La calidez del sol era plena y su luz caía sobre ambos esposos. Jiang Cheng no sabía cuánto tiempo Xichen había llorado en sus brazos. Quizás nuevamente todos pensaran que se habían escapado para tener una desenfrenada despedida. Sin embargo, simplemente habían estado dándose cobijo mientras sollozaban en silencio. Entreabrió los ojos débilmente, su rostro estaba pálido y su cuerpo cansado, aun así, sus brazos acunaban a Xichen llenos de amor y fiereza. Había drenado su propia energía espiritual para controlar la desviación de Qi del alfa.
—Xichen ...—Susurró con voz ronca y cansada.
El alfa se separó y vio las lágrimas secas en las mejillas del omega. Su corazón se sintió culpable por hacer sufrir a su omega. Se acomodó y envolvió en sus brazos a Jiang Cheng. Esta vez fue el alfa quien acunó lleno de mimo al omega. No podía hacer menos, Jiang Cheng le había salvado de sufrir una desviación de Qi. Sentía que su corazón se llenaba de amor por él.
—A-Cheng, perdóname. —Acarició la mejilla del omega. —Te quería alejar. Justamente porque no quería que te preocuparas por mí. Y porque tengo miedo que Ruohan se entere de lo importante que eres para mí. Prefiero que me odies a que te haga daño. Si él te lastimara yo...perdería el juicio, el sentido para vivir. No podría soportarlo. —Dijo con una nota de desespero.
El omega suspiró, se acomodó en el pecho del otro, acurrucándose. Sus párpados pesaban. Comprendía al alfa. Él había hecho algo similar al ocultar su embarazo. Si perdía a Xichen, probablemente se perdería así mismo.
—Pude notarlo. —Respondió, moviendo los labios con pereza. —Aunque tu indiferencia era dolorosa, también sentía que algo había pasado. Sin embargo, debo confesar que pensé que ...—Se cortó avergonzado por sus celos e inseguridades.
—¿Qué era por A-Yao? —Besó la frente del omega. —Perdóname, creo que dejé que lo creyeras porque sabía que así te alejarías rápidamente. Quiero enfrentar solo a Ruohan, que nadie más sacrifique su vida para eso.
Aunque apenas tenía energía para moverse, Jiang Cheng quería regañar a ese alfa que tenía.
—¡Eres un idiota! —Alzó su voz. — ¿Crees que no me hace daño pensar que estás interesado en otro? Además ¿Cómo es eso de que quieres enfrentar a Ruohan solo?
Quería romperle las piernas, pero se sentía drenado, apenas y tenía fuerza para fruncir su ceño. Tomaría nota mental de esto para romperle las piernas más adelante.
—Lo siento. —Pidió Xichen, para luego dejarle un pequeño beso en la frente. — No sabía qué debía de hacer para ocultarlo. Si enfrentas conmigo a Ruohan...no sabemos cómo puede resultar ...no puedo perderte, no quiero que Jingyi pierda a sus dos padres. Es horrible, A-Cheng.
Xichen conocía perfectamente como era vivir sin sus dos padres. Su tío los había criado, pero el luto por su madre había durado toda la vida. Además, con la muerte de su madre también perdió a su padre. Así que, fue perderlos a ambos de una forma inesperada. Aún se le revolvían las entrañas al pensar que el causante de ello era Ruohan.
—Xichen...sé que eso es difícil, pero si vuelves a entrar en crisis, ya no tengo energía para ayudarte...
El alfa exhaló, cerró los ojos e intentó controlar sus emociones. Pensó en lo que aún tenía a su lado, en su esposo, su Jingyi, en su hermano, su tío, las personas de su secta que estaban a su cargo, incluso en A-Yao que estaba sacrificándolo todo por él. Todos ellos lo necesitaban.
—A-Cheng, gracias por abrazarme esta noche. Por cuidar de mí. —Apretó más su abrazo en torno a su esposo.
—Soy tu esposo aún, de todos modos, es mi deber. —Murmuró Jiang Cheng sin poder enfrentarlo directamente.
El alfa notó esas tiernas mejillas rojas, no puedo evitar acariciarlas suavemente.
—A-Cheng, serás mi único esposo en esta vida. —Susurró en el oído del omega, que parecía querer huir de aquel momento tan meloso. —Y...yo seré tu único esposo ¿cómo piensas que permitiré que alguien más te tome como esposo?
Jiang Cheng levantó la mirada, apretó la mejilla de Xichen con fuerza como regaño.
—Lan Huan, no eres un buen actor... pensé que, si de verdad ya no te interesaba, entonces no te importaría si me caso con otro.
El alfa tomó su mano y entrelazó sus dedos.
—Quisiera decir que, si yo muero, tú puedes tomar otra pareja, pero...
Aquel comentario sonó un tanto oscuro, pero Jiang Cheng comprendía. Aun así, no creía que pudiera casarse con otra persona si Xichen moría. Por el contrario, se perdería así mismo, quizás se aferraría a su cachorro y a sus deberes como líder, pero dudaba poder pensar en algo como tener un nuevo alfa.
—Iré contigo. —Decidió.
—A-Cheng, si vas conmigo ...
Jiang Cheng sintió nuevamente el terror anidarse en Lan Huan. Para el alfa, Wen Ruohan simbolizaba peligro para su familia. Había pasado muy poco tiempo desde que se enteró de la verdad, por lo que no era fácil para el alfa desprenderse del trauma.
—Cuéntame, cuéntamelo todo. Si me lo dices, podrás controlar mejor tus emociones y decidiremos que hacer. —Propuso Jiang Cheng. —Dices que soy tu esposo y tu omega aun, entonces, esto es algo que decidiremos entre los dos.
Xichen exhaló nuevamente, apretó la mano de su omega. Necesitaba encontrar su ancla para que las emociones y el pánico que simbolizaba Wen Ruohan no le arrastraran nuevamente a perder el control.
—¿Meng Yao fue quien te contó eso? —Preguntó el omega.
— No.—Respondió para sorpresa de Jiang Cheng. —Quien me confesó la verdad fue mi tío. Dentro de la carta de A-Yao había un sobre más pequeño con la carta de mi tío.
Entonces no había duda de la veracidad de esos sucesos. Realmente, Jiang Cheng también se sentía indignado y ofuscado. Tantas muertes por una pasión enferma.
—Lan Qiren ¿siempre lo supo? —Preguntó
Las manos de ambos esposos estaban bien tomadas la una de la otra, sus cuerpos estaban muy juntos, así el calor del cuerpo del otro les mantendría estables.
—No, hace poco se enteró. Fue muy doloroso para él también. A-Yao descubrió la verdad en los registros de Wen Ruohan. —Comentó.
—¿Logró infiltrarse hasta ahí?
—Así es. Ni bien se enteró, robó los registros y se los mostró a mi tío.
Los ojos de Xichen volvieron a enrojecerse, nuevamente sus emociones parecían fuera de control. Jiang Cheng intentó empujar un poco más de su energía. Ante aquel gesto, Xichen se obligó a mantenerse estable.
—No, A-Cheng, estás débil. Yo lograré calmarme. —Susurró.
—Cuéntame, entonces...
— Mi tío se siente culpable porque fue su rechazo lo que hizo que Wen Ruhan quisiera castigarlo por años de esta manera.
—Wei Wuxian me dijo que Wen Ruohan tenía una obsesión por tu tío, pero no esperé que fuera tan retorcida. —Respondió Jiang Cheng. —Estoy seguro que el gran maestro Qiren no tuvo la culpa. Si amas a alguien no buscas castigarlo, dañarlo, destruir todo lo que ama. Aunque, quien soy yo para decirlo...
Xichen sostuvo su mentón. Respiraba mejor luego de haberse desahogado.
—La diferencia es que tú no lo hiciste con intención. No planeaste aliarte con los Wen para destruirnos. —Replicó. — Fue Wen Ruohan quien, nuevamente, planeo que me traiciones para hacerme sufrir y, con ello, presionar a mi tío y castigarlo.
Unas lágrimas escaparon de los ojos de Jiang Cheng. Su corazón se sentía un poco más liviano por la comprensión de su marido. La caída de la secta Lan era una de sus más grandes culpas que cargaría toda su vida, pero de ninguna manera sería algo que hubiera hecho con intención.
—Ahora estoy agradecido de que ni tú ni Wei Wuxian hayan revelado sus embarazos. —Su mano se deslizó suavemente hacia el vientre de su omega, donde recordaba estaba la cicatriz que aún perduraba de la extracción de Jingyi. — Me aterra pensar qué les pudo haber sucedido a ustedes y a los bebés si Wen Ruohan lo hubiera sabido. —Besó su coronilla suavemente y dejó sus labios ahí. —Cualquier sufrimiento que mi hermano y yo pasamos al pensar que nos dejaron de amar fue nada al lado de que ustedes o nuestros cachorros sufrieran. El tío me recalcó eso. Se aprovecharon de nuestra inexperiencia para hacernos daño.
Por una parte, aquellas palabras le trajeron alivio; pero, por otra parte, se sintió asqueado. Todo ese sufrimiento que vivió y la culpa que cargaba, la sangre que tenía en sus manos era culpa de las macabras acciones de Ruohan.
—¿Toda esta masacre fue para castigar tu tío? —Soltó sintiendo el estómago revuelto de nauseas ante esa retorcida obsesión.
—Hay algo que no te he dicho...—Xichen pareció dudar, pero finalmente decidió hablar, y, con ello, volver a confiar en Jiang Cheng. Podía parecer un tonto ante el mundo, pero, a pesar de todo, Jiang Cheng seguía siendo su pareja y en quién sentía debía de confiar.
—Mi tío estuvo enamorado de Cangse Sanren, la madre de Wei Wuxian. —Afirmó el alfa.
Jiang Cheng se levantó del regazo de Xichen donde había terminado recostándose.
—¡¿Qué?!—Estaba seguro que Wei Ying tampoco tenía idea sobre eso
El alfa atrajo a su omega de nuevo a su regazo. Necesitaba tener su aroma lo más cerca posible.
—Así es. Tu madre y padre los apoyaron en su momento y por eso Wen Ruohan los tiene de blanco también. Al final, Cangse Sanren se casó con otro, pero el retorcido de Wen Ruohan no la dejó ir ...
—Entonces la madre de Wei Ying también...
Xichen solo pudo asentir con pesadumbre, mientras la furia e indignación crecía en el pecho de ambos.
—Mi tío me dijo que por eso tiene una deuda de sangre con el joven Wei. Por supuesto, el joven maestro Wei no tiene idea sobre eso.
El omega abrazó a Xichen nuevamente. Pensó en su hermano, cómo reaccionaría cuando supiera la verdad. Seguramente enloquecería de dolor. Wei Ying había logrado un equilibro entre su cultivo ortodoxo y el cultivo demoníaco, por lo que era mejor decírselo cuando mataran a Wen Ruohan. Si quería podría desquitarse con el cuerpo de Ruohan, machacándolo, despedazándolo, no le importaba. Él mismo ayudaría a despedazar ese cuerpo. Wen Ruohan estaba manchado con la sangre de los padres de todos ellos.
—La carta de mi tío tiene un tono a despedida. —Confesó el alfa. —Creo que él quiere asesinar a Ruohan por su cuenta. Además, junto a A-Yao están haciendo algo para debilitarlo, pero es riesgoso. Si Ruohan se entera, no quiero imaginar lo que les sucederá. Por eso, yo debo rescatarlos, y no quiero que mi tío sufra más. Él ya nos ha dado su vida criándonos, perdió a quien amó, perdió a su hermano y tuvo que enfrentarse al consejo por nosotros, además, debe estar hundido en la culpa por la muerte de mi madre, de mi padre y de Cangse Sanren. —Se aferró a Jiang Cheng. —No soportaré perder a mi tío.
—Xichen...
No sabía que decirle, así que solo acarició su espalda. No podía detenerlo, porque él haría lo mismo si estuviera en su lugar. De hecho, ahora mismo su odio por Wen Ruohan creció.
—Mi tío indica en su carta que sabe lo que A-Yao me ha enviado los mapas y que espera que acuerde con él una forma de rescatarlo. Me pide que ayude a A-Yao para establecerse y ser libre de los Nie. —Agregó.
El omega se separó ligeramente, pero aún envolvía a Xichen con sus brazos, estaba sentado sobre el regazo de su marido, así que sus aromas prácticamente se habían mezclado.
—¿Libre de los Nie? Pero pareciera que Nie Mingjue...—Recordó como el hombre parecía loco por rescatar a Meng Yao, incluso si tenía que humillarse o arriesgar su vida en ello.
—Mingjue está obsesionado con A-Yao porque son destinados, pero A-Yao no quiere estar a su lado. ¿No crees que cada quien es libre de decidir con quién estar?
Jiang Cheng frunció su ceño, se aferró más a su alfa y expandió más sus feromonas.
—Sí, pero más le vale que no sea contigo. —Gruñó. —Mi amabilidad tiene límites y no contempla en compartir a mi alfa, mi hombre. —Un fuerte ronquido se dejó escuchar.
El mayor quedó sonrojado por haber sido reclamado de forma tan directa.
—No tienes por qué preocuparte, después de todo, ya soy un alfa marcado por un precioso felino. —Besó su dorso.
Acercó sus labios a los de Jiang Cheng y comenzó a besarlo, mientras sus manos se deslizaban por sus costados, hasta aferrarse a sus caderas, luego lo apretó contra su cuerpo. Al separarse, notó el rostro sonrojado de Jiang Cheng, estaba seguro que se encontraba en el mismo estado. Acarició sus mejillas con ternura.
—Me gustaría tanto ver crecer a Jingyi a tu lado...pero debo de enfrentar a Ruohan porque es mi deber como hijo, como líder. Así que seleccioné a Xue Yang porque sé que conoce bien todos los pasillos, además su cultivo demoniaco le permite crear portales una vez dentro. Podrá sacar a mi tío y a A-Yao rápido. Por otro lado, Wen Qing...ella comprende el sentimiento de venganza y también desea vengarse. Así que, si yo no logro matarlo, al menos lo habré debilitado lo suficiente, entonces ella podrá acabarlo.
Cuando intentó besar esos provocativos labios de nuevo, Jiang Cheng no se lo permitió; en vez de ello, se dejó caer hasta que sus frentes se tocaron.
—¿Por qué ahora suenas como si tú te despidieras? —Cuestionó Jiang Cheng. —No quiero eso, Xichen ¿acaso no quieres ver crecer a nuestro cachorro?
Xichen bajó la mirada, contuvo sus lágrimas y asintió.
—Entonces deja de cargarlo todo tú solo. —Replicó Jiang Cheng. — Wen Ruohan no es un inmortal. Es un cultivador...y si tu tío y ese Meng Yao realmente están haciendo algo por debilitarlo...entonces tenemos una oportunidad. Además, Wei Wuxian logrará arrebatarle el control de los cadáveres feroces. Tú y yo lo venceremos, Wen Qing también, ella es una poderosa cultivadora también. Todo este tiempo hemos estado cortando sus brazos y piernas. ¿Crees que tu tío ha soportado todo esto para ver morir a su sobrino por ese psicópata? ¿No crees que no se lo merece? No seas ridículo. ¿En qué mundo ese tío que ha dado su vida por ustedes asentirá y se irá dejándote solo con el psicópata de Ruohan? ¿en qué mundo te dejaré ir solo?
Xichen posó su mano por la cabellera del omega, enredando sus dedos en esa espesa melena.
—A-Cheng, si vas, no podré soportarlo. Prefiero que te encargues de la misión de rescate y luego vuelvas, por favor, estaré más tranquilo. —Pidió.
—¡Oh claro que cumpliré con mi parte de la misión! —Soltó rodando los ojos, incluso un poco ofendido porque pensaran que dejaría la misión que ya le habían encargado. — Liberaré a esos concubinos y la familia de esos generales, mantendré con una soga al cuello de Nie Mingjue. Pero, cuando los tenga a salvo, créeme que estaré ahí. Puedes ir adelantándote, pero más te vale que me esperes para darle la estocada final. —Le advirtió. —No te olvides que esa escoria mandó a asesinar a mi padre y que me forzó a hacer algo imperdonable.
Las lágrimas de frustración ya caían de los ojos de Jiang Cheng. Xichen estaba sorprendido por todas esas palabras. Realmente había esperado ser odiado por su omega, que se mantuviera a distancia y así, él podría ir tranquilo a riesgo de morir. Al final, su conexión era más profunda de lo que esperaba. No había podido mentirle, ocultarle su dolor. Eso volvía su conexión más mágica, deseaba realmente que todo pudiera tener un buen final, poder vivir cerca de su amado y de su cachorro.
—Perdóname por hacerte llorar, A-Cheng...—Murmuró
—Eres tan ridículo e idiota que piensas que me engañarás. Si vuelves a hacerme creer que te casarás con otro...
—Yo nunca dije algo así. —Replicó.
—Pero permitiste que pensara que estas interesado en Meng Yao. Yo...soy un traidor y ahora él es un héroe, pensé que tú ...
—¿Qué me querría casar con él? —Preguntó con paciencia.
—¿Por qué no?
—Porque no lo amo. Te amo a ti. —Le dio un pequeño beso en los labios y sonrío.
Jiang Cheng se estremeció. Había necesitado esas palabras.
—Es verdad que estoy dispuesto a protegerlo, sacarlo de ahí. —Comentó, aferrando a su omega de la cintura. — Tengo una gran deuda con él. Por ello, si pide asilo, tendrá un hogar en el Receso de las Nubes, además me encargaré que sus derechos en la secta Jin sean respetados. Es lo que merece como un héroe de guerra.
El omega aún tenía ciertas inseguridades, supo que era el mejor momento de disiparlas.
—¿Y si él quiere que lo compenses de otra manera? —Preguntó el omega con cautela.
—¿Has estado temiendo por ello?
—¿No te lo ha insinuado?
—No. Me pidió confiar en él y...—Suspiró. —Bien, quizás él tiene otros sentimientos por mí.
—¡Lo sabía! Todo esto lo hizo por ti.
—Y no sabes cuan culpable me siento por ello. Pero no solo lo hace por mí, también lo hace por Huaisang
—Huaisang...
—Es como su hermano. —Aclaró el alfa. — Así que, Huaisang es su principal prioridad en este mundo.
—No sabía que su lazo fuera tan fuerte. —Murmuró el omega.
Se apoyó en el pecho de su alfa mientras el otro acariciaba su melena. Le encantaban las caricias de Xichen, siempre lograban traerle paz.
—Sobre la misión, me aferré a que Mingjue no fuera el líder del ataque porque A-Yao me explicó, tanto mi tío como él están muy supervisados por Ruohan. Teme que Mingjue no pueda mantener la calma en una misión de infiltración, y si por algún motivo Ruohan sabe que está vivo, lo mataría de inmediato. —Explicó Xichen.
—Entiendo...—Se obligó a decir Jaign Cheng—Bien, entonces apoyo tu idea de rescatarlo. Xue Yang puede encargarse de ello. Wen Qing y tú pueden pelear. En cuanto termine mi misión me les uniré. Intenta que tu tío también se vaya. Escríbele a ese sujeto para que estén listos para la huida.
Subió su rostro hacia su marido. Al instante recibió un beso del otro.
—Gracias, A-Cheng. —Dijo Xichen.
—¿Realmente no te casarás con él? —Volvió a preguntar Jiang Cheng.
—No.—A Xichen le divirtió como esos labios se fruncían. Su omega realmente estaba celoso.
—¿Incluso si él te lo pide como compensación? —Le cuestionó.
—No. Casarme con él no será una compensación porque lo haré infeliz. Nunca podría cumplirle como marido. —Susurró en el oído de su omega, mientras acariciaba su cintura.
Jiang Cheng sintió un estremecimiento recorrerle cuando esa voz grave acarició su cuello. Podía sentir como la actitud del alfa había cambiado ligeramente. Las manos de Xichen ya no solo lo sostenían, sino que comenzaban a acariciarlo con atrevimiento.
—¡Lan Xichen, más te vale que cumplas tu palabra! Si me estas mintiendo...—Advirtió.
—Serás mi único omega y esposo, ya te lo había dicho.
Sus bocas se encontraron. Rápidamente el beso pasó de ser suave y tímido a ser voraz, parecía que Xichen quería devorar al omega.
—Mi omega...—Susurró Xichen. —Eres mi omega...solo mío. —Gruñó, acalorado, extasiado por poder olfatear las feromonas tan receptivas de su omega.
Jiang Cheng se dirigió al cuello de Xichen. Los omegas no podían marcar para enlazarse, pero quería dejar la marca de sus dientes en la piel blanca de Xichen. Así lo hizo, sacándole un quejido entre dolor y placer.
—Eres mi alfa, solo mío. —Anunció Jiang Cheng viendo con orgullo la marca roja de sus dientes en la piel de jade de su alfa.
—Acepto esa marca. Ahora soy un alfa marcado por su omega. —Declaró Xichen.
Xichen ladeo el cuello, sintió como la lengua de Jiang Cheng lamía la herida. La sensación le provocó agradables olas de placer. Si no sintiera que aun la energía de Jiang Cheng era débil ya lo habría tumbado contra la hierba para hacerlo suyo.
De momento, pudieron satisfacer sus deseos solo con besos y caricias. Luego, simplemente se quedaron abrazados durante un largo tiempo. Sabían que debían regresar al campamento, así que comenzaron a moverse con lentitud.
—A-Cheng, sobre el maestro Wei...—Inició Xichen.
—Umm al menos ya lo llamas de nuevo con cortesía. Es un avance, supongo
Xichen dejó un beso en la mejilla de su esposo.
—De hecho, el cultivo demoniaco del maestro Wei es culpa de Wen Ruohan también...—Suspiró—Mi tío me dijo ...que el culpable de todas las desgracias es solo Wen Ruohan porque es la cabeza detrás de todo, es quien nos atacó, quien buscó nuestra ruina por su enfermiza obsesión hacia mi tío.
Jiang Cheng asintió, llevó su mano al rostro de su alfa y lo acarició.
—Wei Ying lo hizo para protegernos, para poder vencer a Wen Xu en poco tiempo. —Comentó el omega.
—Lo entiendo. —Susurró Xichen con cierta dificultad.
—Supongo que, de todas maneras, no es fácil para ti tolerarlo. —Replicó el omega.
—No. Pero, el líder Jin tiene razón, no ganaremos sin su cultivo. Nadie más podrá arrebatarle el control de cadáveres feroces. —Tuvo que admitir Xichen. — A-Yao envió a Xue Yang por esa razón, dudo que él desconozca el cultivo demoniaco, así que lo considera dentro del plan.
—Meng Yao una persona astuta y temible.
Xichen acarició la mejilla de su esposo.
—No lo mal juzgues. Siento que tu resentimiento es por la relación que tuvimos en el pasado, pero déjala atrás. No hay nadie que pueda opacar tu lugar en mi corazón.
El omega controló sus celos. Xichen lo tenía en sus brazos, se había refugiado en él confiándole su vida en un momento inestable, incluso por sobre su gente y su hermano a pesar de la traición que cometió, así que no podía dudar de su amor.
—Entonces, no lo vuelvas a hacer, Xichen, no vuelvas a ocultarme o intentar hacerme sentir que no sientes nada por mí de nuevo
Xichen acercó su frente y su nariz con la de su esposo. Asintió.
—Tengo miedo de perderte. No podré soportarlo. —Murmuró.
—¿Y crees que yo podría vivir como si nada si a ti te pasa algo? Xichen, debes de vivir, recuérdalo, no puedes dejarnos. Jingyi te necesita y yo...yo te amo.
El alfa le atrajo del mentón y volvió a besarlo.
—Entonces, supongo que es mejor no decirle nada a Wei Ying por el momento. —Comentó Jiang Cheng luego del beso.
—Mi tío recomendó que no. Estará al lado de mi hermano, quien sabe controlar su cultivo, y lejos de Wen Ruohan, pues su pelea por los cadáveres feroces será a distancia. Es mejor que mantenga su equilibrio. Me temo que si el maestro Wei se entera...
—Lo sé. Definitivamente perderá el control.
—Venceré a Ruohan, si todos cumplen su papel, lo lograré...vengaré la muerte de todos, A-Cheng, también la muerte de los padres del maestro Wei.
Jiang Cheng juntó su frente.
—Lo haremos, juntos. Cuando termine mi parte iré a tu lado. —Le recordó Jiang Cheng.
—Quisiera que no te acerques al peligro...
—Soy un cultivador y soy tu esposo, así que no intentes convencerme de lo contrario
Xichen soltó un largo suspiro de resignación. Atrajo a Jiang Cheng a sus brazos y lo besó con dulzura. Luego, se puso de pie y lo sostuvo en sus brazos.
—Regresemos, A-Cheng.
El omega se removió inquieto al saber que se refería a volver al campamento.
—¿Así? —Preguntó dudoso.
—Ya no importa, quiero pasar el mayor tiempo contigo. —Respondió Xichen.
—No hables como si...
No quería que sonase como una despedida. A Jiang Cheng le aterraba siquiera imaginar en perder a Xichen.
—Estaremos separados durante la misión, así que quiero tenerte cerca mientras tanto. Además, estás débil por haberme dado tu energía la noche anterior. —Explicó.
Solo pudo asentir, su corazón se aceleró. Xichen caminó apacible aun sosteniendo al omega entre sus brazos. Jiang Cheng solo pudo aferrarse a la nuca de su alfa y prepararse para las miradas de los demás.
Cuando llegaron, la mayoría estaba en lo suyo, pero en cuento los divisaban se ponían cuchichear. Jin Zixuan los mandó a callar y a avocarse en los planes.
Por supuesto, eso no sería todo. Lan Xichen sabía que sería castigado, si sobrevivía, por caer en la hermosura de su omega, pero realmente deseaba permanecer el mayor tiempo posible al lado de su omega. Enfrentaría al asesino de su madre, al genocida que destruyó su secta, que destruyó familias, incluso a la de Wei Wuxian, realmente no podía prevenir el resultado de su enfrentamiento. Así que, si moría, al menos quería llevarse de recuerdo sus últimos momentos junto a Jiang Cheng.
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Los acuerdos fueron sellados entre los miembros de la Alianza, cada uno conocía su lugar durante el ataque. Al día siguiente, el primer grupo que se infiltraría, dirigido por Jiang Cheng sería transportado a través de los portales creados por Wei Ying. Así que, en ese momento, Wanji y Wei Ying querían pasar un tiempo juntos.
Ellos no dijeron nada al ver a sus hermanos ingresar a la misma carpa; de hecho, se tomaron como tarea el callar a los discípulos que comenzaban a comentar al respecto. Aunque todos tenía la confianza de la victoria, realmente nadie conocía cuantas perdidas habría, por ello, los murmullos se silenciaron rápidamente. Muchos discípulos también tenían personas que amaban, por ello, simplemente se concentraron en escribir cartas o mensajes a esas personas.
En ese momento, al fin, Wei Ying y Lan Zhan podían tener un respiro. Aunque su misión sería conjunta, no tendrían paz en adelante. Una serie de combates les esperaba, un largo camino hasta sitiar Sin Noche. Seguramente, Wen Ruohan soltaría a sus últimos batallones de cultivadores que aún le eran fieles. Serían pocos, pero con convicciones claras. Los cuales podrían ser más difíciles de vencer.
Intentando encontrar un espacio para ambos, caminaron juntos, tomados de la mano. La noche era profunda, pero la luz de la luna llena lograba iluminar su paso. Querían estar lejos de las críticas, las miradas y más. Al menos esa noche, podía ser para ambos. Una vez en una pequeña pendiente, Wei Ying y Lan Zhan se dejaron caer, podían observar el campamento hacia abajo. Inusualmente, el silencio fue roto por Lan Zhan, quien tenía algo en su corazón torturándolo.
—Wei Ying, lo que dijiste a nuestros hermanos cuando conversábamos en el hospedaje...—Lan Zhan tenía que obligarse a decirlo. —No es necesario que te obligues a hacerlo. Voy a desertar de mi secta porque quiero estar cerca de A-Yuan y quiero tener la libertad para cortejarte, pero no quiero obligarte a casarte conmigo. —Finalmente lo soltó. Por supuesto, Lan Zhan quería casarse con Wei Ying, pero no deseaba que el omega se sintiera obligado a hacerlo.
Habían sido muchas palabras. Wei Ying estaba asombrado, pero también conmovido. Podía ver que decir aquello le dolía al alfa.
—¿Cómo sería un sacrificio casarme con el hombre más bello del mundo? —Comentó, detallando el rostro del alfa.
Lan Zhan sintió un calorcillo crecer por todo su cuerpo, depositándose en el lóbulo de las orejas. Estaba enamorado de Wei Ying, pero, para él, el matrimonio con él no debía de darse solo por salvar el honor. Al menos, ahora ya no lo quería de ese modo.
—No quiero que te cases por compromiso. —Replicó. — Antes, cometí el error de intentar obligarte a casarte conmigo porque hicimos eso...—Comentó avergonzado de sus propias acciones. — pero, ahora entiendo que tú eres un espíritu libre. Para ti el matrimonio no tiene relevancia, son más como cadenas. No quiero que te ahogues a mi lado. —Resolvió.
Las palabras y acciones siempre terminaban cobrándose. Wei Ying supo que ahora solo podía continuar siendo sincero, pero que, le tomaría un largo camino el que Lan Zhan comprendiera que no era un sacrificio casarse con él.
—Era así como pensaba. —Comentó. — Y es como pienso acerca del matrimonio, pero no del matrimonio contigo. Al menos, ahora no.
Wei Ying tomó la mano de Lan Zhan y entrelazó sus dedos. El alfa sonrío suavemente al contacto. En su corazón, sabía que no le era indiferente a Wei Ying, pero todavía no había escuchado esas palabras que le aseguraban que su amor le pertenecía. Aun así, no estaba dispuesto a abandonar ese camino, porque estaba seguro que solo podría amar a Wei Ying.
—Ahora entiendo. —Continuó el omega. —Cuando veo a nuestros hermanos sufrir por no poder demostrar su amor públicamente, entiendo cuál es la importancia del matrimonio para ti. Simplemente, quieres que nadie tenga dudas de que nos pertenecemos mutuamente y que tenemos un hermoso cachorro al cual le brindaremos una familia, que todo el mundo nos reconozca como una familia. ¿No es así?
—Sí, pero...
El omega se acercó y le silenció con un pequeño beso fugaz. Río traviesamente.
—Lo siento, no pude contenerme.
Lan Zhan tampoco podía. Atrapó a Wei Ying en sus brazos y lo puso debajo de su cuerpo. Acercó su boca de nuevo, con devoción, cuidado, reteniendo sus impulsos más elementales. Cuando sus labios se tocaron, ambos temblaron. Esta era la primera vez que se besaban después de tanto tiempo. Era novedoso, diferente, apasionado, pero dulce. Querían grabarse el sabor del otro, su calor y su aroma.
—Espera, Lan Zhan. —Wei Ying estaba agitado, sus mejillas rebosaban de color. —Antes, no hicimos las cosas a tu modo. Yo ...después de la guerra, te daré mi confesión, no solo eso...realmente te demostraré mis sentimientos y que esta vez mis intenciones son serias.
El alfa se calmó. Era cierto, en su corazón, aún tenía miedo de ser rechazado, de no ser amado con la misma intensidad. Wei Ying notó eso y quería que aquello quedase claro para Lan Zhan.
—Te fallé antes, no te di el lugar que merecías. —Continuó el omega. — Ahora quiero hacerlo bien. Quiero tener claro mis sentimientos y darte una confesión adecuada, cortejarte y casarnos. Claro, ya tenemos un rabanito creciendo, así que empezaré ni bien salgamos victoriosos de la guerra. Sino, nuestro rabanito tendrá quince y aun seguiré cortejándote. —Bromeó.
Esas palabras caldeaban el pecho de Wanji.
—Yo soy el alfa, yo debería cortejarte...
El omega le dio un pequeño beso fugaz.
—¡Oh no! esta vez seré yo. Saldrás del Receso de las Nubes casado, se lo prometí a tu hermano.
Wanji río suavemente ante las poco convencionales ideas de su omega. Solo pudo asentir.
— Esperaré tu confesión y tu cortejo. —Accedió Lan Zhan.
Atrajo al conejito a sus brazos y se recostó. Wei Ying se acurrucó ahí, sus dedos acariciaban el cabello de Lan Zhan. Terminó dormido sobre el pecho del alfa mientras este solo acariciaba su cabeza con ternura. El alfa estaba ansioso por escuchar esa confesión que había esperado tanto tiempo.
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Habían pasado el día entero en la carpa de Jiang Cheng. Ambos esposos compartieron la comida juntos y atendieron a sus discípulos, como si fueran una familia. Los discípulos no comentaban nada, pero Jiang y Lan se miraban con animosidad una vez fuera de la mirada de sus líderes. Mientras tanto, los otros líderes de secta, cuando no estaban bajo la mirada de Zixuan, se dedicaban a criticar a los omegas de Yummeng, como incluso con acciones tan degradantes como la traición y el cultivo demoniaco lograban que dos alfas tan puros como Lan Xichen y Lan Wanji estuvieran a sus pies. Sin embargo, no podían hacer nada más hasta el momento porque necesitaban a los cuatro para poder ganar. Solo esperaban que cuando todo terminara esos dos omegas pagaran por sus acciones.
En todo el campamento durante el anochecer hubo calma, cada quién preocupado más de sí mismo y de quienes aman que de los líderes Jiang y Lan. Por lo cual, Xichen y Jiang Cheng pudieron dormir juntos. Entre las tinieblas solo se dieron besos, aunque la tentación de tocarse era grande. Solo que se sentían un poco tímidos al estar en el campamento militar, en cualquier momento podría surgir una emergencia.
Unas horas antes del amanecer, ambos ya estaban despiertos, deseando aprovechar sus últimas horas. Ambos se observaban, pues estaban recostados de lado. La mano de Xichen se deslizó por los mechones de cabello libre de su omega, como si quisiera grabarse la textura de estos.
—Hoy partiremos, A-Cheng. —Murmuró el alfa.
—Xichen, tienes que mantener tu autocontrol ¿entiendes? Espérame, llegaré a ti para ayudarte.
Los dedos del alfa se deslizaron por la mejilla del omega. Nuevamente, estaba fascinado por él. Solo asintió, se acercó a Jiang Cheng y le robó un pequeño beso que el omega respondió.
—Wanji y yo construiremos un nuevo salón para nuestros ancestros, especialmente para madre y padre, si vuelvo... quiero llevar a Jingyi a ti para saludarlos.
Ese sentimiento de culpa arrastró al omega.
—Jingyi está bien, yo...tus padres no tolerarían que aún me ames.—Murmuró.
—Ellos entenderían. Pero, si no regreso, A-Cheng....
—No digas eso
—Por favor, es importante.
—¡Debes de regresar! —Insistió Jiang Cheng. —Iré por ti...
Xichen le dejó un beso en la frente y le envolvió en sus brazos.
—Solo es una precaución...si no regreso, dejé una carta a Wanji, junto con la de mi tío. Donde explicamos que todo ha sido un plan de Ruohan y pido a cambio de mi sacrificio, que mi hermano sea el guardián de la secta hasta que haya un nuevo líder y...esto no se lo mencioné a mi hermano, también pido que por mi muerte Jingyi sea reconocido como parte de la familia Lan.
El corazón de Jiang Cheng se hundió. Sus dedos apretaron la túnica del alfa.
—No necesitas sacrificarte para eso. —Replicó de inmediato. — Venceremos a Ruohan y me ayudarás a criar a Jingyi, a los cachorros que me regalaste y...
El omega estaba sonrojado. Avergonzado, desvío la mirada.
—Quizás el día que pasamos juntos...tenga resultados—Murmuró Jiang Cheng.
Lan Xichen enterneció su mirada, sus dedos se deslizaron por el pecho del omega hasta llegar al vientre.
—Lo cierto es que...te busqué porque quería saber si realmente ya no me amabas. Quería tenerlo en cuenta para decidir si debería de prevenir cualquier embarazo—Murmuró Jiang Cheng.
El alfa suspiró, atrajo más a su omega.
—¿Qué has decidido? —Preguntó suavemente.
—Yo...no lo sé ¿qué piensas? ¿Qué pasaría si quedo preñado? —Preguntó.
Una sonrisa tierna se extendió por la boca de Xichen. Pero antes de que ese instinto paternal aflorara, levantó la mirada del omega, haciendo que sus ojos se encontraran.
—Me gustaría tener más cachorros contigo, es cierto...—Respondió. —Pero, es una decisión que solo tú puedes tomar. Sin embargo, si realmente quedas preñado yo cuidaré de nuestros cachorros. Mientras tú desees tenerlos, yo aceptaré todos los que me des.
Repartió pequeños besos por la frente de Jiang Cheng, emocionado con la idea de tener muchos cachorros con su amado. El omega aceptó los mimos, sonrío. Había tomado su decisión al respecto.
—¿Lo ves? Entonces, no puedes morir ahí, Lan Huan. —Le insistió.
Entonces, Lan Huan entendió. Acarició ese vientre plano que quizás pronto albergaría otro pequeño cachorro. Jiang Cheng le estaba dando una razón más para superarse a sí mismo y sobrevivir a esa guerra.
—Eso fue una gran técnica, A-Cheng.
—Más te vale volver o te buscaré en el inframundo. No pienso criar a otro pequeño revoltoso solo. Jingyi ya tendrá mis manos llenas...debes estar presente.
Xichen se permitió reír. Atrajo a su omega y le envolvió en sus brazos. Cerraron los ojos y comenzaron a deslizarse al mundo de los sueños para disfrutar de esas últimas horas.
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Con la llegada del mediodía, finalmente todos estaban en sus respectivos grupos. Para ese momento los talismanes de comunicación estaban listos. Estos se usaría entre todos los líderes de grupo para que así no hubiera interferencias innecesarias. Había llegado el momento de las despedidas, los dos grupos que se infiltrarían debían de esperar su turno correspondiente.
El primer grupo en partir sería el de Jiang Cheng, Wen Ning y los hermanos Nie. El cual se encargaría de liberar a los concubinos y a los familiares de los generales que prometían su apoyo. Así pues, Jiang Cheng y el resto de su grupo tomó su lugar. En medio de esa situación, solo pudo dedicar una última mirada a su esposo. Xichen apretaba levemente el mango de su espada para así contenerse de ir por su omega.
—A-Cheng, es momento. —Indicó Wei Ying con la matriz abierta.
Jiang Cheng, Wen Ning y los hermanos Nie cruzaron la barrera.
Tal y como se había planeado, fueron transportados hacia la cueva de la tortuga infernal, ubicada al Sur de Sin Noche. Según los planos que Meng Yao les había facilitado, existía una entrada secreta desde ese lugar. Tenían unas horas para descubrirla y poder colarse en las horas nocturnas de la secta Wen.
Mientras tanto, el equipo de Xichen, Xue Yang y Wen Qing también cruzó su propio portal. Estaban en el bosque este. Desde ahí estaban más cerca de la Residencia de Ruohan. Sin embargo, debían de esperar a que el grupo de Jiang Cheng avanzase y salvaguardara a los rescatados. Por lo que solo les quedó intentar mimetizarse entre la profundidad del bosque.
Con ambos grupos en sus posiciones, Wei Ying y Lan Zhan tomaron su lugar al lado de Jin Zixuan. Ellos serían el fuerte de ataque frontal, pero también la distracción para que toda la atención de Ruohan y sus fuerzas se centrara en ellos y no en los infiltrados.
—¡Todos, a sus espadas! — Ordenó Zixuan.
Los cientos de cultivadores subieron a estas. Pronto, se elevaron en el cielo, por encima de los árboles. Cuando avanzaron, formaron una ola completa que incluso cubrió al sol radiante, ennegreciendo el cielo. Ese sería el gran asalto, la batalla definitiva donde definirían la supremacía. Debía de significar la caída del sol por el bien de sus sueños y libertades, pero también podía significar el viaje sin retorno.
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Hola!!!!!!!!!!!! Ha pasado un tiempo creo yo. Creo que los que me siguen por IG saben más o menos que me mudé de habitación y creo que subestimé lo intenso y estresante que es. Estas dos semanas estuve ocupada con organizar mis cosas en la nueva habitación. Soy ansiosa, así que no puedo dejar todo desorganizado. De hecho, este capítulo debió salir este miércoles, pero bueno, al final dije más vale tarde que nunca. y aquí lo tenemos. Como ya tengo todo casi listo en mi nueva habitación, incluyendo mis muebles principales, pues creo que esta semana todo vuelve al calendario usual. Así que miércoles de actu de Betrayal Love!
Por otro lado, otra cosa que me tuvo ocupada, pero también feliz fue que el 1 de abril estrené mi primera novela original aquí en Wattpad. Les aseguro que si les gusta Betrayal Love, amarán esta novela. Es Boys love (obvio), omegaverse, drama palaciego (reyes, bailes de salón, traiciones, intrigas de corte) bélico. Ya van publicados siete capítulos, así que les invito a empezar a leerlo y crecer esta comunidad. Sus actualizaciones son viernes y domingo. (Bueno, la semana pasada hubo un desajuste por todo lo de la mundanza), pero esta semana volvemos de nuevo!!
Les dejo la portada oficial!!
Sinopsis: Ancel, príncipe heredero del reino de Whitehall, celebra su cumpleaños de mayoría de edad. Finalmente, tiene edad suficiente para ser cortejado por príncipes alfas, pero durante el baile no llega a sentir ninguna atracción especial. Pensando en alejarse de todos ellos, sale al jardín solo para ser atacado por un extraño alfa, al cual termina noqueando. Grande es su sorpresa al descubrir que se trata del heredero del imperio más grande Occidente. ¿Cómo llegó ahí y porqué parece estar herido?
Kenshiro es un príncipe alfa, heredero del Imperio Hannover, tiene claro sus objetivos y ha peleado en muchas batallas, pero la traición de sus hermanos, hijos de los concubinos de su padre, hace que tenga que luchar por su vida día con día. Cuando conoce a Ancel, toda su vida perfectamente estructurada podría tambalearse. Se supone que dos príncipes herederos no tiene permitido casarse ¿Qué sucederá con la atracción que sienten?
Nuevamente, les extiendo mi invitación para leerlo, está en mi perfil!!!
Ahora sí....volviendo con Betrayal Love!!!
Este capítulo es como la calma antes de la tormenta..no más digo...XD
¿Cómo creen que se desarrolle los planes?
¿Jiang Cheng logrará su misión?
¿Qué harán los hermanos Nie?
¿El grupo de Xichen podrá contra Ruohan?
¿Quieren leer el corteja de Wifi a Lanchita?
¿Realmente se nos viene otro bollito del xicheng?
¿Se esperaban que la verdad haya sido confesado por Qiren?
Creo que la mayoría pensaba que fue la guayaba, pero nop...nuestro Qiren decidió confesarlo todo porque piensa que puede morir en el proceso...¿qué creen que la guayaba y Qiren planeen?
Las misiones y batallas inician en el próximo capítulo!!!!!!!!!!!!wohooo
Si quieren estar pendiente de todos mis proyectos de escritura y mi canal, además de fangirlear y leer recomendaciones boys love, danmei y más les dejo mis redes y mi canal!!
Nos estamos leyendo pronto en mis otros proyectos y miércoles para otra actualización.
PD: Acabo de comprobar que se nos fue dos aniversarios, el año pasado cumplimos dos años en octubre y, este año cumpliré tres en esta historia!!! Nos puedo creerlo!! ¿Llegaremos a tres años o se termina antes de octubre? ¿Qué creen?