Capítulo 31 ♡ - Segunda Parte

161 42 0
                                    

♡♡♡

«―¡Dime que termina en tragedia! ¡Dímelo!»

♡♡♡

Micaela Gardner

Josh se separó de mí y se sentó en la cama.

No podía evitar mirar más debajo de lo que debería, aunque a decir verdad, era muy notable su emoción por nuestro reciente beso. Arreglé mi camisa y amarré mi cabello en una coleta un tanto desordenada. Se seguía sintiendo la tensión en el aire y las ganas de volver a besarle eran muy tentadoras, pero no podía hacer. Si queremos dar un paso adelante y no para atrás, tenemos que empezar a tener una confianza que resulte asfixiante.

―No sé qué quieres saber de mí ―admitió Josh, cruzando sus brazos―. Casi todo el mundo sabe de mi historia. Hasta más que yo, por cierto.

Si pensaba que iba a reírme o doblegar mi intención de no hablar con él, estaba muy equivocado. Me senté en el fondo de la cama, poniendo mi espalda en el respaldar de esta, Josh hizo lo mismo pero se quitó los zapatos y las medias. Quería hacer lo mismo, aunque no me dio tiempo porque él ya estaba llevándome a su pecho. Duro. Podía escuchar los latidos de su corazón y eso, además de ser extraño, era música para mis oídos.

Me acomodé mejor e, involuntariamente, enserio, mi mano tocó esa parte misteriosa que solo se ocultaba por un pedazo de tela. La vergüenza no tardó en venir, pero más extraño aun, me gustó mucho y quería seguir haciéndolo.

―Vaya...―siseó mi jefe y se removió estando mi cuerpo todavía con el suyo―. Puedes hacerlo si quieres.

―Por supuesto que no ―contesté enseguida―. Te dije que íbamos a hablar y eso va a ocurrir.

Josh soltó un suspiro y puso cara de estar apenado. Rodé los ojos, apenas un poquito antes de comenzar a sonreír como toda una tonta hormonada. Parecía igual a una chica adolescente que estaba hablando con su crush y no sabía cómo comportarse. Bueno, ya todos saben que se me alborota todo pero eso no es tema ahora.

―Te quería dar la sorpresa apenas llegáramos ―me dice, y no pude evitar sentir de nuevo esa incertidumbre de saber cuál ese lugar al que me va a llevar.

―Tenemos el dia de mañana y pasado, ahora hablemos ―defendí―. Sobre todo porque, podemos aprovechar que todos están abajo y no nos prestan tanta atención.

―¿En serio? ¿Eso es lo que crees? ―Indagó burlón, como si mi comentario fuese lo más absurdo del mundo.

No entendí porque lo decía con esa nota divertida, aunque no le presté mucha atención porque estaba en su pecho. Por alguna razón, esta vez se sentía extraño. Más ejercitado. Además de estar caliente en este clima frío, estaba duro, podía sentir sus pectorales y su abdomen en forma de tableta de chocolate con mi mano. Mentiría si dijera que no me quedaría en dormir toda mi vida. Esto es mejor que la propia almohada.

Josh, igualmente, no me dio tiempo para responder, ya que siguió hablando dejándome con la boca abierta:

―Erika y Sue tienen una obsesión de que tú y yo estemos juntos ―me informó, acariciando mi espalda descubierta con su grande mano―. No te sorprendas si están con la oreja pegada escuchando todo.

Lo peor de todo esto, es que le creí. Y, aunque intenté no hacerlo, miré la puerta con mi ceño fruncido y separé mi oído del corazón de Josh. Vale, era verdad, si miraba detenidamente la puerta se podían ver las sombras de ellas, y también se podía escuchar sus pequeñas risas cuando se dieron cuenta que ya nos dimos cuenta de su presencia.

Nadie Como Tú © [COMPLETA✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora