BULLYING STOPS HERE

226. Em

Nombre: Em  Edad:14 años

Aquí va mi historia. 

De pequeña era muy débil. Quizás lo que vaya a contar no se compare con los grandes casos de bullying, pero son anécdotas que me han hecho llorar y estar rota en mis años de primaria. Cuando tenía nueve años, tuve que cambiarme de colegio. Estaba acostumbrada a tener un grupo de amigas en el anterior liceo al cual me había adaptado desde jardín y de forma exitosa.

Todo el bajón ocurrió con la noticia de que mi escuela iba a cerrar, razón por la cual tuve que cambiarme a otra. El primer día allí, no sabía junto a quién sentarme, así que la profesora me dio un lugar junto con una niña a la que desde ese instante no le caí bien.

Cuando por fin creí hacerme una amiga, ella intentó unirme a su grupo, que consistía de dos niñas, entre ellas, la persona que más daño me hizo. Nuestro juego favorito, era saltar la cuerda. Mi nueva gran amiga y yo éramos las que saltaban y las otras dos preferían girar la soga. Un montón de estudiantes, incluso varones, hacían fila para saltar con nosotras. Siempre respetaba mi lugar y los demás turnos. Aprovechando esa situación, esta niña, cada vez que llegaba mi turno, giraba la cuerda a un ritmo diferente, más lento, lo que me hacía perder y tener que esperar otra vez mi turno. Me enojaba el que ella se divirtiera de ese modo y se riera de mí. Sé que no es grave, pero, como dije, era débil.

Luego, comencé a elegir mal a mis amigos. Cuando creía que eran leales y buenos, hablaban mal de mí a mis espaldas, se reían, me burlaban y se aprovechaban de lo ingenua que era a escondidas.Las clases de Educación Física eran las peores, me marginaban y, a la hora de jugar, me mandaban al arco, cada maldita clase. Cuando me dejaban jugar, no tenía el mismo nivel de habilidad que los demás, porque mi única práctica, era atajar. 

La profesora sólo veía mi juego, y me calificaba no por cómo atajaba, si no cómo jugaba. Yo le decía "Las chicas siempre me dejan de portera o defensora, así, "¿Cómo pretende que sea habilidosa en lo que no consista atajar?" Y no era solo atajar, así de simple. El problema era la fuerza con la que tiraban las pelotas. Yo era extremadamente delgada por genética, y no tenía fuerza. Me dolían las manos y los nudillos, y por cada pelota que no atajaba, me decían "inútil" y me insultaban.

Llegaba a mi casa, mis padres me aconsejaban, mi hermano me abrazaba cuando lloraba. Comencé a seguir los consejos de mis padres y hoy soy la persona que soy. Me gané respeto por parte de mis compañeros, me hice más fuerte, y hoy en día veo todo lo ocurrido, como algo que, por más lágrimas me haya causado, no valga la pena que me persiga. Todos los que me molestaron maduraron, y al hacerme más fuerte, logré que la distancia no me afecte. Aprendí a diferenciar amigos de compañeros, y a elegir a los correctos. 

Hoy estoy junto a ellos, y recordando esos años de tristeza, está en mi memoria que ellos jamás me habían molestado, jamás habían formado parte ese grupo.

Esto va para todos aquellos que sufren Bullying. Hablen, como yo lo hice con mis padres, y como mis padres se lo contaron a los profesores. No se queden callados.

Estoy eternamente agradecida de todas aquellas personas que me ayudaron a ser quien soy. A mi familia y a mis REALES amigos, que los cuento con los dedos de la mano. Hoy en día soy capaz de muchas cosas. 

Me uní a esta campaña porque vi el sticker en muchas historias conocidas de Wattpad, porque fui víctima y porque quiero que el Bullying pare.

También quiero agradecer a Nerea y a las embajadoras por crear esta campaña.