Era la premiere de Stranger Things 3, iba a ser mi primera aparición pública como la novia oficial de Finn. Me daba mucha vergüenza saber que me encontraría en el ojo de el huracán por primera vez en la vida. No era una persona famosa, ni tenía intención de serlo, pero quería apoyar a mi novio.
Tenía miedo, después de esta noche mi vida cambiaría para siempre. Eso me fascinaba y aterraba a parte iguales. Tenía ganas de poder pasear por la calle con Finn, o poder tener citas en restaurantes sin pasar miedo por que nos pillen los paparazzi, pero eso también significaba que debería aceptar la opinión de muchísimas personas, y no todas iban a ser buenas.
Estaba en una gran limusina, con todo el cast juvenil de Stranger Things y sus acompañantes, acabábamos de llegar a la alfombra roja.
El chofer salió para abrirnos la puerta y ayudarnos a bajar.
Yo me quedé la última y Finn se quedó conmigo y me ofreció la mano en señal de apoyo cuando comenzamos a caminar por la alfombra roja, hasta alcanzar al resto del grupo.
Yo me quedé con Lizzi, la novia de Gaten, mientras los chicos eran fotografiados en grupo, y con el resto del cast de la serie.
Después de un rato todos se separaron, empezaba la parte en la que se les permitía a los periodistas hacerles preguntas a los actores y los encargados de la producción de la serie.
Finn me llamó para que fuese con él.
— ¿Quién es esta chica Finn?— preguntó un periodista cuando llegué a su lado y Finn me tomó del brazo.
— Ella es T/N, mi novia— dijo él, apoyando ligeramente la cabeza en mi hombro, con una gran sonrisa.
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La premiere acabó. Habíamos visto un avance de la tercera temporada, y luego estuvimos en una fiesta junto con un montón de celebrities. Me sentí extrañamente cómoda.
Todo iba bien. Hasta la mañana siguiente.
Ahora todo el mundo sabía sobre mi relación con Finn, y a los fans no parecía haberles gustado mucho.
Había conseguido casi 300k de seguidores en instagram, pero me preocuparon todos los comentarios y mensajes directos que había recibido.
La mayoría de mensajes eran personas deseándome lo peor por haber hecho que Millie y Finn no tuviesen posibilidades de estar juntos, como si fuese mi culpa.
Sabía que mi vida iba a cambiar después de eso, pero nunca pensé que cambiaría tan para mal, cada minuto me llegaban miles de mensajes y la mayoría no eran buenos. Me sentí atacada, eran tantísimos mensajes, tantísimas opiniones que no podía controlar.
Criticaban lo que había llevado a la gala, como había tomado a Finn del brazo, como le había sonreído, todo, lo criticaban todo.
Pero, de un momento a otro, todo paró.
Me extrañó, pero los mensajes malos dejaron de llegar, y no entendí porqué hasta que no vi el mensaje que Millie había colgado en sus redes sociales.
@millliebobbybrown: Hoy me he despertado y me he dado cuenta de lo mal que está el mundo. Mi amigo Finn ha encontrado una persona que le hace feliz y la gente en vez de estar feliz por ello, atacan a mi amiga. T/N y Finn son novios, y él y yo somos AMIGOS. La gente que no está feliz por ello no deberían considerarse fan.
@finnwolfhard: @T/N_T/A y @milliebobbybrown son personas muy importantes para mi aunque de diferente manera. Millie es una gran amiga mía pero NO es mi novia y quiero que lo respeten.
Esas palabras hicieron que me sintiese bien.
Me sentía protegida, sabía que había gente que intentaba protegerme de los malos comentarios, intentando erradicarlos, volví a mirar mi teléfono y observé como los malos comentarios eran reemplazados por capturas de los mensajes de Millie y Finn, o por mensajes de apoyo y edits que habían hecho sobre Finn y yo durante la premiere.
Me sentí arropada y comprendida, por fin me sentía parte de la vida de Finn dentro del mundo de la fama.
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