Capítulo 31: El rey de los cultivadores

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Xichen asintió. Quedó impresionado por la cantidad de sirvientes que destinaban a un solo grupo. No quería ni contar cuantos sirvientes tendría la secta Wen.

—También habrán asignados cincuenta discípulos para cuidar de su seguridad. El gran líder Wen solo quiere lo mejor para sus invitados.

Así que también tendrían personas vigilando sus pasos. Simplemente asintió y agradeció. Subieron al carruaje y continuaron. Sin Noche era un castillo que tenía en su interior numerosos palacios, el más grande y fastuoso pertenecía a Wen Ruohan y los que estaban detrás de este pertenecía a sus consortes principales y sus dos hijos. Así que habían separados un palacio para cada secta, el tamaño dependía de su relevancia en el mundo de cultivo. El camino fue largo, lo que indicaba la longitud del lugar, era como estar yendo de una ciudad a otra.

Al llegar, finalmente bajaron, alojándose. Todos quedaron sorprendidos de lo hermoso y pacífico que era el palacio. Les habían dado un palacio lleno hortensias azules y celestes que armonizaban con los tonos blancos del palacio, llenándolo de un misticismo especial. Había sido preparado especialmente para recibir a la secta Lan, en cada detalle encontraban referencias a esta secta. Lan Qiren observó las flores detenidamente y luego resopló, incómodo. Aquellas flores le traían malos recuerdos.

Ingresaron mientras los sirvientes se encargaron de llevar los equipajes que traían consigo, preparar los baños para cada uno. La habitación más grande fue para Xichen y Jiang Cheng, la siguiente para Qiren, la otra para Lan Zhan. Huaisang decidió compartirla con Meng Yao, mientras Wei Ying ocupó una al lado de la principal por ser la mano derecha de su hermano. Las demás habitaciones fueron repartidas entre los demás discípulos, solo diferenciando en compartir entre omegas o alfas o betas, nunca mezclados.

Así como la residencia más alejada y pacífica le fue dada a los Lan, la más grande y lujosa con cien sirvientes en total a su disposición fue dado a la secta Jin. Fueron, de hecho, los segundos en llegar. Como si obviara el riesgo, Jin Gungshang llevó a sus hijos principales y sobrinos. Así que a aquel lugar arribaron JinGuangShang, Madam Jin, Jin Zixuan, Jin Zixun, Jin Xu, Jin Xuanyu, seguido de veinte discípulos principales. Jin Zixuan no comprendía porqué traer a Jin Su o Jin Xuanyu. Era mejor para ellos estar seguros en Torre de Koi, pero su padre lo comandó. Además, que trajo a dos de sus concubinas, las madres de A-Su y A-Yu, como si fuera una fiesta y no una competencia riesgosa.

Los terceros en llegar casi al mismo tiempo que lo anteriores fueron la secta Jiang. Madam Yu y Jiang Yanli, seguidas de sus discípulos y sus asistentes principales. Ellos optaron porque Fengmian y otros discípulos principales se quedarán en Muelle de Loto para prevenir cualquier incursión. Les dieron un palacio agradable, cerca de un lago con cincuenta sirvientes a su disposición. Nadie podía negar que Wen Ruohan era un buen anfitrión.

De las grandes sectas, los últimos fueron la secta Nie. Solo llegaron el líder Nie, su hijo mayor y sus discípulos principales. Tuvieron el mismo presentimiento de que debían de de dejar a alguien protegiendo la secta mientras se daba la competencia, así que seleccionaron cuidadosamente discípulos fieles y dejaron otro grupo de discípulos talentosos bajo el mando de Madam Nie que también eran muy fuertes y talentosos. Les dieron un palacio bastante ordenado, pero a diferencia de los otros solo recibieron treinta sirvientes, y muchos más discípulos que los mantenían vigilados. Las tensiones entre ambas sectas eran palpables desde hace generaciones, pero se agudizaron con el ascenso de Wen Ruohan.

Las demás sectas medianas y pequeñas arribaron una a una con grupos reducidos, intentado mostrarse dignas, aunque realmente estaban temerosas pues no tenían la capacidad de dejar guarniciones de vigilancia en sus propios territorios. Les fueron entregados palacios y pequeños grupos de sirvientes, con los cuales muchos de ellos bajaron la guardia, pensando que se habían preocupado por nada y que Wen Ruohan esperaba obtener la paz con esa reunión.

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