Capítulo 10 ♡

255 93 2
                                    

♡♡♡

«―Vale, puedes verme ahora como un
rudo, pero en el fondo soy la cosa más hermosa que puede haber en este puto mundo.»

♡♡♡

Sinceramente no me sentía preparada para este viaje, y se debía a muchas cosas: el solo hecho de pensar en estar sola con Josh en un jet privado o algo asi me revuelve todo. El solo hecho de estar tres días en una casa con Josh me espanta, pero en lo lejos, en lo profundo, en esa parte de tu cuerpo (o conciencia) se sacudía de felicidad y enviaba a mi cerebro imágenes capaz de hacerme sonrojar como la propia estúpida, y despertar zonas como una hormonada.  Y todo lo que me dijo Erika, que lo he estado pensando muy seriamente.

Mis pensamientos en este momento eran como letras jeroglíficas de doctores, desordenados, inatendibles y que te deja con un estrés jodedor.

Las pocas neuronas se entrelazaban entre si y dejaba en total shock todo mi interior.

Sí, no debería sentirme nerviosa, si, debería de estar feliz y dejar que todo pase como tenga que pasar. Pero ese era el problema, yo no quería que pasara como lo tendría predicho el destino, yo quería que pasara todo a mi antojo, sentía la urgencia de poder controlar todos esos días como a mí me dé la gana.

También sentía y presentía varias cositas capaces de pasar en este viaje.

En definitiva, yo estoy buscando todas las escusas en vano para no ir.

Salí de mi cuarto mi cuarto con los ánimos por el culo. Me resign en no poder hacer nada para evitar esto.

Me sentía molesta, con todos, en especial con Erika por haberme sacudido todo y aterrarme por lo que dijo, conmigo por comportarme asi, con mis padres por no decirme nada… con Josh por el motivo de reaccionar de manera inconsciente y ya mi cuerpo tiene epilepsia.

Han comentado, por ahí, que eso es normal. Todas desean estar con él y no puedo culparlas. El bárbaro es muy guapo, demasiado, y no es justo que una persona sea demasiado hermosa. Y sin dejar atrás esa aura misteriosa que incita más en saber de él  y todos sus secretos, desatar ese lado chistoso y juguetón que debe tener guardado. En algún lugar lo debe tener.

Pero cuando recuerdo sus sonrisas burlonas cada vez que me coloraba y ese tono que usa conmigo cuando quiere. Mierda.

Bajé las escaleras con desanimo, arrastrado los pies y toda encorvada. Tarareando como una pendeja la canción de un comercial y la vista perdida en las puntas de mis zapatos.

No me caí fue por milagro.

Cuando llegue al salón todos estaban viendo televisión sentados en el sofá. Mi amiga  era la única que estaba en un sifón individual me miró mientras masticaba lento, con los ojos entornados, divertidos y con un brillo que solo dice una cosa: peligro. Sostenía en su mano derecha una barra, no sé si de chocolate o de esas que le encanta a ella, pero verla comer tan apasionada y con ganas me despertó el hambre.

―Ya estoy lista―Mascullé acercándome.

Erika rodó los ojos.

―No me di cuenta―dice con su adorado sarcasmo―, déjame terminar esto y nos vamos.

Exhalé, está en modo hacerme el dia imposible. Se hizo un silencio, poco a poco se fue tornado tenso, en cambio me quede parada viendo la espalda de mi padre, la espalda de mi hermano y la carota socarrona de mi madre. El ambiente se tornó tan incómodo que pensé moverme un poco y acabar con la burbuja.

Mientras esperaba a que terminara volví a lo mismo del principio. Mire a mi padre, mi hermano y la todavía cara socarrona de mi madre, lo dejé pasar. Seguía parada, inmóvil, seria, me exigí no mover ni un musculo, me lo exigí tanto que la posición ya se me estaba siendo tediosa.

Nadie Como Tú © [COMPLETA✔]Where stories live. Discover now