DuckTales One-Short

Ropa elegante

Petición de: @lucianami14

Es algo ramdom pero espero que les guste igual ^_^

P-D: Siento mucho haber desaparecido por unos días pero tengo una hermosa materia que me esta rompiendo el cerebro -_-U

-Agh...odio este traje- gruño Dewey, tironeando ligeramente del cuello de su camisa blanca y desarmando de paso el moño azul que ahí estaba. Huey rodó los ojo, vestido de igual manera pero con un moño rojo en el cuello. Se termino de arreglar el saco negro, empezando a acercarse a su hermano.

-Es molesto...- golpeo ligeramente la mano ajena, empezando a arreglar el cuello de su camisa y rearmando el moño azulado. -... pero el tío Scrooge dijo que debíamos usar el traje- frunció el ceño. -Deja de tocar esto, es como la décima vez que- sonrío al lograr su objetivo, dándose vuelta para buscar la chaqueta del traje ajeno.

-¡Pero no me gusta vestirme así!- gruño el de azul, poniéndose rapidamente el saco que su hermano le daba y prendiendo los botones mientras bufaba.

-Yo creo que esto no esta nada mal~- Louie salio del baño con una gran sonrisa y arreglándose una de las mangas de su traje.

-¿Como es que a ti no te molesta ese tonto moño?- gruño el pato del medio, frunciendo el ceño al ver el moño verde perfectamente atado en el cuello de la camisa ajena.

-Ho mi querido e ingenuo hermano~- rió el menor, agarrando el moño y tirándolo ligeramente, mostrando lo que parecía ser un elástico que rodeaba su cuello.

-¡¿Moño de prendedor?!- frunció el ceño, cruzándose de brazos. -Eso no es justo- el de verde rió, volviendo a acomodar el moño.

-Tu fuiste el tonto que pidió el moño para atar- sonrío el de rojo, mostrando que el también tenia el mismo estilo de moño con elástico rodeando su cuello pero en rojo.

-Los odio...- gruño, empezando a caminar hacia la puerta de la habitación y yendo por el pasillo mientras murmuraba. Gruño, estirando ligeramente el cuello de la camisa y escuchando las risas de sus hermanos tras él. Caminaron por la sala hasta la gran puerta principal, donde podían ver a dos patos mayores esperando ahí.

-Ya estamos aquí tío Scrooge- hablo el mayor, mientras que el del medio bufaba y el menor sacaba su teléfono de manera distraída.

-Bien- gruño McDuck, mientras que el pato a su lado simplemente rodaba los ojos ante el mal humor ajeno.

-Se ven bien niños- sonrío Donald, acariciando ligeramente las cabeza de los menores y recibiendo unas sonrisas como respuesta.

-¡Webbigail, apúrate!- grito Scrooge, golpeando ligeramente su bastón contra el suelo.

-¡Ya voy, ya voy!- se escucho la voz de la pata acercarse. -¡Ta-Da~!- los menores alzaron la vista y quedaron tiesos, dejando escapar un ligero jadeo de sorpresa: Webby estaba parada ahí frente a ellos, con un vestido de color violeta claro, con un violeta más oscuro en los bordes y una cinta rodeando su cintura que terminaba con un moño en en su espalda. Su peinado estaba como siempre pero con su moño de un color violeta claro y y los bordes de violeta más oscuro. El vestido era simple pero acompañado con aquella gran sonrisa de Webby y con ese brillo de alegría total de sus ojos, era perfecto. -¿Qué les parece?-

-Wow Webby...- Dewey fue el primero el abrir el pico, sin poder apartar la vista.

-...te vez...- Huey se rasco ligeramente la nuca, nervioso.

-...realmente...- Louie sonrío ligeramente.

-...preciosa~- los trillizos se miraron entre ellos, no les sorprendía el hablar al mismo tiempo pero si les sorprendía que hayan pensado en la misma palabra. Estaban nerviosos, agradeciendo al cielo por las plumas que cubrían sus mejillas que en esos momentos les ardían de la vergüenza.

-¡¿En serio lo creen?!- el brillo en los ojos de la pata solo aumento, su sonrisa agrandándose al mismo tiempo que caminaba hacia ello. -¡Gracias~!- extendió los brazos y los abrazo de alguna manera a los tres, sin darse cuenta como ellos estaban tiesos y algo nerviosos. -¡Ustedes se ven increíbles!- hablo después de soltarlos.

-Debemos irnos, no se nos hace tarde- hablo Scrooge, llamando la atención. Abrió la puerta, empezando a caminar hacia la limusina con su sobrino siguiéndolo de cerca.

-Vamos chicos...- Webby empezó a caminar de reverse, dándoles una gran sonrisa a los hermanos. -...esto podría ser muy divertido~- soltó una ligera risa. Los patos tragaron, ese gesto solo hacia que ella se viera mucho más tierna. La pata se dio media vuelta, caminando con energía hacia la limusina que los esperaba con la puerta abierta.

-Tan linda~- pensaron los trillizos con un suspiro, apurándose para seguirla.