"¡Ahhh!" Jian Yumin gritó conmocionado.
Al oír el ruido, la cabeza que estaba a su lado se movió un poco.
Luo Xiuen aún no había abierto los ojos, sin embargo, su ira se disparó: "¿Quién es? ¿Quién está perturbando mi sueño? Me pelearé contigo si no te callas".
Después de murmurar algunas palabras más, Luo Xiuen abrió lentamente sus ojos adormecidos.
Sus ojos se encontraron con los de Jian Yumin.
"¿Xie Minyu? ¿Eh? ¿Aún no estoy despierta? ¿He vuelto a soñar con mi ídolo? Vaya, es un sueño bastante bonito entonces. Supongo que puedo dormir un poco más".
Luo Xiuen pensó que todavía estaba soñando.
Entonces empezó a mirar fijamente a Jian Yumin con descaro.
Jian Yumin estaba a punto de enloquecer. Su primera reacción fue abandonar el lugar inmediatamente.
Jian Yumin estaba a punto de levantarse de la cama cuando de repente se dio cuenta de que no llevaba ropa.
La manta se deslizó hacia abajo y reveló sus abdominales. Había desarrollado abdominales por los años de baile.
"Wow~" Comentó Luo Xiuen. Se quedó mirando los abdominales de Jian Yumin antes de exclamar presuntuosamente: "Mi ídolo es realmente digno de ser mi ídolo. Incluso sus abdominales son tan buenos como los míos. Pero esto es mi sueño, así que probablemente esté basado en mi propia imaginación. Me pregunto si tiene abdominales en la vida real".
"¡Oye, despierta! ¡Levántate! ¡Esto no es un sueño!" Jian Yumin le gritó a Luo Xiuen mientras buscaba frenéticamente ropa para ponerse.
Luo Xiuen se congeló por un momento antes de estirar la mano y darse una bofetada en la cara.
"¡Mierda!"
¡¿Esto no es un sueño?!
¡¿Esto es la realidad?!
¡No puede ser! Si esto no era un sueño... ¿Entonces por qué estaba en la misma habitación que Xie Minyu? Y también era...
¡Mierda! ¡Mierda! ¡Mierda!
¿Qué había pasado anoche?
Luo Xiuen trató desesperadamente de recordar lo que pasó ayer. Sin embargo, sólo consiguió recordar que estuvo bebiendo con otras personas. No podía recordar cómo llegó a la habitación o cómo se metió en la cama.
¿Estaba tan borracha? ¿Le obligó a hacer algo mientras estaba borracha?
Oh, Dios mío, ¿actuó en cosas que había imaginado en su tiempo libre?
¡Luo Xiuen, Luo Xiuen, has ido demasiado lejos! ¡No puedes usar la violencia y la fuerza contra tu ídolo! pensó Luo Xiuen para sí misma.
Luo Xiuen miró a Jian Yumin. Su corazón estaba lleno de remordimientos y arrepentimiento.
¡Realmente no debería haber hecho eso!
Jian Yumin no sabía lo que Luo Xiuen estaba imaginando. En cambio, intentaba buscar sus ropas. Sin embargo, no pudo encontrarlas en ninguna parte.
"¡¿Dónde has puesto mi ropa?!" Jian Yumin gritó con exasperación.
"Espera... no las he roto, ¿verdad?". Dijo Luo Xiuen en voz baja. No lo dijo con mucha confianza.
No sabía lo que había hecho anoche. Aparte de la bebida, no podía recordar nada más.
"Tú..." Jian Yumin comenzó. Se quedó sin palabras.
¿Qué demonios era esto?
¿Había alguien que pudiera contarle lo que había pasado anoche?
Mientras los dos se miraban fijamente, llamaron a la puerta de la habitación del hotel.
"Iré a abrir la puerta. Puedes esconderte bajo las sábanas".
Cuando Luo Xiuen descubrió que aún llevaba la ropa puesta, se levantó de la cama y corrió a abrir la puerta.
En cambio, Jian Yumin tuvo que quedarse bajo las sábanas.
Cuando la puerta se abrió, Luo Xiuen vio a Cheng Yi.
"Vengo a traerle a tu ídolo una muda de ropa", dijo Cheng Yi. Le entregó a Luo Xiuen una bolsa con ropa limpia.
Luo Xiuen echó otro vistazo a la situación antes de tirar de la mano de Cheng Yi. Le susurró:
"Cheng Yi, dime qué pasó anoche. ¿Hice algo inmoral?"
"No es tan inmoral. Anoche bebisteis demasiado. Entonces, dijiste que querías ser hermanos jurados con él".
"¿Hermanos jurados?" Luo Xiuen tartamudeó. No podía creer lo que estaba escuchando. "Entonces, entonces... ¿Por qué dormíamos en la misma habitación? Y su ropa... Su ropa..."
