Laced | Zayn Malik (Español)

Capítulo 31 (Segundas Intenciones)

Niall:

—Pero no es justo para ti. Me siento horrible.

Fruncí el ceño—. Bueno, al menos tenemos algo ¿no? ¿Eso no cuenta para nada? Ambos tenemos al otro y podemos hacer que funcione a través de ese pequeño bache en el camino ¿cierto?

—Zayn follándome mientras estoy contigo no es un bache pequeño Niall. Ni siquiera sé cómo me convenciste el otro día de seguir con esto… —Su voz se apagó e hice una mueca debido a sus palabras.

Traté de mantener mi humor ligero—. Es porque me amas demasiado. Soy demasiado maravilloso como para romper. —Dije en broma, golpeando juguetonamente su brazo.

Ella tuvo problemas para mantener su rostro serio, sin embargo finalmente una sonrisa rompió su fachada seria y no pude evitar reír con ella.

—Ahora, olvida lo que ocurrió el otro día. Hoy estoy libre y tú estás libre. Hoy se trata de nosotros. ¿De acuerdo? —Coloque mis brazos alrededor de ella, reposando mi mandíbula sobre su cabeza.

—De acuerdo. —Acordó, regresando mi agarre—. ¿Qué quieres hacer?

Mordí mi labio, riendo—. Sabes lo que quiero hacer nena. Ahora ¿es mi cama o la tuya? —Pregunté descarado.

—Por supuesto que quieres hacer eso Nialler. Debí haberlo imaginado. —Sabía que ella rodaría sus ojos por mi pedido.

—Entonces ¿mi cama o la tuya? —Inquirí de nuevo más serio.

Ella hizo pausa por un segundo—. ¿Qué hay de tu jacuzzi?

Me aparte de ella, sin darle una oportunidad para protestar antes de que eliminara sus rodillas y la cargara al estilo princesa—. Me gusta tu idea Amby.

— ¡Niall! —Protesto—. ¡Bájame bastardo!

Tiré mi cabeza hacia atrás, riendo mientras me dirigía hacia mi habitación, ignorando sus débiles intentos de saltar fuera de mis brazos.

—Tienes razón. —Susurro de pronto Amber y deje de caminar, confundido.

— ¿Sobre qué?

—Te amo demasiado.

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Harry:

No era más raro, era simplemente un hábito. Perrie venía a mi habitación cada noche después de dar vueltas y caía dormida por sí misma. Así que se escabullía a mi cama, esperando que no lo notara, sin embargo por supuesto lo hacía.

Una vez que subía, solo casualmente colocaba mi brazo alrededor de su cintura, apegándola a mí y acurrucándome contra ella. No era romántico y no tenía sentimientos por ella. Ella simplemente necesitaba dormir y si ella necesitaba comodidad para descansar, se la daría.

En realidad no era la gran cosa.

Así que fue extraño cuando desperté una mañana por un chillido.

Parpadeé para abrir mis ojos y me percaté de que Perrie estaba en el piso, incorporándose del desastre que causo al caer con las sábanas.

— ¿Qué ocurre? —Pregunté, confundido.

Me miro preocupada y después desvió su vista—. Harry… tú…

Baje la mirada a mi mismo, solamente para notar que estaba ligeramente duro con un caso de mañana de madera.

—Pensé que dijiste que no tenías más sentimientos por mí ¿Harry? ¿Qué rayos es eso? —Señalo mi entrepierna.

—Yo no. —Entorne mis ojos—. ¿Alguna vez escuchaste el término “mañana de madera”? Es solo natural, porque durante los últimos niveles del ciclo de dormir la sangre baja a las extremidades inferiores. No significa nada. —Fruncí el entrecejo mientras le explicaba—. Y no fui yo quien simplemente se metió en la cama de alguien más.