Afortunado Desastre (LR #2)

Cap 57

57. AMSTERDAM

Las pinturas que adornaban las paredes eran bastante bonitas, todas estaban perfectamente elaboradas. Yo difícilmente podía pintar sin salirme de la linea, así que sí, era un trabajo perfectamente admirable frente a mis ojos.

El guía nos permitió la entrada a una enorme habitación perfectamente climatizada, en donde podíamos apreciar varias pinturas, entre ellas "La Ronda de Noche", misma que pude identificar únicamente cuando Liam comenzó a traducir en un susurro todo lo que la guía mencionaba vagamente, porque aunque había un montón de guías en español, Liam siempre tenia detalles que agregar... y con detalles me refiero a todo el marco histórico con puntos, comas y pies de pagina con citas.

No estoy de broma.

—Esta pintura al óleo ha sufrido innumerables actos de vandalismo —explicó una vez que la guía se marchó, dejando que los turistas tomaran las fotografías de la pintura—, desde cortes, intentos de robo, aplicación de ácido... Si me lo preguntas, su trabajo es mucho mejor que el de Van Gogh.

Eso si que no. Van Gogh era uno de mis favoritos y, quiera o no, se había vuelto mi amigo en ese hotel.

—Por supuesto que no —dije soltando un resoplido.

—Van Gogh no traza tantos detalles —dijo mirándome de frente, con toda la confianza que destilaba siempre que creía tener la razón, como cuando... bueno, siempre.

—Van Gogh ilustra lo que le inspira y lo que es común para el resto, usa imágenes que cualquiera puede asociar. Es un talento digno de reconocer, honestamente no todo el mundo puede llegar a expresarse de esa manera.

—Rembrandt Puede hacer lo mismo y con mayor precisión.

—¡Por supuesto que no! Vamos, dime que quiere decir ese cuadro, porque yo solo veo un club de panzones con espadas de dudosa procedencia, haciendo llorar a una niñita iluminada bajo un cielo nocturno.

—Es porque no tienes visión sobre el arte —recriminó.

De acuerdo eso era cierto, era demasiado mediocre en cuanto a arte pero podía defenderme en el área aunque fuera sólo un poco.

—¡Tú no tienes visión sobre el arte! No sólo es trazar sobre lienzo al óleo, cuenta más lo que eres capaz de transmitir.

—No digo que Van Gogh no sea bueno, sólo digo que sus garabatos no pueden compararse con el trabajo de Rembrandt —aseguró.

¿Garabatos?

Aspiré aire ofendida antes de tocarle el pecho con el índice amenazadoramente. —Retractate.

—No veo mucha precisión cuando veo sus pinturas. En mi opinión, no es tan excelso —dijo como de pasada.

—¡Es por que no tienes imaginación! Son obras exigentes y no puedes apreciarlas tal como están. Debes formar tu propia idea, de asociarla a tu entorno.

—¡Por favor! ¿Qué puede transmite Van Gogh con un tarro de girasoles? ¿o con un lago y estrellas? ¿O con una habitación vacía? ¿O con un...?

—¡Van Gogh es uno de mis favoritos!

—¡Que inesperado! Déjame adivinar cuál es tu obra favorita. Quizás será ¿"Los comedores de patatas"? —preguntó con sarcasmo, igual de molesto que yo, aunque paradójicamente, también parecía divertirse con mi enojo y la situación.

—¡Pues sí! ¡Es mi favorita!

—Por favor ¿Qué puedes sacarle a una pintura con un grupo de gente comiendo patatas?