Un Amor Tan Hermoso

CAPITULO 16

-¿Te sientes enferma?

Lleva su mano hacia mi frente para tratar de sentir mi temperatura, después me obliga a abrir la boca y mirar si tengo infección en la garganta, realmente tengo que reunir de todas mis fuerzas para no vomitarle a la cara, solo a ella se le ocurre meterme el dedo a la boca tratando de bajar mi lengua para ver mi garganta como si fuera un doctor, como no encuentra nada lleva su mano hacia mi estomago como si este fuera a decirle que sufre de infección o algo así, presiona ligeramente, su ceja se eleva y vuelve a presionar.

-¿Suni cabe la remota posibilidad de que estés.....

-Algo debió caerme mal- digo rápidamente- ya llevaba días sintiéndome extraña. Como si tuviera infección.

Ella vuelve a presionar por todo mi vientre, incluso lo mide con las palmas de su mano haciéndome sentir un poco extraña, me alejo rápidamente, no me gusta que me toquen de esa manera.

-¿Estas embarazada?- pregunta seriamente.

-¿Qué?- pregunto asombrada y con pánico- ¡no! ¡por supuesto que no!

Ella me hace señas con la mano para que me tranquilice, vuelve a dirigir sus manos hacia mi, pero me alejo rápidamente.

-Antes cuando era niña solía ver como atendían a las mujeres embarazadas- me mira fijamente- como no había doctores en nuestro pequeño pueblo, las mismas mujeres de la comunidad se encargaban de los partos, se ayudaban unas a otras. Aprendí mucho de ellas, bueno no para ser una partera, pero por ser mujer obligaban a las niñas a asistir a los partos y esas cosas para estar preparadas.

Debió de ser una época muy difícil, porque no puedo imaginarme el dolor que tenían que pasar ¿Qué pasaba si el bebe venia enfermo? ¿Qué pasaba si la madre tenia alguna complicación? No tenían el medicamento para brindarle a la madre, ni al bebe, supongo que ellas hacían lo que podían y traer al mundo a un bebe de esa manera supongo que era de pensarse.

-Debió ser difícil- digo en susurro- ¿Por qué asistías?

-Como te digo, las niñas eran llevadas para que viéramos lo que teníamos que vivir- su mirada se cristaliza- se perdieron varias vidas, pero gracias a dios nuestro pueblo fue creciendo y la atención medica comenzó a llegar.

Supongo que no tenían acceso a métodos anti conceptivos y llevar a las niñas era lo mejor que tenían para que se cuidaran más. Debió ser realmente traumático ¿Qué tan de cerca te obligaban a ver? No me lo quiero ni imaginar. Mi cuerpo tiembla tras el inicio de un escalofrió.

-¿A cuántos partos asististe?

-No lo sé- se encoge de hombros- a veces la situación se volvía complicada que se ocupaban muchas manos para ayudar. Pero no desviemos el tema ¿estas embarazada?

-No- digo rápidamente- yoongi y yo nos cuidamos. Hemos hablado del tema pero ambos estamos de acuerdo en esperar a que termine mi carrera universitaria y además tenemos a Min Hee.

Mis mejillas se sonrojan al hablar de mi vida sexual con mi madre, estoy segura que algo debe haberme enfermado. Yoongi y yo siempre hemos utilizado protección.....bueno....pensándolo bien después de pelear que no hablábamos pero si manteníamos sexo algunas veces no utilizamos protección porque iniciábamos en la cocina o en la sala....no....eso no puede ser.

-Tu vientre esta un poco duro- se encoge de hombros- pero tal vez solo son ideas mías, si dices que se cuidan entonces algo te hizo daño y yo estoy comenzando a comportarme como una anciana delirante.

Me rio de su pequeña broma y ella lo hace también. Me preocupa pensar en un posible embarazo, cuando regrese a casa checare en mi calendario, estoy segura de que esto es solo una coincidencia.