En medio de las tinieblas escuchaba murmullos, pasos agitados, una corriente de energía poderosa ingresar a su cuerpo. También sintió sus meridianos expandirse y llenarse del flujo de su energía. Deseo con todo su corazón ver a Xichen, sentir su abrazo, su aroma y oír sus palabras dulces. Su mente divagaba entre la conciencia y la inconsciencia. Recordó la plática con su madre y también las últimas chismosearías de la servidumbre a la cual no prestó atención en su momento.
"¿Es denigrante no?"
"Pero el joven maestro Wei también hará los mismo"
"No es lo mismo, el hermano Wei es un omega. Si como omegas no usamos nuestros encantos ¿para qué tenerlos?" "Pero, Lan Qiren se ha convertido en un concubino siendo un alfa"
"¿No te estarán engañando?" "El gran maestro Lan...es ya mayor..."
"El líder de secta Wen tiene gustos raros, dicen que lo visita mucho en su alcoba"
Ambas sirvientas hicieron un gesto de asco. En ese momento, Jiang Cheng las mandó a realizar sus labores. Eran sirvientes de su familia, pero a veces esas niñas no sabían cuando callarse. Si era cierto lo que mencionaban, si algún mayor Wen las descubría, lo pagarían caro. En ese momento no le había prestado atención porque no quería humillar más a la familia Lan, pero por algún motivo su mente le hizo recordarlo: "Wen Ruohan tiene un interés personal en Lan Qiren."
No pudo pensar más porque nuevamente sintió un golpe de energía golpear en su centro, en su vientre, chilló de dolor, era como si estuvieran removiendo todo en su interior. ¿Acaso estaban removiendo su núcleo? No, no se trataba de eso. Todo lo contrario, sentía sus meridianos más llenos que nunca. Su espíritu animal buscó en su interior ¿su bebé seguía ahí? Pero, antes de encontrarlo, perdió fuerza y se hundió en la oscuridad.
Despertó en su habitación. Sintió su mano tomada por una pequeña. A su lado, su hermana dormía sentada, solo apoyando la cabeza. Estaba fría. Por inercia su mano libre la llevó a su vientre.
—A-Cheng. —Susurró Yanli, despertando.
La muchacha había permanecido a su lado los dos días que Jiang Cheng había permanecido inconsciente.
—Lo perdí, ¿verdad?
—Aun no, joven líder Jiang. —Respondió una voz desde atrás de Yanli.
El joven observó. Era el derrite núcleos. Se veía ojeroso y enfermizo. Toda la fuerza que normalmente portentaba se había esfumado ¿cómo era posible?
—Aunque el sanador dice que será un embarazo de cuidado al menos en las próximas semanas. El bebé está débil por eso desbloquee su energía espiritual para que pueda nutrirlo. —Declaró. — Pero, no intente nada extraño. —Advirtió con tono amenazante, aunque el impacto era menor dado su aspecto.
Jiang Cheng, presionó un poco su mano en su vientre y analizó si era verdad. Ahí estaba, esa pequeña motita de energía aun destellando. Su bebé seguía ahí, aferrándose a la vida y absorbiendo su energía. Su espíritu felino estaba regocijándose pro sentir a su cachorro con él y su energía espiritual se arremolinaba protectoramente alrededor del cachorro. Estuvo a punto de sonreír, pero entonces recordó lo que significaba que el bebé siguiera ahí. Su mente aceleró. Este era su momento de obtener ventaja.
—Creo que quien no debe hacer nada extraño es usted y esa mujerzuela.
El derrite núcleos entrecerró los ojos. No esperando que el joven lo dedicara tanta fiereza.
—No darse cuenta que estaba preñado fue su culpa, su responsabilidad. Wen Ruohan es un hombre implacable ¿no? Seguramente, un castigo físico hacia usted no le importaría, pero acaba de darme la mitad de su energía espiritual solo para salvar a mi cachorro. Es porque seguramente aún tiene alguien a quien cuidar. Alguien por quien usted sacrificó su honor y se volvió un perro Wen. ¿No le parece que nos parecemos?
La expresión del Derrite Núcleos se hizo tensa. Jiang Cheng sentía su corazón acelerado. Era la primera vez que estaba instigando contra alguien y debía hacerlo bien o la vida de los tres, contando a su cachorro peligraría.
—Estoy seguro que sus órdenes fueron mantenernos con vida por qué Wen Ruohan no solo busca destruir a las sectas, sino que ellas mismas se rindan y complacerse humillándolas ¿Cómo haría ver Wen Ruohan a las demás sectas en la boda de mi hermano que somos sus perros si no estamos vivos? —Lo siguiente eran palabras basadas en un chisme, pero debía de arriesgarse. —Además, también somos una forma de tortura para la secta Lan. Y este niño es el heredero de Xichen, de la secta Lan ¿Qué mejor que usarlo para obtener la rendición de los Lan?
—Los Lan ya se rindieron. —Espetó el alfa.
—Xichen jamás se va a rendir y está vivo. Lan Qiren se entregó a Wen Ruohan ¿pero no le facilitaría ganarse su atención si tiene en su poder a este niño? Puede Lan Qiren me odie, pero jamás permitiría que a uno de sus descendientes le suceda algo, daría su vida, dignidad y todo lo que tenga a cambio.
Jiang Cheng juntó su energía espiritual en la palma de su mano, detuvo sus temblores.
—Mi madre una vez dijo que usted fue una persona de honor que cumplía su palabra. Así que quiero hacer un trato con usted.
Al nombre de su madre, Wen Zhuliao tenía una mirada diferente.
—Dime, heredero de la araña purpura.
—Usted aún no ha informado que este cachorro existe porque aún no es seguro que sobreviva. Quiero tener un embarazo tranquilo, así que no perturbará mi paz. Ni esa zorra tocará a mi hermana, discípulos o sirvientes hasta darlo a luz. Luego, podrá llevarse al niño y cobrar su recompensa con Wen Ruohan y podrá inventarse lo quesea. Yo apoyaré su mentira.
La respiración del alfa se hizo compleja.
—O, mataré al niño ahora mismo. —Declaró Jiang Cheng, mostrando firmeza y ni una pizca de piedad por su cachorro. — No puede sellar mi núcleo porque si no lo perderé y su amo lo castigará por ello. Tampoco puede permitirse que lo mate ahora porque con este niño piensa ganar muchos puntos a favor para pedirle una recompensa a Wen Ruohan. ¿Verdad? Vio esa oportunidad al darse cuenta que estaba preñado, por eso salvó nuestras vidas, aunque le costara drenarse de energía.
El otro alfa gruño. Jiang Cheng no habría tenido el valor de enfrentarlo así de no ser porque era un momento desesperado. Reprimió sus miedos, controló sus feromonas para que su aroma transmitiera la misma ferocidad de sus palabras. Ya no tenía a nadie que lo protegiera, más bien tenía personas que proteger.
—Bien, pero no será hasta que nazca. Voy a anunciárselo a mi amo cuando cumpla los ocho meses. Calculo que para ese momento su embarazo se volverá estable. Lo toma o lo deja.
—De acuerdo, pero quiero que me traiga a esa mujerzuela ahora.
Wen Zuliao salió de la habitación y en poco tiempo trajo a la mujer. Ella temblaba entre frustración y miedo. Había estado desesperada al darse cuenta que era responsable de la posible muerte de un rehén clave para Wen Ruohan. No importaba si era la favorita de Wen Chao, a Wen Ruohan no le agradaban los errores. Incluso siendo favorecida por su hijo, él la mataría por arruinarle los planes.
—A ver, mujerzuela. —Llamó Jiang Cheng. La observó de arriba abajo y la asustó con su aroma de omega dominante.
—Como te atreves. — Replicó ella poco convencida.
—¿Cómo me atrevo? Es simple, porque yo y mi hermana somos hijos de una familia noble, somos cultivadores, somos omegas puros y tú eres una simple criada que se tuvo que revolcar con Wen Chao para ascender. No representas ningún poder, Wen Ruohan te eliminará sin pensárselo. Eres un insecto que casi comete un grave error ¿Piensas que puede suceder lo mismo con nosotros? Llevo al heredero de la secta Lan en mí, incluso alguien tan estúpida como tú puede saber lo que significa.
La mujer sabía perfectamente eso y más. También sabía que Wen Xu estaba locamente obsesionado con Wei WuXian y ella sabía que por lujuria los alfas podían hacer lo que sea. Si Wei Wuxian le pide a Wen Xu que la elimine a cambio de complacerlo en la cama, Wen Xu también la eliminaría sin dudarlo y sin importarle que fuera amante de su hermano. Wen Chao de todas maneras no era el hijo heredero. De hecho, en un principio ella intentó seducir a Wen Xu, pero nunca funcionó, a él no le gustaban demasiado las mujeres beta, prefería a los omegas. Y, por otro lado, estaba el hecho de que sabía que Wen Ruohan estaba enfermizamente obsesionado con el gran maestro Qiren quien, al parecer, no le complacía, por lo que de tener en su poder a su sobrino nieto, seguramente el maestro Qiren decidiera complacerlo de buena gana. Y ella casi arruina esa posibilidad, es arma que Wen Ruohan usaría para obtener lo que desea de los Lan.
—Te callarás, dejarás de fastidiar a mi hermana y a mi gente y no diré nada sobre tu incompetencia. ¿Entiendes? —Ordenó Jiang Cheng. — Hemos acordado que me darán tranquilidad en los siguientes meses. Si viene Wen Chao, te encargarás de mantenerlo alejado de mí y mi gente. Ya sabes cómo hacerlo, pero esfuérzate más para ello.
La mujer apretaba la falda de su hanfu, furiosa. Se había sentido como reina de Muelle de Loto y ahora volvía a ser tratada con desprecio.
Jiang Cheng apretó la mano de su hermana y le señaló con la cabeza hacia la dirección de la beta. Yanli jamás había lastimado a un sirviente ni a nadie en general. Pero, llenándose de la ira y pánico que tuvo al ver a su hermano desangrándose. Juntó toda su fuerza en su palma y depositó una cachetada sonora en la mejilla izquierda de la mujer, que la tumbó al suelo.
—Señorita Wang ¿entendió lo que mi hermano dijo? —Cuestionó Yanli aún con la mano alzada, siendo elegante, fuerte y educada a la vez.
—Sí, señorita Jiang, joven líder Jiang. —Se arrodilló y les dedicó sendas venias.
Ambos miembros de la secta Wen se dieron la vuelta para marcharse.
—Wen Zuliao, pedirás al consejo que me permitan visitar a mi madre junto a mi hermana al menos una vez por semana.
—Bien, joven líder Jiang.
Esta vez, Wen Zuliao y Wang salieron de la habitación. Los hermanos Jiang se quedaron en silencio hasta que sintieron sus presencias lejanas.
Jiang Cheng se desplomó en su lecho, su corazón latía agitado. No sabía cómo saco tantas conclusiones rápidas y poder usar a los Lan nuevamente como moneda de cambio. Pero, era por un buen fin. Al menos podría tener un poco de tiempo para armar un plan más efectivo. Tocó su vientre y sonrió con un poco de esperanza. Aunque Xichen nunca le perdonara, al menos tenía un poco de él consigo. Ya que el destino le había dado otra oportunidad con su bebé se esforzaría por protegerlo, aunque tuviera que volverse frío y desalmado.
—A-Cheng, no sé cómo ...pero estoy de tu lado. Haré lo que sea por cuidar de ti y de mi sobrino.
El omega abrazó a su hermana y el contacto fue devuelto, ambos se apretaron necesitando brindarse fortaleza mutua. Vivirían con la amenaza constante, pero estaban decididos a aferrarse a la vida y cuidar del pequeño cachorro que crecía dentro de Jiang Cheng.
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Ningún día, el líder Wen había dejado de llamarle para tocar el guqin. Parecía que siempre al mediodía intentaba almorzar con Lan Qiren, pero salía de ahí amargado. No necesitó mucho tiempo para ganarse la confianza de un buen grupo de sirvientes. Así que estos le contaban los chismes que se transmitían de boca en boca. Ya tenía la perspectiva completa de lo que sucedía entre Wen Ruohan y Lan Qiren y aquello iba muy de acuerdo con su plan. Por otro lado, también se enteró que Wei Wuxian permanecía en la residencia de Wen Xu, pero había recibido la visita regular de los sanadores principales de la secta, los hermanos Wen Ning y Wen Qing. Almacenó esa información con cuidado, analizándola bajo muchas posibilidades. Había investigado un poco sobre la ascendencia de Wei Ying, pero necesitaba saber más. Además, había entablado una relación interesante con alguien que parecía invisible ante todos. Todo estaba ocupando su lugar y solo faltaba calcular sus movimientos adecuadamente.
Esa noche fue llamado a la residencia privada de Wen Ruohan a tocar para él. Quedó impresionado de lo inmensa que era. Dentro, el hombre se encontraba en un sillón en la salita principal. Tenía puesto una túnica ligera y el cabello suelto. Su pecho musculoso se dejaba entrever. Se sonrojó levemente, el cuerpo de aquel hombre, aunque mayor, era realmente atractivo. Sabía lo que ocurriría y al menos estar frente a un hombre guapo era menos problemático.
—Empieza, toca Claridad. —Ordenó el alfa.
Para ese momento se había preparado mentalmente. Gustarle a alguien que vivía obsesionado por otro durante tantos años no era fácil. Meng Yao observó la mirada penetrante del alfa. Continuó tocando la técnica que aprendió de Su She. Realmente sus esfuerzos seduciendo a SuShe para aprender todo de él habían valido la pena por completo.
—No está mal. —Murmuró el alfa.
—Me halaga mi señor.
—Ahora usa tu energía espiritual para ayudarme a equilibrar mi energía.
Meng Yao sabía que había una técnica similar para desequilibrar, pero Ruohan conocía muy bien las técnicas Lan por su obsesión a Lan Qiren así que no podría confundirlo. No por ahora, al menos. Era interesante, Wen Ruohan se había pasado la vida buscando reemplazos de Lan Qiren. Incluso unos prostitutos de burdel por saber algunas canciones nativas de Gusu fueron llevados a su harem. También se llevó a dos jóvenes hijos de un mercader en un pueblo cercano a Caiyi, solo por tener el aspecto de erudito, ambos alfas. Por supuesto, todos estos eran descartados luego de algunas noches, así que él no podía simplemente representar un reemplazo de Lan Qiren, debía de ocupar un lugar propio en la vida de Wen Ruohan para no ser descartado luego de saciar su lujuria. Se avocó a tocar largamente, usando su energía espiritual hasta que se agotó y terminó exhalando agitado. Wen Ruohan abrió los ojos, detallando a ese chico. Despidió a todos los sirvientes dejándolos a solas.
—Eres bastante talentoso. ¿Cómo aprendiste técnicas secretas?
Meng Yao sonrió con orgullo
—Me las enseñó un discípulo de la secta Lan. —Confesó.
—¿Lo sedujiste?
El menor se sonrojó, pero sonrió.
—Mi señor, solo pensé que podría ayudar a mi amo con la técnica. Se lo pedí a un discípulo de la secta Lan, soy un omega, sabe que a veces no podemos controlar nuestras feromonas
—Los omegas son seres manipuladores por naturaleza. —Susurró Ruohan. —Pueden corromper el alma de un alfa si se lo proponen.
—Discúlpenme, señor.
—No hay nada que decir, es su poder, así como los alfas tiene la fuerza física y la voz de mando, ustedes pueden destruir el corazón de un alfa si lo desean. ¿Acaso no tomaste eso en consideración para destruir la secta Lan por medio del consorte Lan? Realmente disfruté el espectáculo de como cayeron. Me imagino al joven líder sufriendo por el abandono.
—Si hice a mi señor, feliz, entonces estoy complacido.
Meng Yao bajó más la cabeza. De pronto, su mentón fue llevado hacia arriba y los labios demandantes del alfa intentaban abrir sus labios. Le permitió ingresar y se aferró a él. Le levantó en brazos y se dejó hacer, afirmándose más a él. Cerró su mente e instintos que solo demandaban por Mingjue. Se centró en dejarse llevar por el placer de la carne. Al final de cuentas, Wen Ruohan era un alfa bastante atractivo y con una presencia dominante que hacía temblar las piernas de cualquiera.
Fue dejado en el lecho y pronto sintió como sus ropas eran abiertas, quedando totalmente desnudo para él. Los toques por todo su cuerpo fueron demandantes, pero placenteros. Wen Ruohan tenía un harem de más de cien bellezas, y demostró esa gran técnica durante toda la noche que estuvieron juntos.
Al amanecer, vio su espalda desnuda. Se levantó, cubriéndose rápidamente, arrodillándose al instante.
—Mi señor, disculpe por quedarme dormido en su lecho. Soy solo un sirviente.
Wen Ruohan se levantó, en su aroma transmitía satisfacción.
—No importa, de todas maneras, desde hoy además de mi asistente de cámara eres mi concubino, asistente menor Meng Yao.
Y el juego recién iniciaba. Había logrado más de lo que se propuso en una sola noche. Meng Yao sabía que era hermoso y mostrarle su naturaleza de zorro mientras intimaban hizo que la fascinación del alfa creciera. La naturaleza cazadora de un gran alfa como Wen Ruohan era dominar y si sentía que dominaba a una criatura extraordinaria, su ego se inflamaría. Y, no solo eso, era un alfa con el corazón roto por el desprecio de su amor de toda la vida. Sin embargo, Meng Yao sabía que debía de tener cuidado. Wen Ruohan era una presa mucho más grande para él solo.
Agachó la cabeza hasta sentir que su frente rozaba el suelo.
—Es más de lo que merezco, mi señor.
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El enorme salón del trono donde Wen Ruohan se sentaba a escuchar las peticiones de todos los miembros de su secta a impartir ordenes era enorme, con un techo anormalmente alto, todo en gris, un trono elevado desde donde Ruohan parecía un dios furioso, listo para mandarte a castigar. Si fuera poco, el ambiente siempre se encontraba sobre cargado de las feromonas del alfa. Su aroma se expandía y siempre exigía la rendición de todos los presentes. Ese día no estaba solo, Meng Yao estaba a su lado, la gloria que solo unos cuentos miembros de su confianza tenían, entre los cuales habían estado Xue Yang, Wen Zhuliao, pero ellos solo porque funcionaban de guardaespaldas. Mientras que ninguno de sus consortes, concubinos o amantes había podido lograrlo. Unas horas antes, Wen Qing había pedido una audiencia con él para demandar la custodia de un omega.
Wen Ruohan estaba sorprendido de que su sobrina se arriesgara para hacer tal pedido. Ella que nunca había estado interesada en ningún ser humano y se había dedicado a su estudio, trabajo y a cultivarse. Cuando la muchacha empezó a hablar le dio gracia su valentía, así que le permitió continuar. Además, era cierto lo que alegaba. La experiencia de perder a Qiren por culpa de una omega le había dejado claro que esos seres eran manipuladores, por lo cual existía una ley en su secta por sobre otras: un omega reclamado no podía ser tomado por otro alfa. El reclamo podía ser la mordida, otorgarle un título al omega o preñarlo.
Y, entonces, escuchó el nombre de "Wei Wuxian". La razón por la que le prohibió a su hijo tomar al omega antes del matrimonio era solo una consideración para su A-Ren y también para cuidar la imagen de sus nietos en el futuro. Sabía que aquel chico era poderoso, pensó que su hijo lograría engendrar a través de él y darle nietos adecuados. Lo cierto era que no tenía claro si Wei Ying era un omega puro o no, se decía que sí y su aroma parecía mostrarlo, eso limpiaría y reduciría la posibilidad de que sus nietos fueran betas. Aunque su hijo mayor era un alfa, por sus venas corría la sangre débil de los betas, la cual le encantaría exterminar.
Tenía envidia de su hermano, el cual dejó dos alfas puros de hijos. Esa era el motivo de porqué mantenía a Wen Ning y Wen Qing vivos, esperaba apropiarse de alguno de sus hijos puros. Pero hasta el momento ninguno había mostrado atención por omega que propusieran, había planeado pactar un matrimonio para ellos pronto.
Luego de escuchar a su sobrina mandó a llamar a Wen Xu, Wen Ning y a Wei Wuxian. Lo que ocurriría sería interesante. Realmente ese chico era digno hijo de Cangse Sanren, capaz de volver locos a todos los alfas a su alrededor. No importaba qué clase de alfa fuera, incluso alfas tan puros y rectos como su A-Ren caían a sus pies o alfas tan dulces como su sobrino Wen Ning o alfas temibles como su hijo mayor.
Al ser convocado, Wei Ying partió desde su residencia en el palacio de Wen Xu hasta el salón principal. Al llegar se dio cuenta que ya todos estaban presentes. Se convirtió en una de las caminatas más pesadas de su vida, era como estar caminando hacia el patíbulo, lo cual podría resultar cierto. Notó adelante a Wen Xu, su aroma era pesado, denotando su rabia y celos. Sentando en el gran trono de la secta, estaba Wen Ruohan observando todo con curiosidad. A su lado, casi como una serpiente estaba Meng Yao.
—Mi señor. —Saludó formalmente, queriéndose morder los labios. Lo primero era lo primero.
Wen Ning se puso a su lado de inmediato, también inclinándose.
Escucharon un gruñido provenir de Wen Xu. Había estado previniendo que palabras usar, qué comportamiento adoptar, como hacer el pedido a Wen Ruohan. Wen Qing mencionó la ley que el propio Wen Ruohan había establecido, la cual había respetado inclusive él mismo. Sin embargo, siempre podría no hacer caso y favorecer a su hijo. Sin embargo, también analizaron que Wen Xu y Wen Ruohan no tenían una relación saludable. Wen Ruohan veía en su hijo un competidor, un rival, no un heredero.
—Wen Qing me acaba de informar que estás preñado, Wei Wuxian. Y ahora veo a mi sobrino arrodillado a tu lado ¿Qué estás jugando?
Su presencia, su voz era destructiva. Wei Ying debía de concentrarse o no lo lograría.
—Mi señor, yo no sabía que estaba preñado. Acepté casarme y complacer a su heredero por el bien de la secta Jiang y la paz, pero a quien verdaderamente amo es a Wen Ning. Tuvimos una relación cando estudió en el Receso de las Nubes, pero yo no me sentía a su altura para ser su consorte. No mencioné mi relación con él porque no quería causarle problemas con su familia. A pesar de eso, ahora tengo a su cachorro esperando, por favor, permita que la alianza entre sectas se dé a través de nuestro matrimonio.
Iba a irse a lo profundo del inframundo por ello. Realmente estaba decidido de que, si Wen Ning salía afectado, él pagaría las mismas consecuencias. Giró su vista hacia Wen Ning y levantó su mano, Wen Ning la tomó suavemente. Debían de reflejar amor, pasión desesperada de adolescentes que no medían las consecuencias y que solo deseaban ingenuamente disfrutar de este.
—Tío, se lo suplico, no culpe a mi omega...Yo fui cobarde e impaciente. Debí haber hecho pública nuestra relación. Cuando mi primo lo trajo como su prometido, quise decir la verdad, pero no quería causar conflictos con ustedes, sobre con usted, tío, que nos ha cuidado como sus hijos. Por favor, solo le pido casarnos y criar a nuestro cachorro juntos.
En ese instante, Wen Xu también se arrodilló para hablar ante su padre. Wei Wuxian no se giró a verlo. Ya era suficiente con sentir su pesada mirada, su aroma y su aura de indignación y reclamo. Incluso el joven alfa heredero debía de pedir permiso ante su padre y líder para ese tipo de disputas. Por eso, solo podían acudir a Wen Ruohan, porque si Wen Xu se enteraba primero los asesinaría.
—Wei Wuxian ya ha jurado ser mi omega, padre—Indicó Wen Xu.
—Pero, hijo, está preñado de otro ¿vas a tomar a un omega preñado de otro? Pronto apestará al alfa que le hizo el crio. —Respondió Wen Ruohan, entretenido por el drama juvenil. Su sobrino menor siempre había sido miedoso, escondido detrás de su hermana mayor, la valiente Wen Qing. Ella era insuperable en sanción y les había salvado la vida a todos en la secta Wen innumerables de veces. Se había hecho indispensable para él. También reconocía los talentos de Wen Ning, aunque por esa timidez nunca los había aprovechado. No esperó que por un omega cobrara valor y fuera capaz de enfrentarlo. Esa era la misma magia que hechizó a Qiren. ¿Acaso Wei Wuxian era el omega destino de Wen Ning? Sintió ganas de reír con ironía.
A su lado, Meng Yao observaba todo el despliegue. Se apretó a su lado al sentir el fuerte aroma de su hijo mayor. Wen Ruohan se fastidió de sentir que Wen Xu intentaba demostrar ser el alfa más fuerte ahí. Ciertamente, no confiaba en Wen Xu, aunque fuera su hijo, sentía que estaba cobrando demasiada autoridad.
—Entonces, debe abortar ahora. Y entonces tendrá a mis hijos. —Reclamó Wen Xu.
—Tío, por favor, es mi cachorro, sus sobrinos-nietos, su sangre. Usted siempre ha sido piadoso con nosotros.
Wen Ruohan expandió más sus feromonas presionando a los tres jóvenes frente a él. Pensó que Wen Ning huiría rápidamente, pero resitúa, igual que el omega, ambos tomados de la mano. Eso le recordó a su amado con Cangse, juntos tomados de la mano. Lan Qiren nunca lo tuvo claro, pero Wen Ruohan sabía que Cangse Sanren era efectivamente la omega destino de Lan Qiren. Era ese maldito lazo lo que logró que Qiren lo olvidase fácilmente.
—¡Y así me lo pagas, quitándole el omega a tu primo! —Declaró Wen Ruohan con enojo, no por la situación sino perdido en el recuerdo.
La mano delicada de Meng Yao le jaló una manga con timidez. Sus propias feromonas estaban afectándolo, así que se controló.
"Mi señor, tranquilícese, por favor. Es una pequeña afrenta entre alfas por un omega"
Era cierto, debía de verlo todo desde una perspectiva diferente ¿qué le convenía a él?
Wen Qing se puso al lado de su hermano y también se inclinó. Su sobrina, la hija que le hubiera encantado tener, una digna heredera de fuego, de linaje puro, inteligente, fuerte y peligrosa. Además, la muchacha no había hecho ningún intento de arrebatarle el poder que le correspondía. Aunque aquello podía ser un engaño, ya que no tenía claro si ella sabía cómo murió su padre.
—Tío, fue Wen Xu quién le quitó el omega a mi hermano. Desde que nos enviaste a la asamblea Lan, ellos han mantenido una relación. Al principio pensé que A Ning solo se divertía como cualquier alfa. Sabes que tiene problemas para sociabilizar así que lo permití, pero no esperé que fuera en serio con un hijo de sirviente y lo preñara. —Habló con frialdad. — Sin embargo, he revisado su árbol genealógico y Wei WuXian es un omega de sangre pura, así que mi sobrino será un alfa u omega de sangre pura y del elemento fuego. Puede ser una pequeña mancha que su padre sea sirviente, pero Cangse era discípula de una inmortal, la única capaz de usar técnicas poderosas.
Ciertamente, los descendientes de Cangse serían poderosos y aunque Wen Ning no fuera especialmente fuerte, su padre lo era.
—¿Cómo puedo saber que es cierto? Aun no hueles a mi sobrino—Comentó Wen Ruohan.
—Es por el sello de Baoshan Sanren, mi señor. —Respondió Wei Wuxian—Mi madre y todos los discípulos de Baoshan Sanren cuando bajan tiene un sello que les impide ser controlados por las feromonas, así que nunca sabremos quién es nuestro alfa u omega destino. Yo lo practiqué desde muy joven. Aun así, me enamoré de A-Ning y por eso, le suplico me deje estar a su lado.
—Tío, tengo testigos. —Intervino la alfa. — Los ancianos Wen que enviaste con nosotros cuando llevamos los términos de rendición a la secta Lan, ellos lo pudieron notar
Wen Ruohan mandó a llamar a los ancianos. Ellos, temblorosos, afirmaron haber visto en una situación comprometedora a Wen Ning y Wei Ying. Eso comprobaba que ya habían mantenido una relación, eso volvía a Wei Ying el omega de Wen Ning.
Luego de la declaración un silencio se extendió. Solo se escuchaba el castañeo de los dientes de Wen Xu lleno de furia.
—A-Yao, tú fuiste el asistente del joven maestro Nie ¿Pudiste notar cercanía entre mi sobrino y este joven?
Su joven amante posó su mano sobre sus brazos. En ese contacto, Wen Ruohan pudo sentir la energía estable de Meng Yao.
—Así es mi señor. —Declaró A-Yao. — Realmente no me sorprende. Siempre se le veía juntos, se apartaban y pasaban toda la tarde juntos. De hecho, una vez fuimos al pueblo y...—Se sonrojó—Los vi besándose. Cuando estuvimos en la competencia aquí, mi señor, quien no pudo ver como el joven maestro Wen cuidaba de las heridas del omega, siempre con cuidado y amor. Además, Wei Ying siempre se alejaba de todos para conversar con él. Yo creo, mi señor, que es muy evidente.
Wen Ruohan mandó a traer a otro sanador a revisar a Wei Ying. Al llegar, se acercaron a Wei Ying, y le tomaron el pulso. El sanador esbozó una mueca de sorpresa.
—Mi señor, el joven lleva poco más de dos meses aproximadamente. —Explicó. — La fecha coincide cuando fuimos a llevar los términos de rendición. Además, en el cachorro que se gesta solo siento energía de fuego muy poderosa. El cachorro tendrá una base de fuego solo comparable con la de usted, mi señor.
Los ojos de Wen Ruohan brillaron. Luego de otro largo silencio en el que Wei Ying, Wen Ning y Wen Qing sintieron morirse, finalmente habló.
—Mantengan encerrados a mi sobrino y al joven Wei Wuxian, Voy a tomar una decisión para mañana.
—Padre ¿qué decisión hay que tomar? Es un bastardo, debes eliminarlo. Wei Wuxian me pertenece, es mi trofeo de guerra. No tienes derecho a quitármelo.
La ceja de Wen Ruohan se levantó. Ese muchacho se había vuelto demasiado atrevido. Y él no le gustaba que sus fichas creyeran que tenían voluntad propia. Wen Xu debía de ser paciente porque Wen Ruohan no iba a cederle el poder hasta que se aburriera de ello y eso pasaría en muchos años.
Wen Ruohan lanzó un cumulo de energía contra su hijo haciéndole girar varias veces hasta hacerlo golpear contra la pared.
—He dicho que mañana informaré de mi decisión final. No quieras pasar sobre mi autoridad, hijo. —Replicó en voz de mando, mientras Wen Xu apretaba los dientes y expandía un aroma cofrontacional. —El líder de secta soy yo. Y aun puedo desheredarte. —Amenazó.
Parecía que la paz entre padre e hijo solo había sido una imagen.
Wen Ruohan se retiró seguido de Meng Yao, quien giró levemente hacia Wei Ying y le guiñó un ojo.
En el pabellón de Wen Ruohan, dentro de su habitación personal, el nuevo concubino favorito, Meng Yao, servía el vino a su señor. Regalándole sonrisa tras sonrisa. Antes había intentado seducir personas, midiéndose. Seducir a Su She y al líder Nie había sido experimental, estaba preparándose para hacer que la presa mayor cayera. La que tenía en esos momentos ante sus ojos. Era un juego peligroso por eso debía entregarlo todo. Y funcionaba. A pesar de que Lan Qiren se encontraba en Sin Noche, Wen Ruohan pasaba más tiempo a su lado. Aunque también ayudaba que Qiren se la pasara en silencio, meditando. Aunque Wen Chao regresó, todavía la secta Lan estaba vigilada día y noche. Pero, al menos, habían podido salir de la montaña; sin embargo, si esto seguía así a Wen Ruohan no le iba a temblar la mano por destruirlo todo.
—¿Qué piensas, A-Yao? ¿Realmente ellos eran tan cercanos? —Preguntó sobre Wei Ying y Wen Ning.
Muchas noches ya había dormido a su lado, pero, aun así, estaba seguro que los instintos de Wen Ruohan permanecían despiertos incluso durmiendo. Por ello, cada instante debía de sumirse en su papel o sus feromonas indicarían sus verdaderas emociones.
—Sí, mi señor. Pensé que solo era un juego para el joven amo Wen Ning. Ya que Wei Wuxian era un sirviente, un poco similar a mi caso. Sin embargo, veo que los Wen realmente son unos caballeros. Seguramente es por su crianza, amo. —Susurró con un tono suave y dulce a los oídos del mayor.
—¿Te parezco un caballero? —El alfa sostuvo su rostro delicadamente.
Meng Yao sobó su cabeza en las manos del alfa, luego besó sus dedos.
—Mi pequeño zorro dorado. —En las feromonas del alfa se pudo sentir su deseo por él.
El menor se atrevió a trepar por sus piernas y sentarse en su regazo.
—Mi señor...jamás le mentiría.
Wen Ruohan paseó sus enormes manos por sus caderas y se ajustaron a su cintura en un gesto posesivo.
Meng Yao había averiguado mucho sobre Wei Ying y el linaje del que provenía podía de ser mucha ayuda. Al final, Meng Yao no tenía suficiente poder espiritual para hacer caer a los Wen, pero podía allanar el camino. No estaba seguro de si el cachorro de Wei Ying realmente era de Wen Ning, porque había una ligera posibilidad de que fuera de otro; sin embargo, comprendía que necesitaban que Wen Ruohan lo creyera.
—¿Debería hacer que aborte? Así podría desquitarme...—Comentó Wen Ruohan. El alfa desvió la mirada. Seguramente de la persona que quería desquitarse era de Lan Qiren. Meng Yao se preguntaba por qué Lan Qiren no aprovechaba que tenía ese hombre en sus manos para destruirlo. Por supuesto, el gran maestro Lan no cometería ese tipo de actos indecorosos como él.
Sin embargo, él no lo desaprovecharía, cada vez más, el líder Wen comentaba sobre sus planes frente a él o se lo preguntaba.
—Mi señor, yo sé que su corazón le pertenece al gran maestro Qiren.
El cuerpo del alfa se tensó. Era un tema delicado, pues se sentía ofendido por nunca ser bien recibido por Qiren. Cada día abandonaba el pabellón del alfa Lan furioso, frustrado; pero a la misma vez todos los días impartía orden de tratarlo según su estatus y de servirle comida hecha especialmente para un miembro de la secta Lan.
—No me hables de él ¿acaso quieres perder mi favor? —Le cuestionó.
—Solo que...yo estoy aquí para servirlo. Mientras me brinde un poco de su afecto, mi señor, yo lo seguiría hasta el fin. —Se apretó contra su cuerpo como si buscara su protección. — Pero, lamentablemente yo no puedo darle un cachorro a su nivel. Soy mestizo, hay riesgo de darle un beta.
Wen Ruohan lo sabía. Su gran amor era un alfa y este joven sirviente que tanto le encantaba era un mestizo. Ninguno de sus consortes por jóvenes o bellos que parezcan habían sido capaces de darle. Sus dos hijos se llevaron a la tumba a sus madres cuando parieron. Tenía una maldición, su hermano le había dejado semi estéril. Para un gran alfa como él era una vergüenza no haber engendrado un auténtico heredero, un alfa completamente puro.
—En cambio, Wei Wuxian es uno de los usuarios de fuego más poderoso. Mi señor, hice una investigación sobre su linaje... pienso que Cangse Sanren no solo era discípula de Baoshan Sanren...
—¿Qué?
—Pienso que puede ser su hija...Ha habido otros discípulos, pero ninguno llevaba su apellido como la madre de Wei Ying. Además, según las lecturas sobre esta inmortal era una cultivadora del elemento fuego, capaz de hacer la técnica del ave de fénix.
Eso tenía mucho sentido. Aunque tenía los pergaminos de la técnica, nunca pudo lograrlo. Solo vio a alguien en todo el mundo hacerlo: Cangse Sanren. Y su hijo, Wen Xu le contó que Wei Ying también lo había hecho. Aun no tan poderoso como su madre o Baoshan Sanren, pero lo suficientemente.
—Mi señor, se imagina, un cachorro que desciende de una inmortal de fuego junto a su sangre. Las dos sangres más poderosas del mundo de cultivo. —Le susurró Meng Yao en el oído con suavidad y candencia. Mientras sus manos acariciaban el pecho del otro.
El líder Wen tamborileo sus dedos. Recordó a aquella mujer. Aunque joven era realmente poderosa. No habría podido vencerla cuando ella creció y se hizo adulta. No podía negar su nivel de cultivo.
—Un crio que podría competir contra mí. —Soltó.
—O apoyarlo...—Replicó Meng Yao, acurrucado en su pecho, luciendo frágil y entregado a él.
—¿Qué?
Bajó su mirada hacia aquella criatura peligrosa y hermosa. Estaba interesado en las nuevas ideas, en esos planes que no tenían fin que buscaban eliminar a sus enemigos.
—Mi señor, mi sugerencia es que les permita casarse, haga la boda más estrambótica de todos los tiempos, es más, invite a todas las sectas, con restricciones claro, humíllelas y haga que se separen con ello, favoreciendo a la secta Jiang descaradamente, entonces jamás se agruparan contra usted, incluso puede que destruyan a la secta Jiang por usted, mi señor. —Sonrío con malicia. —Por otro lado, nombre al cachorro como su heredero, quizás incluso le den dos o tres nietos. Y luego...bueno, mi señor ¿no le parece que esas patéticas sectas que no conocen su lugar puedan querer vengarse de Wei Ying? Y claro, como el gran alfa que es su sobrino morirá junto a su omega protegiéndolo. —Puso un rostro de lástima. — Pobres niños huérfanos, tres pequeños herederos de fuego...usted, como un gran tío, cuidará y vengará la muerte de sus padres y tía. Ellos crecerán tan agradecidos de usted y odiando a todas esas sectas patéticas. Lo apoyarán en todo y entonces tendrá verdaderos herederos, poderosos que no compitan contra usted. Si usted me lo permite, los criaré para que lo adoren como yo lo adoro, mi señor.
Wen Ruohan río a carcajadas. ¿Cómo esta pequeña belleza podía tener tanta malicia e ingenio? No había pensado más allá. Le había tentado la idea de tener un verdadero heredero, tan poderoso como él, no como sus dos hijos, uno un beta y el otro un alfa mestizo, dos vergüenzas. En cambio, la poderosa sangre de su hermano había encontrado otra sangre poderosa; sin embargo, así como temía a su hermano tenía que tener cuidado con ese cachorro; pero si los padres de ese cachorro morirán a manos de las otras sectas, aquel niño crecería odiándolas y adorándolo a él como tío y padre. Sus ojos brillaron extasiados con la idea, sujetó el mentón de aquel omega en sus brazos. ¿Cómo no lo había conocido antes? Eran similares...de hecho, eso fue lo que quiso hacer con sus sobrinos, Wen Qing y Wen Ning, pero el problema fue que no pudo encontrar un responsable. Sospechaba que Wen Qing lo sabía, pero que se comportaba obediente para cuidar de su hermano.
Lo cierto era que Wen Ruohan jamás habría podido vencer a su hermano mayor, sino fuera porque lo envenenó primero. Del mismo modo, jamás habría podido deshacerse de Canse Sanren si la enfrentaba de frente cuando se volvió adulta, solo pudo aprovechar el mejor momento. Quien diría que la descendencia de esos dos que interfirieron en su vida se unirían y le darían un seguro para el futuro.
Giró hacia su amante, extasiado por su inteligencia y malicia.
—¿Tu padre realmente te expulsó? —Cuestionó.
—Sí, mi señor.
—Fue un imbécil. Qué puedo esperar de alguien tan patético como él. Cuando estuvo estudiando en el Receso de las Nubes...fue un cobarde...te diré algo sobre él. —Bajó su voz para contarle un secreto. — Le gustaba que los alfas lo tomen duro.
Meng Yao abrió los ojos sorprendido. Eso no se lo había esperado de su padre.
—Es lo que le gusta, pero lo mantiene en secreto. Porque le parece vergonzoso tiene muchos concubinos omegas y los embaraza. Pero su verdadero gusto es ese.
—Mi señor ¿acaso...él y...?
—No, era patético. Supongo que me deseo, pero no. Sin embargo, debo decir que su sangre no es mala, su hijo es atractivo, su hija es hermosa y tú eres mágico.
Atrajo a sus labios a Meng Yao y lo besó con fuerza, mientras su cintura era envuelta. El omega respondió el beso con fervor, mientras acariciaba el pecho del alfa. Internamente sonreía, tenía información interesante sobre su padre. Su mente comenzaba a maquinar como podría destruir a su padre pronto.
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Nuevamente los involucrados se reunieron en el salón central de los Wen. Wei Ying esperaba al lado de A-Ning, tomó su mano y se la apretó, agradeciendo por estar a su lado en ese momento. Mientras tanto, Wen Xu, desde el otro lado del salón, expandía un aroma amenazante. Wen Chao también estaba presente al lado de su hermano. No podía creer que su tonto primo hubiera preñado a un omega como Wei Wuxian. ¿En qué universo un omega tan salvaje y dominante como Wei Ying podría ser sometido por un alfa como Wen Ning?
Como la vez anterior, Wen Ruohan se encontraba sentado en su trono. A su lado, Meng Yao los observaba con una expresión neutra. En un instante, su mirada se conectó con Wei Ying. Fue un pequeño instante, pero que el corazón de Wei Ying pudo mantener mayor entereza.
—He tomado una decisión. Solo lo diré una vez. —Observó a todos. —A-Ning, te dejaré conservar al omega y a tu cachorro. No solo eso, a partir de ahora te conviertes en mi heredero.
El silencio y asombro se extendió por toda la sala.
—¡Padre! Yo soy tu heredero—Gritó Wen Xu, confrontando sus feromonas contra las de su padre, gruñéndole.
Wen Ruohan sabía que debía de tener un heredero, pero ese par de hijos era tan pocos leales. Al menos Wen Chao era manipulable, podía contentarlo con mujeres y omegas; pero su hijo mayor ambicionaba tomar el poder ya. Quizás era momento de ponerlo en su lugar y demostrarle que Sin Noche era su reino. Meng Yao tenía razón, en aquel niño que gestaba Wei Ying podía tener a su verdadero heredero, uno que criase él mismo y que plantara en su corazón odio por las demás sectas. Además, lo había pensado en silencio, tener al nieto de Cangse haría que Qiren se rindiese por completo. Incluso, si comenzaba portarse bien, le permitiría ayudar en su crianza.
—¿Qué está sucediendo, padre? Mi hermano o yo, solo nosotros somos tus hijos ¿Por qué nombras a un inútil como Wen Ning? —Reclamó Wen Chao, quien no sentía afecto por su hermano. Pero si alguien tan útil como su hermano era dejado de lado, él mismo perdería sus privilegios.
El líder Wen cruzó una pierna sobre otra y les dedicó una sonrisa de desdén.
—Porque ha hecho algo que ninguno de ustedes con más de treinta esposos ha logrado, darme un nieto con un omega poderoso. Mi nieto será un hermoso omega o alfa de sangre pura que seguirá con mi línea sin interferencias.
Wen Ning y Wei Ying rápidamente se arrodillaron.
—Se casarán en dos semanas. —Volvió su atención a la pareja. —Se hará una ceremonia impactante, la mejor de todos los tiempos y por supuesto quiero a todos los líderes de secta invitados. —Se giró hacia sus dos hijos. — Se les prohíbe tocar al líder Jiang a su hermana o sus discípulos, pasarán a ser nuestra familia y debemos empezar a tratarlos como tal.
—¡Padre! —Gritaron al unísono, furiosos, aun pensando que se encontraban en una realidad alterna.
—Si le hacen algo a mi sobrino o su omega, olvidaré que son mis hijos. —Continuó, usó sus feromonas para hacer que Wen Chao se doblegara hasta terminar con la frente en el suelo. Mientras que Wen Xu gruña resistiéndose.
Ruohan continuó presionando contra su hijo, con el mentón altivo, gruñendo, buscando someterlo. El joven Wen terminó por dejarse caer al igual que su hermano.
—Es todo, sobrino, sobrina, llévense al omega a su residencia. A-Qing, ese cachorro debe nacer fuerte y sano. ¿entiendes, ¿verdad?
—Personalmente cuidaré de mi hermano político y mi sobrino, tío.
Wei Ying se levantó, dirigió una fugaz mirada agradecida a Meng Yao. Le parecía increíble cómo alguien en tan poco tiempo había logrado hacer caer al temible Wen Ruohan. Prevenía las intenciones reales de Wen Ruohan y seguramente Meng Yao las había explotado, pero eso estaba bien porque les daría el tiempo suficiente para asegurar al cachorro y planear la venganza y caída de Wen Ruohan.
En la sala solo quedó Wen Ruohan, sus hijos y Meng Yao.
—No lo anuncié aún, pero desde ahora Meng Yao es mi consorte secundario. —Soltó como si darle el titulo de consorte no fuera en contra de cualquier tradición social. A él no le importaba si eso ofendía a alguna de sus consortes. De muchas ellas ni recordaba el nombre.
—¡Mi señor!
El omega se arrodilló a su lado, poniendo su frente en el suelo. Era increíble ¿Cómo había sucedido? Estaba absorto.
—Es este quien te está llenado ideas, padre ¿Cómo puedes hacerme esto? He peleado tus guerras por ti. —Reclamó Wen Xu.
—Pero, A-Chao, A-Xu, ustedes solo son un beta y un alfa mestizo. Yo soy un gran alfa de sangre pura. Sus madres eran poco más que esclavas betas. Tan débiles....
Ambos hijos reprimieron su resentimiento. Ninguno sabía siquiera como lucían sus madres, porque, efectivamente ambas solo fueron un par de esclavas a las que su padre tomó sin permiso.
—En cambio, la sangre de mi hermano se mantuvo pura. Wen Qing y Wen Ning son alfas puros, junto a ese omega puro, tendré nietos especiales. Alfas y omegas llenos de belleza y poder. Hijo, contigo un hermoso omega puro como ese se desperdiciaría. —Fue dañino, humillando a su hijo mayor porque sabía que ese chico había pensado que tenía más poder y era momento de que conociera su lugar. —Eso es todo, retírense.
Wen Chao y Wen Xu se pusieron de pie, con las miradas ardiendo, pero también temerosos. Su padre solo los había usado porque no tuvo más hijos, pero ahora el cachorro de Wen Ning les quitaría todo.
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Por supuesto, Wen Ruohan no dejaría pasar esta decisión para torturar a Lan Qiren. Por ello, el alfa Lan estaba sorprendido con el giro de los hechos. Por supuesto, había pensado que Wei Ying solo estaba ahí porque Wen Xu no le había puesto alternativa. Sin embargo, dado el cambio, todo indicaba que Wei Ying había escogido a alguien más como su pareja sin sentirse presionado por nadie.
—¿No es grandioso? La sangre de tu amada y la mía se acaban de mezclar. Quién diría que el hijo de Cangse me dará un nieto sangre pura. Es fantástico. —Comentó el alfa Wen, entretenido por la expresión de asombro del otro.
Al darse cuenta de su propia expresión, Qiren volvió a serenarse, quedándose en silencio. Estaba preocupado por Wanji. Sabía los sentimientos de su sobrino por Wei Ying. Y también conocía lo que un alfa Lan era capaz de hacer por la persona que ama. Pero no podía permitir que Ruohan siquiera pensase en usar al chico contra su sobrino.
—¿No dices nada? No creas que no sé qué parte de tu idea de venir aquí era para cuidar de ese chico. —Tomó u sobro de su vino. — Pero ya vez, no necesita que lo cuiden, es bastante hábil seduciendo alfas. Así como lo era tu amada Cangse ¿no? Te sedujo a ti, a Jiang Fengmian y a ese sirviente. Ese chico estuvo coqueteándole a mi hijo y también a mi sobrino, quien sabe a quienes más.
Entonces, Lan Qiren tuvo una sensación de alarma ¿acaso el cachorro podría ser de su sobrino? Eso era imposible, Wanji nunca haría algo así. Podía a ver tenido un romance, cortejarle en secreto, pero jamás llegar a ese punto. A su mente llegaron algunos recuerdos: Tanto Wei Ying y Wen Ning pasaban mucho tiempo a solas, de hecho, él había presupuesto que Wei Ying se convertiría en el concubino de Wen Ning algún día, resultó cierto. Por tanto, estaba dicho, el omega teniendo un comportamiento inmoral había mantenido relaciones con Wen Ning, se quedó preñado de él. Como aquello convenía a los narcisistas planes de Wen Ruohan de tener un heredero de sangre pura, estaba permitiendo esa unión.
—¿En qué piensas, A-Ren? ¿Acaso sabes con quien más estuvo ese chico? ¿Está engañando a mi sobrino?
—Ya lo prevenía. Ellos siempre fueron cercanos. —Replicó Qiren. —Los atrapé varias veces siendo inmorales.
—¿En serio?
Wen Ruohan estaba entretenido al saber que su inocente y poco sociable sobrino menor había sido el primero en tomar un omega y embarazarlo.
—Solo que pensé que a lo mucho que obtendría seria el rango de concubino, no ser el futuro joven consorte Wen. —Continuó Qiren, intentando descubrir las intenciones de Ruohan.
—Realmente, pero mi A-Yao tiene razón, ese chico puede ser hijo de un sirviente, pero tu amada Cangse tenía un linaje importante. Quizás ya lo sospechabas, pero parece que Baoshan Sanren podría ser su madre alfa.
Qiren desvió la mirad aun momento. Pensó en ella y su sonrisa. Aunque fuera un niño inmoral, Wei Ying seguía siendo hijo de su amada.
—Está bien para mí. —Musitó.
—¿No te molesta que la sangre de tu amada se mezcle con la mía? A-Ren, podemos criarlo juntos. Eso es lo que merecíamos. ¿Recuerdas que te propuse que retuviéramos a Cangse para ti? Con gusto hubiera adoptado a los cachorros que ella pariera para ti. Solo si tu corazón es para mí.
Wen Ruohan acarició la mano de Qiren. Con las semanas la apariencia de Qiren había mejorado, se veía con más color en sus mejillas y su mirada fiera había retornado. Todos los días enviaba a sirvientes especiales para que le brindasen el mejor cuidado y le preparasen la mejor comida. Tomó la mano de Qiren y besó sus nudillos. Aunque Meng Yao hacía un gran trabajo entreteniéndolo y era alguien demasiado útil a quien pensaba conservar, su gran obsesión era esa persona.
—¿No te hubiera gustado, A-Ren? Tener un cachorro de ella, criarlo junto a mí.
—No hables más.
Qiren estaba haciendo un gran esfuerzo para no liberar su aroma. Estaba indignado. Recordaba esa absurda propuesta retorcida y asquerosa.
—¿Por qué no? Esa es la labor de los omegas ¿no? Hubiera tenido un cachorro para ambos. Los hubiera reconocido a todos como míos.
Se levantó y se puso detrás de Qiren, lo envolvió en sus brazos. Qiren estaba asqueado del tacto de ese ser.
—Lo que deseaba par Cangse era que hubiera tenido una vida larga y feliz. Al menos me consuela que haya sido feliz por los días que vivió...Solo...me frustra no haber podido protegerla.
Ruohan apretó su abrazo posesivamente sobre el otro alfa. Qiren ni nadie sabía la verdad detrás de la muerte de Cangse.
—Tienes razón, ya no hay que mirar atrás. Ahora eres mío de nuevo. —Besó su cuello, sobre la piel blanca descubierta. —Ahora ese chico Wei Ying nos dará nietos, que serán de tu sangre y la mía. Finalmente, el destino regala esa oportunidad. Espero que el chico de rápidamente muchos herederos para mi sangre. Esa es su labor después de todo.
No lo soportaba. Qiren no toleraba más su presencia ni sus palabras. Alguna vez ese hombre le había parecido atractivo. Y aunque fue un corto periodo de tiempo, nunca imaginó que se volvería alguien así.
—No se está mezclando con tu sangre traidora. —Soltó Qiren. —Sino con la del verdadero líder Wen. —Se separó del agarre del otro, lo enfrentó a los ojos. —No tengo nada contra la secta Wen, solía ser una secta aliada a la nuestra que en manos de tu hermano hubiera sido un faro de esperanza y con gusto lo hubiéramos nombrado líder de los cultivadores porque él velaba por el bienestar de cultivadores y de humanos. Eres tú quien corrompió lo que era la secta Wen. Wen Ning no es tu hijo, así que estoy satisfecho de que Wei Wuxian tenga un cachorro de él y se convierta en su esposo. Me hubiera asqueado si terminaba con alguno de tus hijos.
Sabía que debía de contenerse por su propio bien, por el de Wei Ying y el de su secta, pero simplemente no pudo, quiso destruir esa maldita sonrisa, hacerle daño. Ya que no podía con la espada ni con su magia, al menos con sus palabras, que tuviera claro que para él no significaba más que un error del pasado.
El alfa mayor le atrajo hacia él, le besó con fuerza y mordió su labio.
—A-Ren, no tientes tu suerte. Mientras tú me rechazas hay alguien más trabajando para ganarse mi favor. Si esa persona lo logra, pensaré en que no me sirves para nada y destruiré a los tuyos para después asesinarte. ¿Qué te parece presenciar la muerte de tus dos jades?
Lan Qiren respiraba agitado, sentía su poder espiritual removerse en su interior, luchando por liberarse del sello que le habían puesto. Sabía que podría lograrlo, pero quedaría muy débil, debía de encontrar el momento ideal para ello. Con un solo golpe no lograría vencerlo y afuera de la habitación había numerosos guardias. Aguardó, la paciencia era lo mejor.
—Ya le he dicho, líder de secta Wen, puede hacer lo que quiera conmigo. No tiene por qué tenerme en un palacio, puede encerrarme en cualquier calabozo. Puede usar mi cuerpo si desea, pero no le satisfaceré. No soy un esclavo.
Wen Ruohan tiró todo el juego de té que había sobre la mesita. Su paciencia había tocado el límite. Había intentado ser amable y paciente con él. Esperó para hacerlo suyo, pero no veía ningún avance. Ya no importaba nada.
—Te tomaré la palabra. Quítate la ropa, voy a cogerte ahora.
El rostro de Lan Qiren se ensombreció, cerró sus puños, intentando contener su poder espiritual. Todos los días meditaba para acrecentarlo y cuando lo libere pueda matarlo, pero aún no tenía el poder suficiente. Puso su rostro de póker como si no sintiera el estómago revuelto. Solo sería un momento y luego Wen Ruohan vería saldada su obsesión.
—No eres un niño virginal de quince años, levántate.
Wen Ruohan sujetó su brazo, le llevó hasta la cámara interior donde estaba la cama de Qiren. Lo soltó ahí.
—Como desee, líder de secta Wen. —Dijo el otro alfa.
Lan Qiren se comenzó a deshacer el nudo del cinto, se quitó el chal, la capa exterior, y la túnica interior quedando solo en pantaloncillos interiores. Wen Ruohan exhaló entrecortado. Finalmente, después de muchos años podría hacerlo suyo, iba a disfrutar de ese momento.
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Hola!!!! Nuevamente se me fue el miércoles, pero esta vez ni anuncié nada, los tomé por sorpresa XD
Antes que nada, gracias a todos por leer la historia y recomendarla. Cuando veo que la recomiendan en paginas y así, me emociona mucho!!!
Si desean estar pendientes de las actus, así como ver más contenido referente a Bl, les dejo mis redes:
Youtube: Kaory Ciel Fangirl (Canal dedicado al contenido BL asiático)
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Bueno.... Habemus bebe Jingyi. Por si no se entendió el titulo, evidentemente Jingyi sería como el heredero del cielo ya que Xichen es del elemento viento y Jiang Cheng del trueno y rayo.
¿Creen que herede el elemento de solo uno o de ambos?
¿Será un gatito como su mami o lobito como papi?
Y por supuesto, Sizhui será nuestro heredero de fuego. Aunque ¿creen que tenga el elemento de su padre también? Que es agua
¿Creen que será conejito como Wifi o lobito como Lan Zhan?
¿Crecerá con los Wen como familia?
¿Xichen se enterará que tiene un hijo con JC? ¿Cómo lo tomará? ¿Volvería con JC?
Lanchita se nos vuelve crazy cuando se entere que Wifi se casa con Wen Ning?
¿Habrá delicioso entre Qiren y Wen Ruohan? corran las apuestas
¿Habrá matricidio entre Wei Ying y Wen Ning?
¿Lanchita se enterará de que va a tener un bebe con Wifi?
¿Les gustó ver a Jc poniendo la basura en su lugar?
El derrite nucleos, nose mencionó mucho en la novela, solo que tenía motivos para servir como perro a los Wen, aunque era evidente que no estaba de acuerdo con sus formas de ser. Además que conoció a Madam Yu cuando ella era soltera. Así que estoy aprovechando eso un poco
El embarazo de Jc es de alto riesgo de momento, así que el derrite nucleos uso su propia energía espiritual para curar a Jc y que el cachorro no se caiga. Como dicen, Jingyi es el heredero de la secta Lan oficial ya que proviene del matrimonio, así que, imaginenese si Xichen y el resto de la secta lo saben, siendo como son realmente Ruohan los tendría en sus manos y también a Qiren.
Por eso, tanto el derrite núcleos como la amante de Wen Chao (nunca me acuerdo su nombre) saben que Wen Ruohan les cortaría el cuello si sabe que por su causa esa oportunidad se perdió. Nuestro Jc lo entendió todo rápidamente y al menos ha conseguido tiempo para su familia, sus baby y él. Además, la amante de Wen Chao sintió miedo al darse cuenta que si Wei Ying se enteraba que su hermano perdió a su bebe, usaría a Wen Xu para castigarla. Algo que seguramente Wen Xu haría. Pero, no todos tienen la moral para seducir y acostarse con otros para conseguir lo que quieren. Que Wei Ying pudo conseguir mucho a través de Wen Xu? posiblemente, el hombre esta muy obsesionado con él. La guayaba sabe eso, por eso a él ya no le importa usar sus encantos a su favor, incluso si tiene que acostarse con Wen Ruohan.
¿La obsesión de Wen Xu por Wei Ying traerá problemas? uhhh pues vamos a ver y también si bebe Wifi usa esa obsesión a su favor en algún momento.
Personalmente, siempre pensé que entre la guayaba y Wen Ruohan pasó algo más, porque ¿Cómo escalaría tan rápido sino?
¿Cómo va a reaccionar el resto del mundo de cultivo cuando sepa que Wifi se casa con Wen Ning y la guayaba es ahora consorte de Ruohan? Uhhh veremos
¿Wen Ruohan mató a Cangse? ¿Cómo sabe que es destinada de Qiren? Si ni él mismo lo sabe... armen sus teorías
Wen Xu aunque es un alfa y poderoso, pues el hecho de no ser sangre pura pesa sobre él. y Wen Ruohan por eso no les tiene gran estima. Además, comienza a sentir que ese hijo podría darle vuelta. Así que quiere demostrarle que está en sus manos.
¿Habrá traiciones dentro de losWen? jojojo
Bueno, pongan sus teorías de los próximos capítulos por aquí XD
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