Cómo Entrenar A Tu Dragón (Una historia Diferente)

Capítulo 22

/Narra Hipo/
  Sabía que mi familia estaba en una situación difícil y podía entenderlo, pero no iba a permitir que se separaran luego de años distanciados.

  Fui a buscar un instrumento que me regalaron los dragones en uno de sus numerosos asaltos. Cuando lo encontré, fui corriendo hacia donde todos estaban y en eso escuché su conversación.

Estoico: *Triste* Espero que Hipo sea capaz de perdonarme.

Valka: El ya te perdonó hace mucho, Estoico. La pregunta es ¿Cuando te perdonarás tú?

Estoico: *Triste* No sé.

  Eso me partió el corazón, pero sabía lo mal que se sentía. Yo me sentía de manera similar luego de abandonarlo y traicionar todas nuestras costumbre.

  Apareció con el instrumento en mis manos y comencé a silbar mientras tocaba. El sonido se convirtió en melodía y el silencio fue desapareciendo lentamente. Ambos adultos todavía estaban cabizbajo hasta que el hombre continuó el silbido y con él inicio el canto.

Estoico: Por bravo mar navegaré
Ahogarme yo no temo
Y sortearé la tempestad
Si eres para mí.
Ni ardiente sol, ni frío atroz
Me harán dejar mi viaaaje
Si me prometes corazón
Amar...

  Mi padre, al ver que mi madre no cantaba la misma canción junto a él, bajó su cabeza con tristeza y se iba retirando hasta que mi madre sostuvo su mano y de su boca salieron unas hermosas notas musicales junto a un bello canto.

Valka: Amarme por la eternidad
Mi buen amor tan dulce y leal
Me asombran tus palabras
No quiero una empresa audaz
Es bastante si me abrazas

  Ambos comenzaron a bailar y a reír. Juntaron sus manos y sus miradas se cruzaron mostrando así sus almas llenas satisfacción y alegría.

Estoico: Sortijas de oro te traeré
Poemas te voy a cantar
Te libraré de todo mal
Si siempre me acompañas
Valka: ¿Sortijas de oro para qué?
Poemas no me importan ya
Tu mano solo sostener
Estoico: Mejor que eso no hay mas

  Su ritmo comenzó a aumentar y junto a eso, las sonrisas de Estoico y Valka se hicieron más visibles y llenas de energía.

Ambos: Con tus abrazos y tu amor

En la danzas y en los sueños
Con pena y alegría igual
Conmigo yo te llevo
Por bravo mar navegaré
Ahogarme yo no temo
Y sortearé la tempestad
Si eres para mí

  Cuando terminaron de cantar, yo dejé el instrumento y me acerque a ellos y los abrazé. Fui correspondido al abrazo y juntos nos quedamos así por un tiempo, atesorando cada segundo que permanecíamos juntos.