Han pasado 20 años desde que la vio por última vez, ahora como profesor de Pociones en Hogwarts, requiere la presencia de las representantes de 2 de sus estudiantes, por una falta que a pesar de no
considerarse tan grave para los jóvenes, requiere i...
Al cabo de unos minutos el timbre daba fin a la interesante clase de pociones.
Los Griffindor y los Sly se despidieron de Pandora, ya que tenían clases de Herbologia por dos horas con Neville.
Todos se encontraban ya listos con sus mandiles color ocre y sus guantes.
— En la clase de hoy, plantaremos rosas de colores, que ustedes cuidarán hasta que se desarrollen hermosas y fuertes, les darán nombre, de acuerdo a su desarrollo y cuidado dependerá su nota del parcial en mi materia — explicó Neville.
Las chicas exclamaron — ¡awww! Emocionadas y muy contentas.
— ¿Y para que yo quiero cuidar una flor? — cuestionó fastidiado Alexander — si apenas me cuidó yo mismo.
— Ya sabemos que apenas te bañas y comes, Zabini — grito Flint en respuesta causando las burlas de sus compañeros.
El joven moreno rodó los ojos exasperado, le hizo un mojin en respuesta.
Neville tranquilo contestó — Puedes regalarle la flor a la señorita del salón, que más te agrade — las mujeres adoran esos detalles.
Alex buscó con la mirada a Lili, quien al darse cuenta lo miró en respuesta, sonriendo ruborizada.
Frente a los estudiantes aparecieron unas pequeñas macetas del color de sus casas.
Neville pasó a lado de cada uno de los estudiantes entregándoles las semillas de las rosas, del color que ellos quisieran.
Scorpius pidió la rosa de color lila, ya que era la preferida de Rose, y Alex, una de color anaranjada, ya que le recordaba el cabello de su amor.
Frank pidió la tradicional rosa, color rojo. Fred II, blanca como el corazón de su rubia. Las chicas hicieron lo mismo.
— Podría darme semillas de más — pidió Rose a Neville.
— Claro, srta. Weasley tomé las que usted necesite — respondió Longbotton.
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Hermione llegó al Ministerio, encontrándose con Harry y Theo en los ascensores.
— ¡Buenos días! — saludaron los 3 ex compañeros.
— Salgamos a almorzar, Herms — dijo Harry cómo en los viejos tiempos ¿Qué dices?
— Uhmm — murmuró Hermione en respuesta — no lo sé es que tengo mucho trabajo, además yo casi nunca almuerzo.
— Vamos Granger acepta — dijo Theo con ojitos suplicantes — también nos acompañaran Luna, Pansy... Y también Ginebra con Blaise — En breve tendremos la reunión semestral en El Quisquilloso y saliendo de ahí nos reuniremos en el Caldero Choreante.
— No quiero ser mal tercio — dijo Herms triste en respuesta — todos estarán en pareja.
— No te aflijas, Granger — dijo Theo en un suspiro — mientras estés con nosotros nunca más te sentirás sola...te lo prometo.
