Capítulo # 36

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Hermione salió de la habitación de su hijo, para dirigirse a la habitación de Rose, quien como siempre tenía varios libros sobre su cama,  además de pergaminos con plumas y tinta listos para ser usados. Era igual que ella en su adolescencia.

— ¿Tienes mucha tarea por adelantar? — preguntó su madre desde el marco de la puerta.

Rose sonrió ante la pregunta levantando los hombros y las manos — Sí, ya sabes como es — dijo — si quiero tener más tiempo con Scorp tengo que.

— Así que al fin te decidiste por darle una oportunidad a Scorp, me engañaste, por mucho tiempo creí que lo odiabas — refutó la castaña — o era tu versión... "princesa de papá"

Rose suspiró recordando los desplantes y las muecas que le hacía los primeros años a su rubio, para luego llorar en el baño de prefectos, porque no le podía decir que ella sentía lo mismo, no quería que su padre se enojara — sí, pero cuando él nos abandonó supe que ya era tiempo de ser feliz, y espero que tú también lo seas, te lo mereces, mamá — aclaró.

Hermione suspiró profundamente antes de hacer su pregunta, debía ser cuidadosa, no quería problemas con su niña —  ¿así que no te molestaría que rehaga mi vida, ni con quien?

— Bueno me gustaría que sea con un hombre mejor que mi padre en todos los sentidos, que te ame, que te respete, que te defienda porque la pasarán muy mal cuando él se enteré, mi padre es un niño grande, egoísta y perjuicioso — dijo Rose — sería muy bueno que hayaras un hombre así para que le demuestres a mi padre el gran error que cometió al dejarte.

— ¿Te gusta algún hombre para mí? — preguntó Hermione curiosa — siento que sabes algo que yo no.

— Hace unos días atrás,  después de la llamada de atención tuvimos la clase de armontentia, fue muy interesante y competitiva — explicó su pelirroja, no obstante Alex se las ingenió para que el profesor Malfoy oliera la poción primero — me sorprendí cuando nombró "ciertos olores conocidos"  — Mamá creo que hay algo que no me has contado.

Hermione la miró sorprendida, perdiéndose en sus recuerdos... primero no entendía como era posible que Draco se haya enamorado de ella solo con un abrazo reconfortante.  Luego llegó a su mente el comentario de Narcisa... "está noche he sido testigo del inicio de una relación muy ansiada, pero no diré más" — creo que su rubio tenia mucho que explicarle.

La castaña regresó y parpadeando miró a su hija y preguntó — ¿A qué te refieres?

— En la clase note las miraditas cómplices de Scorp y Alex, enterandome de que el profesor Malfoy estuvo muy enamorado en el colegio, pero no fue correspondido por eso se casó con Astoria Greengrass, y al morir ella prefirió quedarse solo — explicó su hija mientras observaba cuidadosamente las actitudes de su madre — tú supiste algo de eso o de quien se trataba.

Hermione buscó entre sus recuerdos del séptimo año, aunque cambió su comportamiento, ya no era pesado, ni la insultaba, no fueron amigos. Ella ese año disfrutaba de las atenciones de Ron y no puso interés o no le importaban los demás. Solo quería disfrutar su nueva historia de amor.

— No, Rose — la verdad que estuve más interesada en tu padre — explicó Herms — que no me fijaba en los demás — tengo breves recuerdos de encuentros furtivos entre Harry y Parkinson, así como ver mucho a Zabini en la sala de Griffindor,  y las visitas furtivas que hacía George para ver a Daphne, pero de Draco no recuerdo haberlo visto con nadie... ¡Oh espera!... Recuerdo que era asediado por una pelinegra  flacucha y parlanchina de años menores de su casa.

— Dudo que haya sido de ella, de quien se enamoró el profesor — aseveró Rose dudosa — piensa mamá, tú eres muy inteligente.

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