Aquella Noche- Una vida contigo❤️‍🩹

43° CAPÍTULO: Vuelve Anaju

Como dije me quedé dormida en un santiamén. Me levanté antes que Hugo y me fui a abajo. Cojí el teléfono por si tenía algún mensaje y abrí WhatsApp y vi los mensajes del grupo de mis amigas de la universidad diciéndome que como estaba y todo eso. Abrí Instagram y con una sorpresa tenía una solicitud de una supuesta @anaju_. No podría ser verdad que era Anaju, la pesada, mentirosa y malcriada de ella. 

-Buenas Eva. -me llegó al teléfono por Instagram. La tenía bloqueada por WhatsApp por lo que sucedio. 

-¿Qué quieres? - le respondí. Estaba muy enfadada y ahora en estos momentos no necesitaba hablar con alguien como ella.

-Empezar de 0. No empezamos con buen pie. Las segundas oportunidades suelen venir bien.

-Depende de con quien persona. 

-Conmigo ya te digo.

-No hace falta empezar de 0. 

-Si lo hace.

-Anaju, dejame en paz dios mio.

-Eva tengo que tener una amistad contigo.

-Yo no la necesito.

-Eva, por favor quedemos. 

-Mira espero que no sea para nada malo.

-De verdad que no, bueno voy a tu casa en media hora.

-¿Perdón? Porque sabes donde vivo.

-Mis contactos. Nos vemos.

No podía ser verdad, la Anaju vuelve. Exacto la misma que casi hace que sufriera un aborto. No recordemos malos momentos a lo mejor es verdad que ha cambiado. Bueno, lo mejor era despertar a Hugo y poco a poco contarselo. Subí despacio hasta nuestro cuarto y vi como estaba dormido. Me tumbé al lado de él y me di cuenta que se estaba haciendo el dormido. 

-Hugo finjes fatal -le dije mientras me reia y le daba un beso en la mejilla. -Buenos dias.

-¿Dónde están las personas más importantes de mi vida? 

-No lo sé -dije sonriendo tumbada al lado de el y jugeteando con su pelo. 

-En frente mia. Mi amor y mi futuro niño.

-Hugo estás hecho un poeta.

-Normal, con un amor en mi vida siempre hay poesias.

-Me vas a sonrojar, levantate venga.

-Pero y el beso de buenos dias.

-Cuando desayunes. 

-Amor, eso no me gusta damelo ya hombre. O voy a pensar que hay otra persona.

-Si, otra.

-Pues damelo.

Hugo se acercó y me besó, con su sonrisa se levantó y empezó a ponerse los pantalones.

-Hugo, tenemos visita, en media hora.

-¿Quíen viene ahora? Mi madre seguro.

-Anaju.

Ví como la sonrisa de Hugo se fue de repente y me miró fijamente.

-Eva, porque viene esa.

-Hugo, me ha escritó y esta arrepentida.

-Te parece poco lo que ha hecho para que ahora vayas tu y la invites a casa.

-Vamos a ver Hugo, es solo una visita.

-Eva, no cuentes conmigo. Me largó.

-¿Perdón? A donde vas.

-No voy a estar aquí mientras ella este. Cuando se vaya me llamas. 

Hugo se pusó rapidamente los pantalones y cojió una camisa del armario.

-Pero Hugo, que es una visita.

-¿Una visita? Te perdoné que me culparas por su culpa y ahora la traes a casa. No piensas a vecea por lo que veo. 

-Hugo, puedes pensar un poco.

-Piensa tu, pero aquí conmigo no. 

-Esperate Hugo. -dije mientras iba detrás de el. Estaba bajando rapidamente las escaleras.

-Eva, te estás equivocando, conmigo no cuentes.