El joven omega Jiang lloró hasta que sus cuencas no pudieron producir más lágrimas. Sentía su espíritu desolado, machacado, sin energía. Nunca imaginó que su sueño de comprometerse en matrimonio con su persona amada se tornaría en pesadilla. ¿Cuántas veces había imaginado cómo sería ver a Xichen pidiéndolo en matrimonio ante sus padres? Sin embargo, su futuro lucía gris.
Wei Ying estaba a su lado, durmiendo. Le había acompañado y llorado junto a él. Era por esos momentos que valoraba tanto que su hermano hubiese llegado a su vida.
Intempestivamente, la puerta fue corrida y su madre ingresó. Su hermano se levantó por el ruido. Al ver a la señora Yu se sentó correctamente. El propio joven Jiang sintió que la vergüenza lo hundía, no sabía cómo mirar a su madre, jamás imaginó causarle una decepción así.
—Te quedarás. —Declaró. —No volverás a Lotus Pier hasta que te hayas casado con el joven maestro Lan y nos hayas dado un nieto que repare este error y tome tu lugar como heredero de la secta Jiang.
Jiang Cheng quería hablar, pero las palabras se atoraron en su boca nuevamente ¿qué podía ofrecerle a su madre? Nada, en ese momento no tenía nada. Aun así, dolía saber que no era bien recibido en su hogar. Ni siquiera pudo despedirse de Muelle de Loto. Pensar en tener un cachorro con Xichen le traía más miedo que anhelo.
—Señora Yu, pero si descubrimos quien...—Intervino Wei Ying.
—Aunque lo hagas, eso no cambiará nada ¿Quién querrá casarse con un omega con tan mala fama? Debes dar gracias que Lan Xichen aceptó tomar la responsabilidad. Con esas pruebas pudo negarse.
El solo escuchar el nombre de Xichen ponía nervioso a Jiang Cheng. No sabía cuáles eran los sentimientos de Xichen. Sabía que había aceptado casarse con él, pero ¿le creería? Quizás solo lo hacía por lastima, por culpa. Su madre lo había acorralado, le había hecho sentir culpable hasta que solo le quedó "tomar la responsabilidad", una que ante los demás no debería ser tomada por Xichen.
—¿Se irán? —Preguntó.
—Por supuesto que nos iremos. Me llevaré a tu hermana. Intentaré reparar nuestro honor para poder casarla con alguien adecuado. No sabes el daño que has ocasionado a tu hermana.
Jiang Cheng apretó los labios, su voz quebrada quería salir, deseaba rogar a su madre porque no le dejase ahí, pero ni siquiera le quedaba vergüenza para hacerlo.
—Madre...
—Ya no importa lo que digas, conseguiste lo que querías. —Sentenció la mayor. —Te casarás con el joven maestro Lan y deberás permanecer a su lado como su consorte. De ti depende que comiences a gustarle o se torne una pesadilla y te desprecie. —Continuó ella con el ceño fruncido. —Los Lan no practican la poligamia, pero hubo excepciones y esta podría ser una. Ten en claro algo, hijo, nadie te quiere a su lado y todos lucharán porque te desprecie.
—Por favor...
—Ni se te ocurra huir. Los Jiang no huyen de sus problemas, enfrentan la responsabilidad. —Sentenció. —Piensa en tu hermana, si huyes, ella no podrá casarse.
Su madre tenía razón. Recordó perfectamente las miradas de desprecio de los Lan. Tendría que quedarse sin su familia, con un prometido del cual no conocía sus sentimientos, con una familia política que lo despreciaba. Y si optaba por huir, solo hundirían aún más en la vergüenza a su secta, nadie le tendería la mano, nadie los tomaría en serio.
Madam Yu se giró hacia el otro omega.
—Wei WuXian, puedes escoger, quedarte o regresar a Muelle de Loto con nosotros.
El aludido realmente amaba Muelle de Loto, pero jamás abandonaría a su hermano. La decisión estaba tomada.
—Me quedaré.
—En ese caso, necesito hablar contigo.
Wei Ying siguió a Madam Yu hasta el corredor. Ella quebró parte de su máscara de frialdad. La omega sabía que su hijo no se atrevería a aquello, pero finamente lo que importaba era lo que los demás pensasen. Sentía que su corazón se fracturaba de solo pensar en la vida que le esperaba a su pequeño.
—Debes protegerlo, ayudarlo a conseguir el amor de su marido.
Su tono guardaba cierta suplica.
—El hermano Xichen...lo tratará bien.
Madam Yu apretó su anillo, algunas chispas brotaron, lucía pensativa y triste.
—No lo sé. Los Lan están muy molestos con él a pesar de que culpan por completo a Jiang Cheng. No se lo dejarán fácil. Estoy segura que intentarán que Xichen tome un concubino u otro esposo. Sea como sea no va a resultar fácil la vida de Jiang Cheng aquí. Se casarán en un mes, no habrá tiempo para que se prepare y solo tiene quince años.
Fue increíble para Wei Ying ver los ojos de aquella fiera dama llenos de lágrimas. Para ella no era fácil dejar a su hijo ahí, pero no podía hacer otra cosa para reparar su honor. Si se iba, Xichen podía dejar nulo el compromiso y su hijo jamás podría casarse ni dirigir Muelle de Loto de manera digna. Lo peor es que a diferencia del compromiso pactado para Yanli, ellos no tenían ni voz ni voto pues ante las pruebas, los afectados eran los Lan.
—No compliques más su estancia aquí, compórtate y protégelo. El joven Lan va a ser castigado después de la boda un mes; así que estarán solos durante ese tiempo.
Wei Ying asintió. Se sentía nervioso, pero estaba preparado para proteger a su hermano de quien sea. Se prometió intentar no causar más problemas que dañasen el ya caído honor de su hermano y de la secta Jiang.
Los miembros de la secta Jiang se retiraron, llevándose a su hija. Ni siquiera habían terminado de hablar sobre la inminente guerra que se cernía. Los lazos entre los Jiang y Lan se habían quebrado. Solo quizás si nacía un heredero en común que fuera digno podría repararse. Sin embargo, en ese momento la incertidumbre los envolvía.
Wei Ying y Jiang Cheng se quedaron solos. No se habían quedado ni otros discípulos ni sirvientes. Realmente solos. Wei Ying sintió nerviosismo, pero luego se repuso. Debía permanecer fuerte y cuidar de su hermano menor. Era necesario, pues ahora se encontraban en territorio enemigo. No podía creer como algo que parecía tan inocente había desembocado en una tragedia. Su hermano ahora estaba comprometido con la persona que amaba, pero era infeliz. ¿Cómo es que la vida de alguien podía cambiar tan fácilmente? No podía creerlo, el destino de su hermano era dirigir Muelle de Loto. ¡Era injusto!
En ese instante, un subordinado Lan tocó su puerta. Al parecer Lan Qiren les citaba para esa tarde. Al regresar con el mensaje, observó a su hermano dirigir su mirada por la ventana de forma abstraída.
—Wei Ying, realmente no lo hice.
El mayor tragó grueso. Era tan difícil ver a su hermanito derrumbado.
—Lo sé. ¿Pero cómo pudieron esconder esas hierbas aquí? Debemos averiguarlo.
—No tiene caso.
—Claro que sí. Puede que los demás continúen pensando lo mismo, pero nosotros podemos cobrar venganza; además tu familia política dejará de pensar lo peor de ti.
Jiang Cheng sintió una pequeña chispa de esperanza, pero esta murió al recordar las palabras de su madre. Sobre la cama, sentado, con las rodillas hacia su barbilla, se apretó más haciéndose más pequeño.
—Dudo mucho que siquiera escuchen. Me odian y probablemente Xichen también. Siento que, si hubiera terminado de confesarme, él me habría rechazado...
—¿Por qué lo dices?
—Lo percibí en la sala. Él no dijo que me amaba, solo siente culpa, quizás.
—Ustedes deben de hablar.
Sin embargo, Jiang Cheng sentía miedo y enojo. Para su amado alfa era un vil rastrero que no le importaba el honor de su propia familia. Las pruebas habían destruido su reputación, dejándolo en una escala tan baja que comenzaba a avergonzarse de sí mismo.
...
El día anterior había sido una pesadilla. Cuando despertó, quiso creer que no era más que una ilusión. Se levantó y reunió con su tío, su solo gesto le anunció que todo era verdad. Cumplieron con sus labores como si no hubiese sucedido nada. Mientras caminaba por los pasillos de la mansión, los sirvientes y subordinados le dirigían miradas de lástima. "Pobre joven amo, tener que unirse a alguien tan despreciable"
Una vez en el Hanshi a solas, se hundió en la música, tocando liebing, el cual sonaba dispareja como nunca había sido escuchada. No encontraba respuestas, ni soluciones, solo la que la maestra de Muelle de Loto había solicitado.
"Yo tuve la culpa, debí mantenerme lejos de él"
Un mensaje le llegó, era de Meng Yao. Sintió el espíritu aún más pesado, otro inocente iba a sufrir. Estaba seguro que ya se había enterado de todo. Apretó el papel y se puso de pie, finalmente solo podía dar la cara y continuar.
Al verlo, parte de su entereza flaqueó: El rostro del omega era lloroso, le observaba con tristeza infinita y desesperación. Podía ver que su pareja había llorado incansablemente, quizás más que él mismo. Meng Yao no se merecía esta situación.
—Te vas a casar con el joven amo Jiang. —Murmuró.
Los ojos de Xichen se llenaron de lágrimas. Tembló, deseo consolarlo, pero realmente no había palabra que pudiera hacerlo. Su destino había tomado un rumbo inesperado del cual no podía huir.
—No lo hagas. —Insistió Meng Yao—El joven amo Nie me contó todo. Es algo que muchos omegas hacen para atrapar alfas. Te engatusó.
Las pruebas señalaban a Jiang Cheng, su tío no tenía duda alguna de que el omega Jiang realmente haya tenido esas intenciones. Para ese momento, todo el mundo de la cultivación lo sabía y era más que seguro que le habían agregado detalles que no habían sucedido.
—Él no lo haría. Alguien nos tendió una trampa. —Respondió.
—¿Por qué no? —Increpó Meng Yao. —Es evidente que le gustabas. Eres muy inocente, pero ese joven amo es como todos, caprichoso. Como te comprometieron con su hermana, no pudo dejarte en paz.
Xichen quedó en silencio. Intentaba no recordar lo que sucedió entre ellos porque le confundía más. Sin embargo, algunas veces rememoraba retazos de su encuentro: en medio de la intimidad había sentido recepción en el otro, entrega, ternura y amor cálido. Negó para sí mismo.
—No importa como sea. —Replicó.
—¡Claro que importa!
A-Yao intentó besarlo, pero Xichen le retuvo. Era irónico, pero su primer beso lo había dado a Jiang Cheng. Por supuesto, antes quiso besar a Meng Yao, pero le respetaba, deseaba ser lo más formal posible para que nunca creyese que se aprovechaba de él. En ese instante se dio cuenta que probablemente nunca conocería el sabor de los labios de A-Yao.
—Estoy comprometido. Y esta vez no puedo romper el compromiso. —Lo dijo con la mayor firmeza que pudo reunir. No era tan fácil si veía como el corazón del otro se hacía pedazos.
Había decidido no huir con A-Yao antes que todo sucediese, pero no en renunciar a él, solo pedirle tiempo hasta convertirse en líder de secta. Cuando fuera líder, podría tomarlo como su esposo. Lo importante era romper con Yanli y enfrentar las batallas que se avecinaban; sin embargo, la situación era diferente. No podía mantener las ilusiones de su amado. Y definitivamente, no abandonaría a Jiang Cheng en la deshonra.
—Entonces, tómame como tu segundo esposo. No puedes unirte a alguien así, alguien a quien no quieres.
—No es posible. Tú no mereces algo así. —Replicó sujetándolo de sus brazos. A-Yao era realmente pequeño y lucía frágil, pero en su mirada había firmeza. —Lo que yo te prometí era hacerte mi único esposo, eso es lo que tú mereces, no migajas.
Meng Yao se sintió desesperado. Apretó la túnica de quien pensó sería su alfa.
—¡No me importa! No importa, por ti seré tu segundo esposo, me conformo con eso. —Se lanzó abrazarlo, pasando sus brazos y aferrándose a su espalda.
El alfa se contuvo de devolverle el abrazo, dejó que unas simples lágrimas se deslizaran por sus mejillas: Era momento de decirle adiós a su primer amor.
—A pesar de todo, pienso serle fiel. Y no voy a practicar la poligamia, A –Yao. Te quiero, pero no puedo cumplir mi promesa contigo.
Se odió por fallarle, pero debía de cortar todos sus lazos con A-Yao, no podía sembrarle ilusiones. No estaba en su moral el traicionar a su esposo, aunque fuera de esa manera. Además, siempre quiso a Jiang Cheng, cuido de él y le vio crecer. Lo mínimo que podía ofrecer en su matrimonio era respeto y lealtad.
Tuvo que reprimirse, se giró, dándole la espalda a su amado A-Yao.
—Xichen...—Se quejó el omega.
—Si necesitas ayuda...estaré para ti, pero no puedo ofrecerte más que eso.
Y avanzó sin detenerse, aunque el llanto del omega le quebrase por dentro.
Meng Yao se quedó de rodillas sollozando amargamente. Estaba en una zona poco concurrida, por lo que se permitió continuar llorando, dejando que sus quejidos escapasen de sus labios. No podía creer que perdió a Xichen. Aunque no lo hubiese amado como a Mingjue, le quería, se sentía protegido a su lado, realmente creyó en sus palabras, en su amor.
"No es su culpa. Él realmente me ama, iba a dejarlo todo por mí", se dijo. "Fue ese joven amo...el joven maestro Jiang me arrebató lo más valioso que tenía" ¿Por qué? A su vista, el joven maestro Jiang lo tenía todo: una familia, padres, dinero, una secta respaldándole, hermanos amorosos, estudios, categoría, era un sangre pura. Podía tener cualquier esposo, pero había decidido que a Xichen era al único que deseaba, incluso haciendo uso de artimañas tan retorcidas. A-Yao lo había pensado, acostarse con Xichen para obligarlo, pero él siempre le había tratado con caballerosidad, su amor era puro, perfecto.
"Xichen, no es tu culpa. Yo me vengaré por los dos"
No tenía los medios para hacerlo, pero su espíritu era firme, se vengaría de Jiang Cheng así tuviera que luchar hasta su último aliento por ello.
En aquel estado lamentable lo encontró Mingjue. Se puso de rodillas a su lado, acercó su mano hacia la espalda temblorosa de su ex amante.
—A-Yao...
—¿Qué me vas a decir? ¿Te lo dije? No es necesario, acaba de quedarme claro mi posición en este mundo.
El rostro de Meng Yao estaba sudoroso, húmedo, lleno de lágrimas, sus ojos parecían a punto de reventar.
—Xichen...
—¿Vas a defender a tu amigo? Ya no importa. Son todos los jóvenes alfas unos malditos egoístas que solo utilizan a los demás.
Tambaleante se puso de pie y se alejó, dejando a Mingjue con diversas palabras atoradas en su garganta.
...
Los hermanos de Yummeng se acercaron a donde los había citado Qiren. Justo en la puerta se encontraron con Xichen. Era evidente que él debía estar presente. A su lado se encontraba Lan Zhan, apoyándolo, así como Wei Ying lo hacía con su propio hermano. Ninguno de los cuatro pudo decir algo. Qiren abrió la puerta y los hizo pasar.
Xichen y Jiang Cheng no podían mirarse. Wei Ying y Lan Zhan estaban impedidos de hablarse por apoyo hacia sus hermanos. De ser amigos conocidos desde niños, jugar en los jardines de conejos bajo el cuidado de la dama Lan, los cuatro se sentían como extraños, incómodos, sintiendo que deseaban escapar de ahí.
—Dado que el líder Jiang se marchó junto a su familia he quedado a cargo del matrimonio y de ustedes. —Dijo refiriéndose a los dos omegas.
—Tío...
—Xichen ¿te has arrepentido? Tienes el derecho a hacerlo.
Jiang Cheng apretó sus puños indignado. Era tal y como su madre le había dicho, no lo deseaban como esposo de Xichen y aun así, aun con todo ese desprecio debía de aguantar y casarse con él.
—No. Solo que Jiang Cheng es realmente joven. Solo tiene quince años y yo veinte. Además, no conoce las reglas familiares ni...
Qiren se mantenía inflexible. Había insistido junto a los demás miembros del consejo en que desistiera del compromiso, que estaba en su derecho de hacerlo, pero fue en vano, Xichen estaba decidido a asumir la responsabilidad.
—Hizo acciones propias de un omega adulto, no de un niño en crecimiento. Debe hacerse responsable. Se le enseñará las reglas familiares para que no te deshonre como tu esposo.
—¡Jianh Cheng no hizo nada! —Reclamó Wei
—Siéntate. Tú no tienes por qué quedarte en Receso de las Nubes. Si no quieres que te devuelva a tu hogar, mantente quieto, aprenderás también las reglas familiares.
Wei Ying había estado repitiéndose una y otra vez en no dar lugar a más enfrentamientos, pero simplemente no podía aguantar ver como Lan Qiren despreciaba a su hermanito.
—Se equivoca, yo soy su hermano, tengo que estar a su lado.
El alfa mayor frunció más su ceo.
—Además, Jiang Cheng no es un cualquiera, es un joven maestro de una prominente secta, así que tiene todo el derecho a tener a su hermano, sirvientes y subordinados de su familia.
Jiang Cheng apretó el brazo de su hermano pidiendo que se calmara. Él también se encontraba indignado, pero no deseaba complicar más aquella situación. Solo deseaba que esa reunión acabara e irse.
—Su familia no lo crío para ser un noble consorte, así que, joven Jiang, deberá aprender a serlo en el mes que queda. Espero que pueda ser un buen esposo para mi sobrino.
—Lo haré. —Respondió firme el joven Jiang.
Xichen se sintió frustrado. Jiang Cheng tenía un futuro diferente, un destino grandioso como un líder de secta. "Yo soy el responsable", se dijo así mismo. "Es mi culpa que Jiang Cheng haya truncado su vida de esta manera"
—Tío...lo que el joven Wei dice es cierto. Jiang Cheng debería poder mandar a llamar a un numero de sirvientes y subordinados.
—Lo hará cuando ustedes se casen. —Su tono cambió.
Su mirada dirigida a los Jiang delataba cuanto odiaba la perspectiva matrimonial de su sobrino mayor.
—El consejo va a autorizarte tomar un segundo esposo o concubino. —Anunció.
Los cuatro se quedaron anonadados. Xichen ni siquiera había sido consultado y él había dejado en claro que respetaba la ley de la monogamia; Lan Zhan no comprendía porqué su tío mencionaba aquello si siempre les había adoctrinado sobre que debían de tener un solo esposo toda la vida. Wei Ying apretó los dientes, deseando poder gritar al mayor.
—¡No! —Intervino Jiang Cheng. —Estoy aguantando todas sus palabras llenas de desprecio, pero no permitiré que se me humille así.
—Joven Jiang, los ofendidos somos nosotros. Usted es muy diferente a lo que esperábamos como consorte de Xichen. No solo no cumple con las cualidades que yo esperaba para él, sino que consiguió comprometerlo de una forma tan ruin...
Sus palabras parecían no tener fin, pero Xichen le detuvo.
—Lo siento, tío. Jiang Cheng será mi único esposo. —Habló con decisión.
—Xichen, estas poniendo en riesgo tu ascenso. Además, este chico es muy joven para darte un cachorro pronto.
Xichen ni siquiera pensaba en profanar a Jiang Cheng. Lo que había sucedido entre ellos fue producto del afrodisiaco, ninguno habría actuado de esa manera.
—Entonces no tendré hijos hasta que Jiang Cheng quiera y pueda dármelos. No voy a tener más esposos, concubinos o amantes. Esta situación no fue culpa de ninguno, pero Jiang Cheng es quien ha salido perjudicado.
La discusión se había tornado entre tío y sobrino, así que Qiren ordenó a los omegas abandonar la habitación, no sin recordarles que partir del día siguiente tendrían clases complementarias para aprender las normas familiares de los Lan, sus costumbres, historia y demás.
En la habitación, Lan Zhan fue testigo del enfrentamiento de miradas entre los otros dos alfas. Su tío insistió numerosas veces en que lo mejor era que Xichen tomase otro esposo, pero Xichen se negó rotundamente.
—¡Tu esposo tendrá quince años, puede demorarse en concebir mucho tiempo!
—Ni siquiera pienso consumar el matrimonio. —Respondió. —Es un niño, debe estar asustado por todo esto. Yo... le hice daño, acabo de arrebatarle su futuro. No podría aprovecharme de él, menos exigirle que me dé hijos.
—Ese chico arruinó el tuyo.
—No iba a casarme con la señorita Yanli, tío. —Replicó. Su voz no era alta, pero si grave y firme. —Es mi última palabra. No tomaré otro esposo ni concubinos.
Xichen salió de la habitación enojado. Era extraño verlo de esa manera, pero en ese instante su interior era una tormenta completa. Lo único que podía hacer por el bien de Jiang Cheng era facilitarle su situación matrimonial futura. Por el momento, no podía verlo sin sentirse avergonzado de sí mismo, pero esperaba que al menos pudieran llevarse bien. Aunque nunca tuviesen una vida matrimonial, no podría humillarlo teniendo un amante.
Qiren se quedó a solas con Wanji. Él no sabía que podía decir para calmar a su tío. Temió que de un momento a otro cayese desmayado. Su hermano mayor nunca había dejado con la palabra en la boca a su tío.
Lan Zhan deseaba poder aligerar los problemas de ambos. En el caso de su hermano, entendía que era una situación difícil, pero no llegaba a comprender la profundidad de esa dificultad ¿era solo la manera deshonrosa en que se casaría? ¿O quizás era que tampoco le agradaba el joven Jiang como esposo? Luego pensó en su tío: Este había querido a alguien tan noble y dulce como la señorita Jiang, pero al final se habían roto los lazos con los Jiang. A su mente acudieron las numerosas travesuras de Wei Ying y pensó que él seguramente también representase algo negativo para su tío.
—Tío, te prometo entrenar a Wei Ying para que no se equivoque y cumplas las reglas...
—¡No!
—Pero, vivirá aquí.
Vio en el rostro de su tío firmeza.
—No, tú debes mantenerte alejado de él. Si el señorito Jiang fue capaz de hacerle eso a tu hermano, no quiero imaginar que artimañas tiene Wei WuXian.
"Artimañas", esa palabra se refería a técnicas sucias para conseguir lo que se deseaba. Wanji se sintió ofendido en nombre de Wei Ying.
—¿A qué se refiere, tío?
—Wanji. Debes mantenerte lejos de Wei WuXian, solo recuerda eso. Recibirá instrucción de alguno de los ancianos. Tú no debes cometer el mismo error que tu padre, tu hermano mayor. Ahora le debemos mucho a los Nie, probablemente debas de tomar como esposo a Nie Huaisang.
Su tío le había anunciado antes que él escogería a su pareja, pero pensó que al menos le consultaría si era de su gusto o si le parecía bien, pero en se instante se lo había designado como si fuera una tarea o un libro que leer. Y entonces, se dio cuenta que se estaba cuestionado las órdenes de su tío, algo que nunca hacía pues siempre confió en que las decisiones de su tío eran las mejores.
—Yo no creo empatizar con el joven maestro Nie. —Replicó.
—Es cierto, es un joven flojo, pero nada equiparable a Wei WuXian. Además, proviene de buena familia y linaje. Quizás no pueda cumplir con enseñar a otros dentro de la secta, pero podría mantenerse calmado y digno. Aun veremos.
Su tío le había dejado perturbado. Ni siquiera conocía bien a Huaisang, le había visto al lado de Wei Ying, parecían ser amigos, eso era todo. Nunca despertó en él curiosidad por saber más ni por acercarse o cuidar de él. Sintió la urgencia de encontrar a Wei Ying. Lo buscó rápidamente. Preguntó a los discípulos, pero solo le informaron que se había ido hacia la catarata.
Lan Zhan sabía que por esa región los Wen se habían hospedado. Frunció su ceño levemente casi imperceptible. Se acercó intentando que su aroma se hiciera lo más bajo posible. Subió la ligera pendiente y ahí lo vio: Wei Ying en brazos de Wen Ning.
No podía creer el sacudón de rabia que sintió. La sensación fue vertiginosa, imparable. Quiso separarlos de inmediato, pero, entonces escuchó unos ligeros gemidos, y vio los hombros de Wei Ying temblar. Estaba llorando, seguramente sobrepasado por todo. Y aquello le sentó peor, la rabia se convirtió en frustración y decepción: Wei Ying prefería consolarse con Wen Ning, confiaba más en él. ¿Acaso no debería acudir a él? Eran amigos de más años, desde niños ¿por qué había acudido a alguien que solo conocía hace unas semanas?
Dios unos pasos hacia ellos, revelando su posición al quebrarse unas hierbas debajo de sus pies.
Wei Ying alzó la mirada y se encontró a Lan Zhan, pero no se soltó de Wen Ning. Sus ojos lastimaron a Lan Zhan, se sintió como un intruso, no bien recibido por el omega. Este volvió a acurrucarse contra Wen Ning, ignorándolo.
El joven alfa Lan solo se dio la vuelta, no comprendiendo porqué su pecho dolía tanto. "¿Wei Ying me odia?", se preguntó. "Seguramente lo hace", concluyó. Irritado, pero a la misma vez con el corazón adolorido se retiró.
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Hola a todos!!! No puedo creer que esté actualizando tan seguido OMG!!! Por si se lo perdieron, Pequeño MAestro Lan y Maestro de Muelle de loto ya fueron actualizados. Quizás hoy actualice Jovenes maestros de cultivo y también suba un vídeo de Youtube. Así que esten pendientes por mis redes.
Youtube: Kaory-Madness
Fanpage: Kaory-Madness
Ig: Kaoryciel_Madness
Twitter: Kaory Ciel
Bueno, chicos creo que este capítulo fue algo más tranquilo que el anterior; aun así, sucedieron muchas cosas...
¿Se esperaban que Xichen termine con A-Yao? ¿O creían que lo tendría de amante?
¿Respetará eso que dijo o caerá en la tentación?
¿Meng Yao se vengará de Jiang Cheng? ¿Como piensan que lo haría? Teniendo en cuenta que no culpa a Xichen de lo sucedido.
¿Mingjue aprovechará el bug con A-Yao?
¿De alguna manera Qiren logrará que Xichen tenga otro esposo más?
¿Qué hacía ahí Wei Ying con Wen Ning?
¿Lan Zhan es comprometido con Huaisang?
¿Se dará la boda entre Xichen y Jiang Cheng? Solo les queda un mes!!!
Tenía que ser una fecha próxima debido al escándalo. Además, MAdam Yu tiene miedo que Xichen se arrepienta y no se case, dejando así a Jiang Cheng en la deshonrra. Como dijeron, esta vez ellos no pueden exigir nada, pues ante las pruebas Jiang Cheng es el culpable.
Se suponía que cuando Jiang Cheng llegase a cierta edad se volvería el nuevo líder. Pero ahora MAdam Yu y Fengmian han decidido esperar a que este tenga un cachorro que pueda ser el siguiente líder. No ven que su hija Yanli pueda serlo por su nivel de cultivo.
A lo que Wei Ying se refiere es que..normalmente, una dama cuando se casa se lleva sirvientes y discípulos de confianza a vivir con ella. En el omegaverse serían los omegas quienes hacen eso cuando van van a la secta de su marido. Pero a Jiang Cheng no le han dejado tener nada de eso, el único que pudo quedarse fue Wei Ying. Y por Qiren lo manda de regreso a Lotus Pier, está buscando la excusa para hacerlo.
A todo eso..¿Qiren tendrá razón en que Lan zhan no debe acercarse a Wei Ying por que lo llevará por el mal camino? Lo que no sabe Qiren es que Wei Ying no quiere amarrar a nadie, mas bien no quiere casarse XDXDXD
Muchas gracias a todos los que leen,. Por cierto, en el anterior capítulo me dejaran unas teorías muy buenas. Algunas tienen cosillas que parecen predecir el futuro.n Me encanta leerlas, así que espero que me dejen TEORÍAS LOCAS por favor.
¿Alguien leyó sueños sobre hielo? Pues pienso hacer un spin off xicheng, ya les avisaré. No se olviden de comentar, votar y compartir. Nos leemos pronto!!!