Afortunado Desastre (LR #2)

Cap. 12

12. FLAN DE MASCARPONE PARA LAS PENAS DEL CORAZÓN.

Caminé fuera del elevador con Axel pisándome los talones hasta que me detuvo por el hombro haciéndome girar hacia él.

—Creí que aceptarías mi invitación a comer.

—Acepté —respondí mirándolo confundida.

—¿Entonces a donde vas? La cafetería está hacia la derecha.

—Ah... Es que... Yo no voy a esa cafetería... Yo uso la de los empleados.

—¿No eres subdirectora del área de reseñas?

—Si pero ahí solo entran gerentes y directores... Y los Woodgeth.

Sonrió. —Suerte que vienes conmigo.

—Oh, no yo no creo que sea una buena idea...

Pero me tomó del brazo y comenzó a caminar a paso fuerte y decidido hacia la derecha, donde mostró su identificación y ningún guardia reparó mas en mi presencia.

Podía comprender la actitud enérgica de Axel Woodgeth, quería hablar con alguien y obviamente no me conocía... Ni reparaba en mis ataques repentinos de mala suerte, en su cabeza virgen de mi presencia no se imaginaba la sarta de cosas que podía ocasionar mi simple presencia en ese lugar fino.

Novato.

—¿Qué te apetece? —preguntó retirando la silla para que pudiera sentarme.

Resistí el predominante impulso de rodar los ojos ante la palabra "apetece" como lo hacía con Liam acusándolo de emplear el vocablo de una anciana.

Sonreí y me obligue a dejar de hacerlo frente al menor de los Woodgeth, ya tenia suficiente con el odio patentado de Sarah Woodgeth, no necesitaba que Axel también pensara que era una loca.

—Am... Yo solo venía por una dona glaseada y un café.

Axel rió como si le hubiese contado el chiste de su vida y llamando al camarero ordenó:

—Un Flan de Mascarpone para la señorita por favor.

—Enseguida.

—¿Mascar-qué? —pregunté inclinándose hacia adelante cuando el camarero elegante de alejó.

Axel rió mostrando los mismos hoyuelos que se le formaban a Liam cuando evitaba reír y parecer profesional. —Mascarpone. En mi familia tenemos una tradición, es una extraña creencia de la abuela.

—Escucho —respondí interesada ignorado por completo las miradas furtivas de los altos rangos de la empresa en nuestra dirección. Sin duda íbamos a dar de que hablar en la editorial.

—El Flan de Mascarpone que sirven en esta cafetería es... Diferente.

—De todas formas nunca he probado el Flan de Mascabrone.

Me mordí la lengua internamente. Acababa de decirle a Axel que de todas formas su flan de Mascarpone no me sabría especial.

Axel rió con fuerza. —Mascarpone —corrigió con simpatía.

—¿Verdad que se siente feo cambiarle el nombre a algo o alguien?

A ver si así dejaba de llamarme Susy.

Rió con ganas atrayendo mas miradas de las que deseaba en ese lugar.

—Mi abuela usaba en el flan una especie de ingrediente secreto. Tuvimos que acorralarla y suplicarle durante 24hrs que nos diera la receta para hacerla pública, Liam, Harry, Lía y yo eramos menores así que aún teníamos cierto encanto sobre ella. Al final accedió a regañadientes y juró que volvería de la muerte cada cinco años a patearnos el trasero por obligarla a romper una tradición familiar secreta.