Mi Fulang me lleva a casa para una cena suave.

Capítulo 66

Lo primero que tienes que hacer es aprender a montar a caballo.

Pensó que si aprendía a montar a caballo, sería mucho más rápido ir a la academia, y no tendrían que llevarle todo el camino de vuelta, como hasta ahora.

No sólo podría llegar directamente a la academia sin tener que utilizar un carruaje, sino que también podría llegar a la academia en media hora más o menos, y habría un establo en el patio donde podría guardar sus caballos.

Volvieron a picarle las manos, así que salió y se montó en un caballo con la ayuda de su familia, aunque lo había pensado bien, pero una vez montado en el caballo le costó aprender.

Si el animal no le tiene miedo, se acostumbrará tras un par de perezosos paseos, pero si tiene miedo, montar a caballo es como estar de espaldas.

El animal está vivo, a diferencia del carruaje, que está muerto, y aunque sea dócil, no puede permanecer en un mismo estado todo el tiempo.

Si ve una brizna de hierba e intenta mordisquearla, puede girar bruscamente el cuello, e incluso el más mínimo movimiento puede asustar al hombre que va a caballo.

Du Heng dio dos vueltas al patio y le sudaba la espalda.

Se bajó del caballo y agitó la mano: "No puedo ir a la academia cuanto antes, conduzcamos primero".

Qin Xiaoman se rió y lanzó la cuerda a Da Zhuang: "No estoy seguro de que vayas a cabalgar hasta la academia tan pronto, nadie sabrá si caes en la zanja en la oscuridad".

Du Heng suspiró, pensando que Mu Tigui le había invitado cordialmente a ser miembro del Museo de las Seis Artes, y que con sus habilidades ecuestres, lloraría y lloraría cuando subiera al caballo, temiendo perder también la cara de Mu Tigui.

Era un verdadero dolor de cabeza.

Volvió a la casa y se dio un baño, se puso ropa seca y se sentó en el borde de la pequeña cama mecedora de Cheng Yi, repasando los pasajes importantes que había memorizado en la lección de hoy mientras ahuyentaba a los mosquitos y sacudía suavemente la cama.

La cama está cubierta con un fino visillo, por lo que los mosquitos no pueden entrar volando, así que se quedan en la red, y si nadie se acerca a verlos por un palito de incienso, se pueden ver al menos una docena de ellos, colgados de negro en la red.

Los mosquitos del campo son grandes, picadores y venenosos, a los adultos les pueden salir grandes bultos rojos durante un par de días si les pican, pero si pican en la delicada piel de un bebé, se le pondrán rojos los brazos.

Cuando Du Heng sacudió suavemente la cama de madera, el catre se balanceó como un barco sobre el agua, y los mosquitos se asustaron y salieron volando.

En ese momento, Qin Xiaoman utilizó una tira de bambú para hacer ruido y cogió algunas telas de araña de debajo del alero y las puso dentro del círculo de bambú para atrapar a los mosquitos.

Las telarañas son pegajosas, y los mosquitos no podrán volver a volar una vez que los círculos de bambú hayan sido barridos por las telarañas.

"Tenemos mucho ganado, y esta casa está cerca del cobertizo, y lo más probable es que los mosquitos crezcan en el estiércol".

Los mosquitos son más abundantes en lugares como estanques de aguas residuales, zanjas de aguas residuales húmedas y zonas de acaparamiento de estiércol, y a menudo se puede oír el zumbido de los mosquitos cuando se pasa por delante de esos lugares.

Qin Xiaoman afirma: "Aunque limpiemos los corrales de los animales siete u ocho veces al día, no podemos mantenerlos limpios todo el tiempo, y si los mosquitos están siempre ahí, habrá más mosquitos en la casa que en cualquier otro sitio. Los niños necesitan vivir en una casa limpia y soleada para crecer bien, así que pensé en buscar madera y construir otro granero para mantener a los animales fuera".