... dandole tiempo

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Baekho no creía que Minhyun lo encontrara divertido, pero aquí estaba el otro, demostrando que estaba equivocado. Había tantas cosas que aún no sabía sobre Minhyun, pero estaba contento de que el otro pareciera más abierto a compartirlo ahora. Minhyun se inclinó hacia adelante nuevamente, besando su nariz.

"¿Nos damos una ducha y dormimos? Ya que aún no estás listo para hacerlo", sugirió Minhyun y Baekho asintió.

"Bueno." Retiró su mano de la piel de Minhyun, inmediatamente perdió la sensación. La piel de Minhyun se estremeció donde Baekho lo tocó por última vez y tarareó divertido porque su cuerpo estaba reaccionando de esa manera.

"¿Quieres ducharte juntos?" Minhyun preguntó y Baekho rápidamente sacudió la cabeza. "Aww ¿por qué no?"

"Porque entonces estarás completamente desnudo a mi lado", dijo Baekho mientras luchaba por levantarse. Minhyun se rió entre dientes y lo ayudó a levantarse de la cama.

"Eso me parece un buen momento", bromeó Minhyun y Baekho gimió, escapando rápidamente al baño antes de que Minhyun pudiera convencerlo más. Minhyun se sentó en la cama, recordando sus pensamientos. No creía que fuera a ser así al comienzo de esta relación y no tenía idea de cómo habían cambiado tanto en tan poco tiempo. Todo se sentía nuevo y fresco. Sus emociones, sentimientos y expresiones. Las cosas que nunca pensó que cambiarían sobre él cambiaron y todo fue por una persona. Tocó los lugares donde Baekho lo tocó antes, preguntándose cuánto tiempo tomaría hasta que el otro estuviera dispuesto a dar un paso más. Se detuvo cuando se dio cuenta de que probablemente haría algo de lo que podría arrepentirse más adelante.

A Baekho le resultaba difícil calmarse incluso con agua fría que le salpicaba la cara y el cuerpo. Su cuerpo ya ansiaba más toques de Minhyun y su corazón por su amor. Sus sonrisas, risas, ira, todo. Quería saber más y ver más, pero también tenía que contenerse. No mientras todavía no pudiera controlarse. Tal vez debería llamar a su padre y pedirle que le enseñe. Hizo una pausa cuando se dio cuenta de que no sabía exactamente si Minhyun incluso tenía hermanos. El otro nunca lo había mencionado antes. Terminó de bañarse y rápidamente se puso la ropa antes de salir mientras se secaba el cabello.

"¿Oye, Minhyun?" Baekho miró a su alrededor y vio a la persona que buscaba sentada en el borde de la cama, jugueteando con su nuevo teléfono. Minhyun se dio la vuelta y sonrió, disfrutando de la vista de un cabello humedecido de Baekho. "Uh... ¿Tienes hermanos?"

"Sí. Tengo una hermana", respondió Minhyun, preguntándose de dónde vino esa pregunta. Baekho se sentó en la cama.

"¿Cómo es que nunca me cuentas cosas sobre tu familia?"

"¿Qué hay para contar?"

"¿Todo?"

Minhyun miró a Baekho por un momento, tratando de entender lo que el otro quería que dijera. "Tal vez algún otro día. Se está haciendo tarde y los dos tenemos trabajo mañana". Minhyun se levantó para poder ir a la ducha. Baekho agarró su mano, haciéndolo detenerse en seco.  

"Minhyun, realmente me gustas, pero espero que puedas darme algo de tiempo para dejar que eso se asiente. Es la primera vez que me gusta alguien así después de todo y..."

"Y el hecho de que en realidad estés casado conmigo significa que tenemos todo el tiempo el uno para el otro", murmuró Minhyun y besó a Baekho suavemente. "No te preocupes. Tómate tu tiempo. Entiendo cómo te sientes completamente. Tú también eres la primera persona que me gusta de esta manera". Baekho sonrió, algo aliviado y contento de escuchar eso. Soltó a Minhyun y el omega se fue a duchar. Baekho suspiró y apoyó la cabeza sobre la almohada para gritar incoherentemente. Todavía no podía creer lo que pasó hoy. Fueron a una cita, se confesaron y las cosas progresaron. No creía que fuera posible tener esa relación con Minhyun. Al principio estaba listo para tener una relación puramente comercial, pero esto se sintió mucho más genuino para él y lo hizo feliz a pesar de todo lo que le había sucedido.

Esa noche se fueron a dormir fácilmente sin ningún sueño que perturbara su sueño y se mantuvieran seguros en sus brazos. Como de costumbre, Minhyun se fue, en el momento en que Baekho se levantó. Se acostumbró, pero a veces todavía deseaba que Minhyun lo despertara para que pudieran pasar un poco de tiempo juntos por la mañana, pero sabía que Minhyun sólo estaba siendo amable y lo dejaba dormir más. Se preparó y se dirigió al trabajo. Notó aún más miradas cuando entró a su oficina. Miró al personal que rápidamente apartó sus miradas de él. Entró en la sala de su oficina, sorprendido cuando vio a Minki allí. Le recordó cómo el otro había bailado con Minhyun de forma bastante provocativa, haciendo que su estómago volviera a estar celoso.

"¿Cómo puedo ayudarte, Minki?" Preguntó Baekho, dejando a un lado su bolso. Minki lo miró y sonrió.

"Tengo estos archivos que necesito que revises", respondió el hombre cuando Baekho se sentó. Miró a través de los archivos, notando que el otro lo estaba mirando, así que suspiró y levantó la vista.

"Si tienes algo que decir, sólo dilo", dijo Baekho, incómodo de ser visto.

"Vi lo celoso que te pusiste cuando bailé con tu esposo", dijo Minki. "También sé que aún no lo has marcado".

"¿Y?"

"Escuché rumores de que hay personas que planean atacarlo. Sabes que si alguien más lo marca antes que tú, no tendrá más remedio que dejarte, ¿verdad?" Baekho lo sabía, por supuesto, pero eso no significaba que sólo quería precipitarse en las cosas, especialmente en algo tan importante como eso.

"¿Cómo sabes eso? Es sólo un rumor sin fundamento, ¿verdad? Y definitivamente no es asunto tuyo", respondió Baekho, no queriendo enojarse por algo que podría ser falso. Además, sabía que Minhyun era más que capaz de cuidarse solo. Después de todo, podía controlar a las personas sólo con su voz. "Entonces, ¿por qué te importa?"

"Conozco a la persona en la que se basa el rumor".

Mi esposo es...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora