Cap. 8

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8. NI PÉTALOS NI ARROZ.

En cuanto Liam cerró la puerta estalló en una sonora carcajada y no pude evitarlo: le pegué en el hombro con el puño.

—¡Auh!

—Espero que te duela.

—¿A caso esto es culpa mía?—preguntó más bien divertido.

Abrí los brazos como si fuera la pregunta más obvia. —¡Si!

— ¿Y por qué? —preguntó cruzándose de brazos y recargándose en la puerta con la misma expresión divertida.

Quería golpearlo... Duro.

— ¿Por qué no cierras la puerta con seguro para empezar? ¿Por que no me corriste antes? ¿Por que me dejaste hablar? ¿Y por qué tengo que ser la maldita dama de honor de tu novia?

Noté como Liam luchaba por parecer serio y profesional pero fallaba estrepitosamente cuando su mentón temblaba y las esquinas de sus labios se elevaban contra su voluntad.

— ¡¿Te parece gracioso?!

Y así sin más, Liam estalló en otra carcajada sorprendentemente alegre. De no haber sido yo la causa de su burla hasta me habría reído con él.

—Lo siento Luce pero ¿que demonios tienes en la cara?

— ¿De que estás...? —pero me percaté de mi reflejo en el pequeño espejo que Liam tenía en la mesita junto a la puerta. La parte izquierda de mi cara estaba cubierta del rimel que se había esparcido a causa del lagrimeo que ocasionó el golpe en mi ojo por la carpeta roja que voló del cajón cuando lo pateé.

No pude evitar reír con él.

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— Entonces estás diciendo que quieres que camine con tu novia al altar y lance pétalos y arroz por todo el pasillo mientras el público te ovaciona ¿cierto? —le pregunté para confirmar meciendo los pies en la silla frente a la de Liam.

Liam entrecerró los ojos. —Tienes una increíble habilidad para convertir todo en una catástrofe.

Hice una mueca. —Me sorprende que hasta hoy te hayas dado cuenta.

Suspiró. —Luce, mira... Solo será una noche ¿de acuerdo? Solo una... Y luego me iré un mes con ella y tu podrás tomar tus vacaciones. Terminará rápido.

Luché por ocultar el nudo que se me había formado en la boca del estómago.

"Luego me iré un mes con ella y tú podrás tomar tus vacaciones"

Asentí y desvié la mirada hacia la ventana. —¿Cuando será la boda?

—En ocho meses.

Volví la mirada a él de golpe. —¡¿Ocho meses?!

Liam frunció el ceño.

—¿No te parece un poco rápido?

—Conozco a América desde hace un año.

—Oh, bueno vaya un año ¡¿Por que no buscan un asilo, un jardín y bastones del mismo color mientras piensan el nombre de sus nietos al lado de una bonita fogata en Chile?!

Liam frunció el ceño aún más. Si eso es posible. —¿Qué está pasando Luce?

—Nada... Es solo que —suspiré. Estaba actuando como una loca sin razón—... yo... Yo quisiera que lo pensaras bien ¡es una boda Liam! No es como compartir crayolas, baba o el suéter. Pasarás toda tu vida con ella —concluí en un susurro.

Liam parpadeó con un ápice de sorpresa en la mirada. —Lo sé.

Suspiré. Estaba comportándome como su madre.

—Bien. Solo quería saber que estabas seguro.

—Gracias.

(...)

Silencio brutalmente incómodo.

—Y respecto a lo de la dama de honor...

—NO.

Liam sonrió repentinamente interesado apoyando su cuerpo hacia el frente sobre el escritorio. —¿A qué le tienes miedo Luce?

— ¿Por donde empiezo? 1) A caerme 2) A las cámaras 3) A caerme frente a las cámaras 4) A la mirada de tu vegetariana madre 5) A comer carne por accidente y ser linchada por la sociedad protectora de animales 6) A vomitar sobre alguien importante 7) A abrir la boca en publico 8) A caerme.

Liam resopló. —Eso es absurdo.

—¿Te parece?

—Si, no vamos a servir carne.

Lo miré mal. —Oh, bueno eso si que me anestesia los nervios.

Liam negó con la cabeza. —Luce, América te eligió...

—Me eligió porque cree que soy importante para ti.

—Lo eres.

Silencio.

Lo miré.

—No estoy para bromas, un Japonés me acaba de tratar como a una Geisha —me puse de pie— y me di en el ojo con papel, tengo suerte de tener retina aún.

Liam rió leve y con simpatía. —Hablo en serio.

Lo miré de frente y a los ojos. Sus enormes ojos grizulados.

—Luce eres importe para mi. Mira, sé que no lo parece. Tienes una lengua tan larga que podríamos usarla para hacer un puente de Veracruz a Londres, no eres para nada coordinada y tienes una suerte que supera mínimamente a la de una rata hambrienta en una casa llena de ratoneras, pero... —se encogió de hombros— de alguna manera te has ganado tanto mi confianza como la de mi familia. Quisiera que estuvieras presente en mi boda, es algo importante para mi.

Silencio.

—Y te necesito conmigo.

Y ahí se esfumaron los dos meses después del accidente de la pierna en los que comencé la actividad que Katy y yo nombramos "Olvídate del idiota que está más bueno que comer pollo con los dedos" o por sus siglas O.D.I.Q.E.M.B.Q.C.P.C.L.D. Lo sé... Nunca dije que fuésemos buenas con eso de los nombres.

Después de esas palabras tendría que volver a terapia en el sofá de Katy.. iba a obligarme a hablar con marionetas otra vez, de eso estaba segura.

—Si es un truco...

—Estoy diciendo la verdad.

Gruñí y me senté. —Está bien —Liam sonrió—. Pero no voy a lanzar pétalos ni arroz.

—Hecho.

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N/A: Ya se que es demasiado corto pero hay que tomar en cuenta que hoy publiqué antes del sábado y el sábado van a tener su capitulo también así que...

Este capítulo no fue muy reelevante, ultimamente siento que no puedo escribir nada bueno (T.T) No se que me pasa, pero no siento nada... ni felicidad, ni tristeza, estoy neutral... NECESITO AYUDA! Recomiendenme películas (PELICULAS) que me hagan reír, llorar... lo que sea! necesito salir de esto... voy a tratar de comenzar a leer mas para volver a escribir normal...

En fin, de nuevo las invito a darle like a la página en Facebook "RollitodeSushii" y no se olviden de votar este capítulo... :) muchas gracias por leer esto...

:) Alex.

Afortunado Desastre (LR #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora