Se debe hacer frente a los problemas

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/Academia Konoha/Segundo "C"/Media mañana/Cuarto periodo/

Luego de una ducha rápida, regresó al salón. Cuando corrió la puerta, el único en percatarse del sonido fue Naruto; quien no apartó sus ojos de Hiro. Ese pensamiento seguía en su cabeza: "Es muy fino para ser un chico." Hiro lo ignoró y continuó su camino al pupitre. Cuando pasó junto él en la fila, pudo apreciar sus facciones suaves una vez más. Desde la silla, mirando hacia arriba, las pestañas de Hiro eran más risadas y sus labios eran más gruesos y definidos que los de él.

Un gordo nudo se creó en su garganta y una sensación de quemazón en sus mejillas lo obligaban a seguir viéndolo. "Es muy bajo para ser un chico." ¡BA-DUM! ¡Qué fue eso! ¡BA-DUM! ¡BA-DUM! Unos fuertes golpes en su pecho y el ardor en su rostro creció cuando Hiro tomó asiento y lo miró de manera displicente. Desvió la mirada de inmediato y se ocultó tras un libro. No se dio cuenta que lo sujetó al revés por el pasmo que le dio su corazón y esa quemazón en su cara que, por alguna razón, no quería que Hiro lo viera así.

— (Él es como yo, es como los demás, pero... ¡Todos somos chicos!) —Esos malditos pensamiento no se iban. ¡No se iban! Usó el grueso libro en su manos para golpear la frente, causando un sonido seco que atrajo la atención de un solo estudiante. — (¡Hiro es un chico! ¡Es un chico! ¡DE VERAS! ¡UN CHICO!) —se detuvo. Bajó la cubierta por un momento y giró lentamente hacia atrás, aún cubriendo su rostro, esperando apreciar su cara sin que lo notara esta vez.

— El libro está al revés, Naruto-kun.

Pero la persona a quien quería mirar fue atraída por el sonido de sus golpes. Hiro a penas estaba un asiento atrás, del lado izquierdo. La sorpresa de ser pescado en el acto provocó que su corazón explotara como una olla a presión. O... ¿era por escuchar ese tono de voz tan suave? Luego de acomodar el libro, de una forma rápida y torpe, volvió a fijar sus pupilas en ese perfil terso, esas largas pestañas, labios rosados al natural... Si tuviera el cabello largo entonces se vería...

— ¡NO!

Con esa idea, Naruto empezó a azotar la cabeza contra el pupitre; tan fuerte que más de uno volteó extrañado. Entre ellos, Hiro.

/Distrito Tamana/Cuidad/Hotel-casino/Mañana/

— ¿Es o no es? —bebía un poco de té negro mezclado con sake.

—Sin duda alguna, ese muchacho es sobrino de Iruka. Yo mismo estuve presente en la prueba de ADN. —el hombre de cabello largo y puntiagudo, negro como sus ojos, sonrió plácidamente al escucharlo— ¿Desea que me encargue de él ahora mismo, Madara-san?

— No, no. —depositó la taza con cuidado en la mesita de centro y cruzó la pierna para estar más cómodo. — Vigilancia por el momento, Sasori. —asintió levemente— Espera a que termine la preparatoria, luego lo reclutas a la Familia.

— Como ordene.

— Por cierto. —miró hacia la ventana cuando una paloma se posó en el bordillo— Sé que hay un miembro nuevo.

— Sí, tiene poco más de un mes.

— Preséntalo. —el avecilla elevó vuelo y regresó la mirada a Sasori. — Sabes que me gusta conocer a las personas que están bajo mi cargo.

— Por supuesto.

/Distrito Koshi/Construcciones abandonadas/Noche/

La reunión de la que Naruto le habló en los vestidores era real. Un encuentro para montar las motos y recorrer la zona para mantener a raya a las demás pandillas; además de disfrutar un poco la adrenalina. Hiro y Sakura estaban allí.

Dulce GuardaespaldasWhere stories live. Discover now