16. Ad

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Ad. 16 años.

Hola! Ya conté mi historia por el tablón pero no lo hice tan detalladamente y... Bueno... Aquí va.

No soy mucho de decir mi nombre por una red social, así que digamos que me hago llamar Ad. Tengo dieciséis años y soy de una pequeña ciudad de Argentina.
Déjenme decirles dos cosas sobre esta pequeña ciudad de mierd*. 1) es un pueblo católico y muy cerrados. ¿Homosexuales? ¿Personas con otros pensamientos? Nunca y 2) es tan chico que la ciudad se nutre del chisme y de las críticas desagradables, como dicen por ahí "Ciudad chica, infierno grande". 100% aplicable.¿A qué va todo esto? A que nunca nadie puede vestir, pensar y ser como le gustaría ser. La gente mira, señala y dice mucho, y nunca les importan los sentimientos. Siempre está el miedo de ser visto de mala forma por lo que todas las personas hablan, hacen y se ponen lo que impone la "moda".

Muchas habladurías. Chismes. Criticas. Risas. Miradas. Lo peor de todo, es que debes acostumbrarte a ser como todos los demás y despedirte de las cosas que te gustan, sino será suicidio social.

Hace algunos años, yo era un "suicidio social". Como muchos sabrán, los once años no son la mejor edad para una personas. Te crece un ojo, después la nariz, luego un brazo y realmente sos deforme. O por lo menos yo lo era.En fin, no era la persona más linda. Era de esas chicas raras, con el pelo grasoso, granos y, además, deforme. Sí, jaja. Me gustaba leer, los libros y me juntaba con las raras porque, bueno, yo era rara -según la sociedad, aclaro-. Callada y tímida. Sobre todo, con el autoestima en los talones.

Ese año había entrado a secundaria. Lo que para muchos es horrible, pero para mí era emocionante porque, de alguna forma, me sentía mayor, más independiente y, no lo sé, más grande. En uno de los primeros días de clases, nos informaron que medirían nuestro nivel de inglés y, dependiendo de eso, se hacían seis grupos que se organizaban por la dificultad en la que se enseñaba (si no se entiende, el nivel 1 era el inglés más avanzado, luego estaba el 2 que era un poco más fácil y así).

Para que se den una idea de mi nivel de inglés, estaba en el 6, el peor. Recuerdo que cuando llegué a la clase en donde estaba mi grupo, no estaba muy conforme con los integrantes porque la mayoría de los que estaban allí eran de un grupo de chicos que se dedicaban a molestar a la gente como si fueran la creación más hermosa y majestuosa de Dios, súper perfectos, cuando en realidad eran tan pubertos como yo, pero eso no va al tema.Me senté primera, cerca de la profesora, callada y tímida como siempre. Las primeras semanas no les hice caso y mucho menos ellos a mí. Pero un día, se les ocurrió molestarme y, tal vez por la forma en la que reaccionaba -poniendo una cara de querer llorar-, decidieron seguir haciéndolo todos los malditos días. Principalmente, se reían de mi aspecto físico -recuerden mi descripción de arriba, je-. Tengo un tic nervioso en las cejas por los que las muevo mucho al hablar y se reían de eso, me empujaban, me sacaban los lápices, copiaban mis trabajos de inglés -que los hacía con mucho esfuerzo porque de inglés no sabía nada- y cada vez que levantaba la mano se burlaban de los que sea. Si me preguntan, la profesora nunca dijo nada, o "no se dio cuenta".Fue lo mismo durante todo el maldito año. Burlas, empujones, risas y hurto de mis cosas. No quiero meterme mucho en mi vida personal, pero ese mismo año, y mientras estos me molestaban, mi papá se fue de casa y no lo vi por meses. Les cuento esto porque fue como un rejunte de todo lo que estaba pasando en mi vida. Imaginen a una niña de once años, que la acosaban en el colegio, su papá estaba en no sé dónde, su cuerpo estaba cambiando y no se entendía ni ella misma, y por sobre todas las cosas, se sentía horrible entre todos.

Transcurrió el año de esa forma, mis notas empeoraron y creo que todo empezó a decaer en mi vida. Queda de más decir que fue el peor año de mi vida.

Decidí cambiar la situación en la que vivía cuando un día la profesora de inglés me pidió que pase al frente para leer mi trabajo. Me paré, rengueé -porque me había desgarrado el tobillo pocos días atrás-, se rieron de eso, llegué al frente y, a penas volteé a ver a la clase, empezaron los burlas.Una cosa había sido estar sentada en donde me sentía un poco más segura, esa vez estaba parada frente a todos, indefensa y sin poder hacer nada. Humillación, esa es la palabra. La profesora "no se dio cuenta" y, lo peor de todo, es que tuve que leer el estupido trabajo y se burlaron el doble.Así que, cuando llegué a casa, lloré por horas y no quise volver al colegio nunca más. Mi familia nunca se dio cuenta, por el tema de mi papá. Pero no los culpo.Empezó un nuevo años de escuela, y la Ad de antes desapareció. No fue un cambio del día para el otro como en las historias en dónde la rara se convierte en popular y todo ese cliché. Hice más amigos y, de a poco, el "grupo raro" se alejó de mí y yo de ellos porque dejé de pertenecer. Me empecé a juntar con personas que hasta ahora quiero muchísimo. Chau granos. Chau grasa. Dejé mi pelo largo, que resultó ser más lindo de lo que pensaba. En fin, cambié.Me encontré a mi misma. Me empecé a sentir cómoda con la gente que estaba, con mi cuerpo, conmigo. Mi autoestima subió y hasta empecé a ver cosas lindas en mí. Descubrí que me gustaba salir de fiesta y hacer amigos. Salí con chicos, gusté de algunos y gustaron de mí. Empecé a ser feliz.
Los libros y el leer, nunca dejaron de ser parte de mí y nunca dejará de serlo. ¡Eso sí que no!

¿Ese año? Pasó al olvido y ya ni hablo de eso ¿Los chicos que me molestaron? Siguen siendo mis compañeros pero decidí perdonarlos por todo lo que me hicieron pasar, sin rencores -aunque ellos no me pidieron perdón-, y me empecé a llevar bien con ellos. Como dije, sin rencores.

Desde mi experiencia, les digo que todo va a estar bien. La frase "después de la tormenta, sale el sol" empezó a tener sentido para mí. Nada dura para siempre. Hay que ser fuerte y luchar contra todo. No dejes que te afecte, porque sos linda y especial a tu manera. Si ellos te hacen sentir menos, desmostrales que sos mucho más con una sonrisa. Busquen apoyo y sepan que nunca estarán solas. Habla, dialoga con gente que pasó por alguna situación parecida y verás que de pronto nada está perdido. Hay gente como la que creo esta iniciativa que están para apoyarte. Demuestra que no te afecta. De a poco las cosas cambian y todo estará bien.Gracias a la/s persona/s que tuvo/ieron esta maravillosa idea. Desde lo más profundo de mi corazón, les deseo suerte y éxitos. Besos desde Argentina para todos xoxo



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