se acordaba de mí?

Toqué al timbre, y abrió la puerta Flavio con una sonrisa que se le cambio cuando me vio con una cara de pena. Todo el rímel corrido en pequeños ríos de lágrimas. 

-Necesito un abrazo.- dije mientras me acercaba a Flavio y se lo daba.- No puedo más joder, esto es superior.- le dije mientras seguía en el abrazo.

Mientras estaba abrazando a Flavio, Samantha apareció y cuando me vio con esas pintas, esa cara y todo, no tardó en abrazarme, en darme miles y miles de besos y en decirme que todo estaría bien.

-Cariño. No pasa nada, ven cuéntame.- me dijo Sam mientras me llevaba hacía el salón, dónde vi que Hugo estaba en la cuna.

-Me quiero ir de aquí.- dije mientas soltaba el bolso en el suelo y me tiraba al sofá.

Aquella Noche- Una vida contigo❤️‍🩹Where stories live. Discover now