V. NOCHE DE CHICAS

166 7 3
                                    

Ce estaba sentada en la cama, mirando las revistas que Max había llevado. Ella estaba bailando y cantando, y yo estaba sentada en el suelo, apoyada en la cama, justo a los pies de donde estaba Ce. Max pasaba por delante de mí dando saltitos alegres, y yo reía y cantaba con ella.

-Ah, has encontrado a Ralph Macchio - dijo Max, fijándose en lo que Ce miraba.

Paró de bailar y se agachó a mi lado. Yo me di la vuelta y vi el póster que Ce tenía entre las manos.

-¿Macchio? - repitió.

-Sí, el de Karate Kid - señaló Max. Fingió hacer un gesto de karate, y las tres reímos -. Está muy bueno, ¿no? Y seguro que besa superbien.

Ce la miró extrañada, como "lo que acaba de decir esta". Max se sentó en la cama, y yo pude ponerme más al centro para mirarlas a las dos.

-¿Mike besa bien? - preguntó Max.

-No lo sé. Es mi primer novio - respondió Ce.

-Exnovio - la corrigió Max.

Ce asintió y desvió la mirada.

-Eh, peque, no pasa nada - dije -. Seguro que volverá arrastrándose y pidiendo perdón, porque sabe que ha perdido a tremendo bombón, y no podrá dejar de darle vueltas. Verdad, ¿Max?

-Joder, os garantizo que Lucas y él están nadando en la autocompasión y la miseria, en plan: "Oh, espero que nos perdonen".

Las tres nos reímos de su interpretación de lo que los chicos estarían haciendo.

-Caray, Max - reí -. Después de esto, no sabéis lo que daría por ver a esos dos.

-¡Ojalá! - exclamó Max.

-Puedo hacerlo - dijo Ce -. Con mis poderes.

-¿En serio? - preguntó Max.

-¿Como lo que hiciste en la piscina aquella vez?

Ce asintió.

-Más o menos. Pero no necesito la piscina.

-¿Qué necesitas?

-La radio. Y taparme los ojos.

Busqué algo para que se tapara los ojos, mientras ella puso sonido de estática, o ruido blanco, en la radio que hasta hace un momento reproducía la canción que Max bailaba.

Le até la venda y se sentó en el suelo, delante de la radio. Max y yo tomamos asiento en la cama, mirándola.

-¿Crees que funcionará? - le preguntó Max. Ella asintió -. ¡Qué fuerte, es un alucine!

-Max - dijo Ce a la vez que yo le daba un pequeño codazo.

-Perdón, me callo.

Todo se quedó en silencio, a excepción de la radio. Max y yo mirábamos a Ce, expectantes, esperando a que ocurriera algo.

-Ya los veo - avisó Ce.

Max y yo nos miramos medio segundo, sonriendo, y nos acercamos a Ce. Nos agachamos a su lado.

-¿Y qué hacen? - pregunté.

-Comer.

-¿Comer? - repitió Max.

Me encogí de hombros.

-Dicen que somos una "especie" - siguió Ce.

-¿Qué? - soltamos nosotras dos, al unísono.

-"Emociones, no lógica".

-¿Qué? - repitió Max.

-Nos están llamando idiotas - aclaré.

Stranger Things // La Tercera de los Hermanos ByersWhere stories live. Discover now