Capítulo 54: Venganza

Start from the beginning
                                    

—¡Eso no es cierto! —Gritó Yanli. Su voz usualmente era suave, pero no pudo soportar más todos aquellos insultos. Aunque las feromonas de esos alfas eran irrespirables, ella logró levantar la voz. —Ustedes no saben por todo lo que mi hermano tuvo que pasar para dar a luz a este niño. —Con decisión observó a Xichen. —Líder Lan ¿usted realmente lo va a desconocer?

Xichen estaba perplejo, no sabiendo que decir. Jingyi se removió, una de sus manitos fue hacia Xichen. El alfa dio un paso hacia atrás como si aquel pequeño gesto le repeliera. El aroma de Wen Zhulioa lo tenía presente. Recordaba cómo se llevó a su omega el día que Jiang Cheng lo traicionó. ¿Acaso era posible que Jiang Cheng hubiera caído tan bajo para salvar a su familia? Dio otro paso hacia atrás sin tomar esa pequeña mano. El bebé comenzó a llorar nuevamente al sentir que esa energía parecida a la suya se alejaba.

Los demás líderes celebraron que Xichen no lo reconociera como suyo. Le animaron a no dejarse engañar por aquel omega. Insultaron a Yanli como otra manipuladora. Las espadas estaban apuntando a Yanli y Xichen no lograba hacer nada para protegerlos. En su mente se repetía constantemente el día que Jiang Cheng lo traicionó y los rostros de todos sus familiares muertos.

Aquello colmó la paciencia de otro alfa: Jin Zixuan desenfundó su espada y apuntó a los viejos líderes.

—Cállense. ¡¿Cómo pueden ser tan cobardes de meterse con un recién nacido y una dama?!

Las feromonas de Jin Zixuan se explayaron, golpeando a los otros, logrando hacerlos titubear.

—Lider Jin, no nos olvidamos que usted estuvo comprometido con esta ...—Miro de arriba abajo a Yanli, menospreciándola. —...señorita... ¿no estará olvidándose de nuestros objetivos?

Respondió con un gruñido. Al instante, ordenó a sus discípulos rodearlos. Era un alfa de palabra más allá de sus sentimientos por Yanli. Tenía una deuda e iba a cumplirla.

—Si el líder Lan no lo reconoce como suyo, no puedo hacer nada, pero di mi palabra de proteger a la doncella Jiang y al niño, así que nadie va a tocarlos. —Exclamó con un tono grave de amenaza.

El aroma agreste de los alfas logró llegar a Jingyi que empezó a llorar sin control. Yanli también estaba asustada, por lo que sus feromonas no calmaban al niño.

—¿Le dio su palabra a un traidor? Explíquenos...—Exigió el líder Yao. — Quizás es aún muy joven para ser líder de secta, está dejándose manipular por el rostro lloroso de esta omega. —Se atrevió a decir. Pronto un coro de un grupo de líderes estuvo de acuerdo.

—Debería liberar a su padre. —Acotó otro.

Los discípulos leales a Zixuan se mantuvieron a su lado, firmes. Por supuesto, aun existían facciones de la secta Jin que exigían el regreso de Jin Guangshang como líder y esos viejos ancianos lo sabían.

Yanli apretó a Jingyi contra su pecho. Los temores de su hermano se hicieron realidad: Xichen no reconocía a Jingyi. Y ahora parecía que estaban a punto de desencadenar una crisis para Zixuan y la alianza. Y es que, a pesar del buen desempeño de Zixuan dirigiéndolos, había varios líderes que no aceptaban que alguien tan joven los dirigiera.

En medio de aquella crisis por explotar, un Xichen cada vez alejándose del cachorro como si fuera el origen de una peste, Lan Wanji se adelantó. Llegó hasta el bebé, junto entre sus dedos un poco de energía.

Yanli pensó que lo atacaría y dio un paso hacia atrás. Su hermano la envió ahí para proteger a Jingyi, pero aparte del joven Zixuan no parecía que alguien más les ayudara.

—No se preocupe, señorita Jiang, solo voy a comprobar su base de energía. Si es parte de la línea Lan debo poder sentirla. —Susurró respetuoso y sereno el joven alfa.

Betrayal LoveWhere stories live. Discover now