HILO DE SANGRE - KOOKTAE

二十六

Zheng Guo tuvo que respirar hondo para poder tranquilizarse, sentía vértigo de sólo pensar en el gran problema al que se enfrentaba. Quiso quedarse en el almacén cuidando de Taehyung, quiso ir y partirle la cara al desubicado dios de la montaña por hacer de las suyas, quiso hacer muchas cosas...

Pero ir a enfrentar al ser sin más, no ayudaría más que a mitigar su rabia. Aunque tampoco es que no tuviera ganas. Al regresar al almacén, luego de hablar con las golondrinas y restaurar los talismanes, recién se dio cuenta que en lugar de los empolvados muebles antiguos, había mobiliario nuevo y que se había convertido en el estudio del tío de Taehyung.

Así que tuvo que idear otra cosa.

Ahora se encontraba observando por la ventana del descansillo hacia el otro lado de la calle, podía sentir la inquieta presencia de los servidores del dios de la montaña.

─Hyung ─oyó la voz grave del castañito a sus espaldas, su estrella se veía deslumbrante con esas prendas y esa capa leve de maquillaje. Sus manos picaron por acercarse, pero tuvo que poner de su parte para aniquilar el deseo de abrazarlo.

─Frente a su presencia, las aves en vuelo caerían del cielo ─susurró maravillado.

Taehyung pudo oírlo y sintió varias mariposas en su estómago, sus mejillas hirvieron y se mordió el labio inferior ocultando su sonrisa.

─ ¿No irás a cenar con nosotros? ─preguntó viendo que el pelinegro no se había cambiado.

─ ¿Eh? No lo creo, Taehyung.

─ ¿Por qué no? ─preguntó dejando a Huǒ en el piso y acercándose─. No debes quedarte solo. Habrá mucha comida deliciosa y todos los amigos de mi tío son muy agradables.

─ ¿Quieres que vaya? ─Su boca se movió sola, toda la sinceridad de su corazón se vertió en la pregunta.

─S-Sí.

Ambos se dirigieron al estudio dejando a Huǒ con un platillo de croquetas que el qilin quemó al quedarse solo. Llegaron encontrando a Kyungsoo sacando el pollo frito de las bolsas de pedido y a un grupo de atractivos invitados preparando la carne en la plancha caliente sobre la mesa. El tío del castañito lo presentó con los demás, todos miembros de su empresa de novios de alquiler, aunque el Segundo Príncipe seguía sin entender bien qué es lo que hacían.

─Cojan un plato y sírvanse toda la carne que deseen ─indicó Zhou Min* volteando los trozos en la parrilla situada al medio de la mesa. Él era uno de los chicos más solicitados y atractivos. Sustentaba sus estudios con el dinero de las citas.

─Entonces ¿eres el nuevo y sexy huésped? ─le preguntó un bonita y delicada chica sirviéndole un vaso. Si el fénix recordaba bien, se llamaba Woori* y era coreana.

─Creo que sí ─respondió cortamente, agradeció con una inclinación antes de beber el contenido. Le ofrecieron las piezas de pollo, trató de rechazarlas, sin embargo, insistieron tanto que alzó una y la sostuvo en su mano siguiendo poco la conversación sobre citas y cosas así. Cuando nadie le prestaba atención, posó el pollo en el plato frente a Taehyung sorprendiéndolo.

─ ¿No quieres comer, hyung? ─lo vio ladeando su cabecita, sus hebras castañas se movieron a un lado haciendo que se viera adorable. El Segundo Príncipe reprimió las ganas de acariciarlas.

─Disfrútalo, Taehyung.

─Gracias. ─Tomó la pieza para darle un gran mordisco, el baño le había abierto el apetito─. Está delicioso.

─Jungkook eres muy guapo ─halagó Kyungsoo poniendo su plan en acción, le sirvió otra bomba de soju y cerveza─. ¿No pensaste en ser novio de alquiler?